Solsticio

A-11

  Después de un largo día para el peli rosado y un gran día para la albina fueron de nueva cuenta a la casa de ella para preparar las maletas para el viaje de unas dos semanas en Alvarez mientras ella hacia sus maletas el hijo de Igneel esperaba en la sala mirando a la nada, pensando en nada en realidad hasta que de verdad se aburrió y subió para ver si podía ayudar en algo, al subir al primer cuarto vio como ella metía en la gran maleta su lencería provocativa.

Mira- por si acaso - dijo con una sonrisa acompañada de un gran sonrojo, el también se sonrojo y una risa traicionera alertó a la maga de su presencia.

Mira- que ocurre Natsu?- Se puso enfrente de la maleta tratando de evitar que el viera su contenido con un gran sonrojo.

Natsu - quería saber si te puedo ayudar- le demostró una sonrisa.

Mira - a no... Pero entra me gustaría platicar con tigo.- metió rápidamente otra prenda para evitar que el lo viera, el se sentó en la inmensa cama a un lado de toda la ropa que ella preparaba.

Natsu - y bien de que quieres hablar?- la miró mientras ella seguía empacando.

Mira- crees que... Mmmm... No se... Que yo le caiga bien a tu hermano- no lo miro pero el sabia a lo que se refería.

Natsu - yo dijo que si... Es más estoy seguro...- Se levantó de su cama y se acercó a ella, tomando su mano izquierda donde tenia su listón.

Mira- si estas seguro... -Lo volteo a ver pero no esperaba tenerlo tarde serca a si que se sonrojo.

Natsu - bien... Ya le hablaste a tus hermanos? - Se aparto de ella unos pasos.

Mira- No... No le dije nada... Ellos ya son grandes y tienen otras cosas de preocuparse... A demás si les dijo probablemente se opongan- termino de meter las cosas.- pero dime como nos vamos?- tomo la valija y una bolsa algo grande donde se veía el vestido que Natsu le había comprado.

Natsu - eso es fácil mi hermano me enseño un truco- le guiño un ojo y en el centro de la habitación salió un círculo mágico y entonces una luz roja segó por unos segundos a Mira.

???- bienvenidos a Alvarez Señor y señora Dragneel... Nosotros llevaremos sus cosas a su habitación- Mira por estar viendo el gran vestíbulo en donde se encontraban no puso atención a la forma en la que se dirigieron con ella y Natsu por casualidad del destino encontró galletas y por comer también no puso atención, al cabo de unos minutos fueron giados a un gran salón en donde se encontraban los trece Spriggan sentados, y dos asientos vacíos justamente enfrente del emperado

Zeref - mucho gusto mi nombre es Zeref Dragneel hermano de Natsu - dijo serio. 

Mira- soy Mirajane Strauss... Mucho gusto- al finalizar de decir eso mostró su típica sonrisa.

Brandish- mmm a si que tu eres la novia de Natsu - dijo con una voz juguetona.
Mira- eh... N...no... Soy su c...ompañera de gremio- se sonrojo y el mencionado se estaba ahogando con la comida al escuchar eso.

Dimaria- Entonces porque tienes ese hechizo en el brazo izquierdo? - Miró a los dos.

Mira- bueno ya se lo hice porque no quería que le pasara nada es para protegerlo- dijo tomando el brazo del mago mostrando su muñequera que bordo.- y lo vi en un libro en el gremio - se sonrojo.

August - si no mal recuerdo y no me equivoco... que nunca lo hago, esa magia es para protección de una pareja entre sí... Y la prueba esta en que en ti hay magia de él y en el hay magia tuya.- dijo restandole importancia.

Ya sin decir nada cenaron y se dirigieron cada quien a su recamara siendo guiados de nueva cuenta por un par de soldados. 

Soldado - bien hemos llegado si me disculpan..- empezó a marcharse.

Natsu - Espera y donde es mi cuarto?- pregunto mirando por todo el pasillo buscando otra puerta.

Soldado - es allí señor si me disculpa-

Natsu - pero ese es el cuarto de Mira- señaló de nuevo el cuarto.

Soldado - si compartirá habitación con la señorita sin mas me retiro- y tal cono lo dijo se fue dejando a los dos magos mirándose.

Mira- ya que no logramos nada por que no mejor entramos - abrió la puerta dejando ver una gran recamara que por si sola sería tonada como un departamento bien equipado. 

Mira- vamos a dormir- se dirigió al baño para cambiarse de ropa.

Natsu - pero... Solo hay una cama- por alguna razón el estar solo en el cuarto con Mira lo ponía nervioso.

Mira- si no mal recuerdo has dormido con Lucy y Erza¿no?-

Natsu - Si pero... No quiero molestar- 

Mira- la cama es muy grande para mi sola quédate- sonrió y un aura oscura la rodeo el solo asintió con la cabeza y ella siguió su camino al baño, al entrar dejo salir un gran suspiro y se miró rápido en el espejo, al hacerlo se miró y estaba toda colorada pues iba a compartir cama con el mago de fuego y una sonrisa se formó en sus labios, se dio una ducha rápida mientras pensaba en lo que le habían dicho en la cena, en verdad parecían novios?, bien sabia que ella ya tenía sentimientos por el mago pero al no saber si seria correspondida decidió algo en esas dos semanas pasaría a la ofensiva.

Al salir del baño vio cono Natsu se quitaba su ropa y de nueva cuenta vio las cicatrices que tenía por casi todo su cuerpo por unos segundos se quedó mirando hasta que se acerco a él y toco una de ellas.

Natsu - Mira?... Espera haces cosquillas - dijo entre risas pero al ver que lágrimas salían de los ojos de la maga se preocupó.- Que sucede? - Pero no recibió respuesta el solo optó por abrazarla y guardar silencio por unos minutos.

Mira- vamos a dormir - se separó de él dejándolo desconcertado pero se le paso al ver que ella vestía un pequeño short y una camisa pegada, al recostarse le dio la espalda a la maga pero ella lo abrazo.

Mira - te puedo pedir un favor? - su voz era suave.

Natsu - mientras lo pueda hacer el que sea- contesto de la misma forma volteando para ver a la maga.

Mira - me puedes abrazar de nuevo? - No lo miraba solo mantenía su mirada a su pecho, el no contesto pero lentamente y con sumo cuidado enrollo a la maga entre sus brazos.

Mira- te puedo pedir otra cosa?- El mago asintió de nueva forma.- No me dejes sola por favor, no sueltes mi mano - al escuchar eso se sorprendió pero solo apretó el abrazo.

Natsu - nunca... - el sabia que de igual forma había empezado a sentir algo por la maga desde ya varias lunas atrás pero por miedo a ser rechazado por ser quien es no dijo nada, la maga al escuchar la respuesta alzó la mirada y se encontró con una de las sonrisas más lindas y grandes que él le pudo dar, él solo acercó su cara a la maga y dio un beso en la mejilla de esta, causando un gran sonrojo poco apreciable por la poca luz de la habitación.