Capítulo 14

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— Eh se me olvidaba — digo cuando estoy a punto de salir.

— ¿Qué cosa?

— Tus padres vinieron YoonJi.

— Lo sé y no me importa. Que vean a YoonGi, total uno u otro les sale igual. Para ellos somos lo mismo.

— Bueno, entonces los dejo.

Intento no salir demasiado deprisa de la habitación. Cuando la puerta del dormitorio se cierra detrás de mí, me llevo una mano a la frente y sonrío un poco. Me alegra que a pesar de toda la mierda ellos dos encuentren la manera de ser felices juntos.

Ésta noche solo se habla sobre la clasificación final de la primera etapa. Cada vez que alguien saca el tema, me quedo mirando al otro lado de la habitación y no hago caso.

Mi puesto en la clasificación no debe de ser tan malo como al principio, sobre todo después de darle una paliza a Neul, pero quizá no baste para meterme entre los diez primeros al final de la iniciación, sobre todo cuando se incluyan los resultados de los iniciados nacidos en Osadía.

En la cena me siento con los chicos y YoonJi, en una mesa de la esquina. Yong-Ul y sus amigos están en la mesa de al lado, demasiado cerca para nuestro gusto.

Cuando la conversación en nuestra mesa se estanca, oigo cada palabra que dicen los otros: especulan sobre la clasificación, menuda sorpresa.

— ¿Tenían prohibidas las mascotas? — pregunta Jimin ladeando la cabeza como niño — ¿Por qué?

— Porque no son lógicas — responde Suga con toda la naturalidad del mundo — ¿Qué sentido tiene ofrecer comida y protección a un animal que solo sirve para estropear los muebles y apestarte la casa, y que al final se morirá?

Veo a J-Hope como suelo hacer cuando Jimin y Suga discuten pero él está concentrado en YoonJi. Creo que ahora yo vendría siendo el mal tercio.

— La cuestión es que... — empieza Jimin — Bueno, que es divertido tenerlos. Yo tenía un perro que se llamaba Chimmy. Una vez dejamos un pollo asado en la encimera para que se enfriara y, cuando mi madre se fue al baño, el perro tiró el pollo de la encimera y se lo comió todo. Nos reímos un montón.

— Sí, gracias, eso hace que cambie de idea. Claro que quiero vivir con un animal que se come toda mi comida y destroza mi cocina. — responde Suga — ¿Por qué no te buscas un perro después de la iniciación, si estás tan nostálgico?

— Porque... — responde Jimin mientras pierde la sonrisa y pincha las papas con el tenedor — Ya no me hacen tanta gracia los perros después de... después de la prueba de aptitud.

Nos miramos entre nosotros. Todos sabemos no podemos hablar sobre la prueba, ni siquiera después de elegir, pero para ellos esa norma no debe de ser tan importante como para mí. Para mí el no hablar es protección. Cada vez que pienso en la palabra 'divergente', oigo la advertencia de G-Dragon, y ahora también la de mi madre: "No se lo cuentes a nadie. Peligroso".

—Te refieres a... matar el perro, ¿no? —pregunta Suga.

Casi se me olvida: los que tenían aptitud para Osadía eligieron el cuchillo en la simulación y apuñalaron al perro cuando los atacó. Con razón Jimin ya no quiere tener un perro de mascota. Me tiro de las mangas y entrecruzo los dedos.

—Sí —responde él— Bueno, ustedes también lo hicieron, ¿no?

Primero mira a J-Hope y luego a mí. Sus oscuros ojos se entrecierran y añade:

— ¿Ustedes no?

— A mi me salió Cordialidad — Contesta J-Hope naturalmente. Era de esperarse.

Facción antes que Sangre - VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora