Hope (Serie Love 17)

Cena de etiqueta

Hope

Mi cansancio aumentó.
Si pensé que Travis iba a dejarme en casa puesto que mañana tengo un exámen y necesitaba repasar, no podría estar más equivocada.

-Te he traído un vestido y algunos complementos para que luzcas aun más hermosa esta noche durante la cena.

Y es que por lo visto, estaba invitada a una cena con los padres de Travis para conocerlos finalmente.

No era algo que esperase con ansias.
Apenas hacia un mes que acepté ser la novia de Travis y ya empezaba a estar hasta el gorro de su prepotencia.

No me sentía con ganas de cenar con personas que posiblemente eran todavía más superficiales que él y por si fuese poco, no podía quitarme a Evan de la cabeza.
No era él mismo cuando me despedí y por los comentarios de Travis de camino a este mausoleo, perdón, la casa de sus padres, este había tenido algo que ver.

-Vamos pequeña seductora.
Esa era otra. Ni era ni me consideraba una seductora.
Vivía entre libros.
Amaba leer y viajar, cosa que aun no había podido hacer, y aunque me habían gustado chicos antes e incluso me besé con alguno, nunca, hasta Travis, he tenido novio.

Cargada con lo que parece una tienda entera me adentro en la casa y le sigo hasta una habitación del piso superior donde me cambiaré.

-Mis padres llegarán en una hora o así. Estaré en la suite de al lado esperando por ti.

Contuve las ganas de hacer un saludo militar cuando cerró la puerta tras salir.

Para cuando me cambié y me vi frente al espejo de cuerpo entero que había junto al vestidor, mi ánimo cayó todavía más.
La chica que me devolvía la mirada no era yo.
Yo no llevaba vestidos desde los cinco.
No estaba cómoda. Quería irme de allí.

Mi teléfono vibró desde el interior de mis tejanos.

Olvidaste tu libro al irte. Se lo daré a Michael para que te lo lleve.

Releí el mensaje de Evan buscando algo, lo que fuera, y no lo encontré.

Gracias. Amo ese libro. Me siento perdida sin él.

Y era así. Evan me lo regaló hacia algunos años y no me había separado nunca de él.

Que hoy hubiese sido la primera vez me dio que pensar.

*****

Decir que mis anfitriones eran unos snobs sería quedarse a medio camino.
A su lado, Travis era altruista.

-Entonces querida, ¿que piensas hacer cuando te gradúes?
-Me gustaría viajar. Llevo años ahorrando para esto.
-Tonterías niña. Travis Michaels III puede llevarte donde quieras en cualquier momento.-hizo un gesto con la mano quitándole importancia a mis palabras.

Yo no quería que nadie pagase por mi sueño.
Cada céntimo que recibía por mi paga o con los trabajos a los que me presenté estaba destinado a viajar.
Quería recorrer Europa hasta que mi dinero se agotase.

-Gracias pero no espero que nadie pague por algo que quiero.
-Oh, pequeña seductora, mi misión es cumplir todos tus sueños. Incluso los más locos.-Travis cogió mis manos entre las suyas y las besó antes de soltar la bomba.- La verdad es que podríamos hacer ese viaje este verano justo después de la boda. Sería una gran luna de miel.

Apartó su silla y se dejó caer sobre una rodilla antes de mostrarme el diamante más grande que vi nunca.

Espera... ¿Qué?

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eleiquim no sabes como me acordé de ti al final de este capítulo.