Axiuru

Cap.60-La Llamada

-"Yo, Jonathan Gale, prometo solemnemente..."

Jonathan había jurado como presidente hacia un par de días y en la televisión aun repetían el suceso, a Ezara le gustaba empezar el día con el noticiario y por eso siempre lo escuchaba mientras se arreglaba por las mañanas; se puso el conjunto de la chamarra rosa que le era más cómodo, se llevo las manos tras la cabeza para atarse el cabello y entonces los sintió.

-Esto es...-era blandito y elástico, como un huevo tierno-¡Ezara!

-¿Qué sucede?-entro enseguida-¿estás bien?

-Si...no, no sé, ¿puedes venir y revisar esto?

Así lo hizo, en la parte posterior de la cabeza de Axiuru se percibía una ligera protuberancia similar a un saquito blanco, Ezara experimento una mescla de regocijo y pena.

-¿Es lo que creo?

-Sí, el momento llego, llamaremos al clan.

-Dios mío.

-Debo avisar a Nash, espera aquí.

-¿Por qué a Nash?

Porque el profesor era el encargado de la planeación a gran escala, con sus contactos en la NASA había mantenido un ojo puesto en el sol en búsqueda de actividad anómala.

-Las hembras mayores comienzas su ciclo mucho antes que las primerizas-expuso, cual experto en la materia-es su señal para moverse.

-Nuestro padre exploro el área antes de enviarte, se detendrán en la Luna y allí esperaran a que les llamemos.

-Y aquí vengo yo con buenas noticias-les mostro unas fotografías-estas imágenes son de una explosión solar captada hace tres meses, pareciera que expulso un cometa de buen tamaño, el cometa paso detrás de la Luna y se esfumo.

-¿Hace cuanto?

-Apenas unos días, pero yo no los dejaría allí mucho tiempo, si le quitan mucha masa a la Lina lo vamos a resentir.

-Que suban tu bote al techo, iremos al anochecer.

-¿Bote?-dijo Axu-¿al techo?

Necesitaban a Nash para algunas mediciones y Ezara le había prometido que estaría allí en plan Embajador de la Especie Humana, pero no había forma de que el hombre llegara a la isla solo y por sus medios, la solución fue montarlo en un botecito y que los hermanos le cargaran hasta allá.

-¡Esto es estupendo!

-¡No se mueva tanto, profesor!

-Debí ponerle un paracaídas...

----------------------------------------------------

Axu pasó a contarle las novedades a Gid antes de irse, este seguía rumiando las noticias y ya iba de salida para su casa cuando se encontró a Richard en el pasillo, llevaba algo envuelto en una cobija bajo el brazo.

-Quinta puerta a la izquierda...-iba tanteando la pared.

-Señor Ferrer-y agrego, por aquellas-soy Gideon.

-Reconozco tu voz, muchacho.

-¿Qué hace aquí?

-Traigo una cosa que Axu olvido en mi casa, Paris la encontró mientras limpiaba.

-Ella no está.

-Eso me dijeron en recepción, por eso pensé en dejarlo contigo.

Le entrego el objeto y al desenvolverlo Gid vio que se trataba de un cilindro metálico, herrumbradicimo, oloroso a mar, y cuya forma recordaba vagamente a una pierna humana.