Hermione abrió los ojos lentamente y trató de incorporarse. Estaba aturdida y la cabeza le dolía horrores.
- ¿Dónde estoy? – inquirió, todavía confusa por lo que acababa de suceder en el Gran Comedor.
Una mano le acarició los nudillos y Hermione trató de enfocar la vista hacia la silueta.
- ¿Harry?
- No, Herms, soy Luna.
- Luna...
- Sí. Estamos en la enfermería – explicó, con su voz dulce y siempre tranquila – Te has dado un golpe muy fuerte en la cabeza. Llevas inconsciente algo más de una hora.
Hermione trató de levantarse, pero Luna se lo impidió.
- Aún no, Herms. Primero debe darte el alta la señora Pomfrey.
- ¿Y los demás? – inquirió la leona, nerviosa – Ron, Harry, Ginny... ¿Ellos están... están...?
- Todos están bien – aseguró la chica Lovegood – Están ayudando con los escombros del comedor. Ha habido muchos heridos, pero ninguno de gravedad. Es una buena noticia – sonrió.
La Gryffindor se llevó una mano a la cabeza.
- Y yo... ¿cómo he acabado en la enfermería? Apenas recuerdo nada.
Luna esbozó una sonrisa pícara.
- Alguien te trajo – sonrió – Pero eso ahora no importa. Intenta descansar. En unas horas podrás irte. Estaré aquí si me necesitas – y se marchó a seguir atendiendo heridos.
«¡Genial! Y no me cuenta nada», pensó Hermione para sí, algo molesta. «Tendré que esforzarme en recordar».
Flashback
Hermione estaba en el Gran Comedor. Los gritos del público rasgaban el silencio y hacían eco en las paredes. Ginny tiraba de ella y Ron y Harry corrían esquivando las tuberías y fragmentos del techo que caían desde lo alto. Una persona chocó con Hermione y esta cayó de bruces contra el suelo.
- ¡Ginny! – gritó, pero el bullicio acallaba sus palabras.
Una nueva tubería se desprendió del techo y se precipitó a toda velocidad hacia donde estaba la leona. Hermione no podía moverse, el temor la paralizaba.
«¡La varita, la varita!», pensó, escandalizada, pero sabía perfectamente que no se encontraba entre sus ropas, sino en el vestuario, con el uniforme. «¡Voy a morir!».
- ¡¡Hermione!! – gritó la voz de Ginny desde lo lejos. Era el fin.
De repente, una silueta apareció entre el gentío y el polvo y se lanzó contra el cuerpo de Hermione. El impacto fue brusco, doloroso, pero el individuo abrazó a Hermione con rapidez y ambos rodaron unos metros por el suelo. La tubería cayó estrepitosamente en el lugar que acababan de abandonar, cosa que levantó una enorme nube de polvo y los hizo temblar desde el suelo.
- Granger, ¿estás bien?
La voz de Malfoy sonaba alarmada. El chico aún estaba sobre el cuerpo de Hermione, abrazándola con fuerza por los hombros.
- ¡Granger, responde! ¡Granger!
Hermione abrió los ojos y se lo quedó mirando.
«¿Malfoy? ¿Draco Malfoy me ha salvado la vida?», pensó, confusa por el golpe, el ajetreo y las circunstancias.
- Malfoy, tienes sangre en el hombro – murmuró la chica, apenas sin poder moverse.
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Corazón de bruja (Draco, Hermione y Harry)
FanfictionHarry, Ron y Hermione cursan su sexto año en Hogwarts. Hermione confía en que el curso será tranquilo, pero se equivoca: una sombra se ha colado en el castillo y se dedica a causar problemas tanto a alumnos como a profesores. Hermione ha cambiado:...