Volví a la sala principal luego de tomarme unos minutos, creo que más fue una hora. Me senté en medio de Harry y Justin, en silencio.
Sabía que todos excepto Harry, en especial Justin, me estaban mirando con una especie de curiosidad mezclada con preocupación.
-Se puede tocar la tensión aquí- Bromeó Louis, cortando un poco el ambiente silencioso.
-Tengo que irme- Dije, para tomar mi abrigo y salir casi corriendo de allí.
Pero lo que no esperaba era que me siguieran, quizás de Justin sí, pero no de Harry.
Y menos de los dos juntos.
-¿Qué pasa ___?- Dijo Justin detrás de mí.
Simplemente no respondí, me dí vuelta y lo miré, para luego ver detrás de él a Harry.
-Nada… solo… Te amo- Dije, para abalanzarme sobre él y besarlo, mientras de mis ojos caían algunas lágrimas.
Luego me quedé un largo rato abrazada a él. Por encima de su hombro pude ver a Harry mirando toda la escena.
Vi como sus ojos comenzaban a cristalizarse y como apretaba su mandíbula, lo que de verdad me puso muy triste, pero debía olvidarme de él.
-Vamos- Susurré al oído de Justin, con la voz quebrada.
Cuando estacionó el auto, me dí cuenta de que no estábamos en mi casa, sino en la suya. No pregunté que hacíamos allí, simplemente me bajé.
Él de seguro quería saber qué me sucedía.
Subimos a su habitación y él cerró la puerta.
Me senté en su cama y él se sentó a mi lado, para luego mirarme, expectante.
-Justin, yo…
-Ya sé lo que pasa- Aseguró, y me dí cuenta de que él también tenía los ojos cristalinos y su rostro mostraba tristeza.- ____, no puedo morderme la lengua para siempre. Puedes esconderte bajo tus historias, puedes decirme que puedes controlar de quién enamorarte, pero no me tomes como un idi.ota. Puedes decirme que no hay nadie más que yo, puedes decirme que soy el único, puedes mirar dentro de mis ojos y pretender todo lo que quieras, pero yo sé que mientes.
-No es así, Justin- Sollocé.
-¿Vas a decirme que no pasó algo con Harry allí? ¿O en el set de fotografía?
-No puedo mentirte, no puedo negarte que algo sucedió. En el set él solo comenzó, yo intenté ignorarlo, lo juro. Luego… luego nos besamos. Pero me sentí… horrible. Perdón, por favor, perdóname. Es verdad que tú eres el único, Harry… él no es nada para mí. Cuando lo besé me dí cuenta de que en realidad te amo, que no puedo vivir sin ti. Tanto como me salvaste en la playa, me estás salvando ahora, eres el único que me salvó de la soledad, de la muerte. La vida ya no significaba nada para mí, pero llegaste tú. No puedo perderte, Justin– Las lágrimas salían de mis ojos sin parar. De verdad no quería perderlo.
-Yo confío en ti, te lo he dicho. Y tampoco puedo perderte, te amo más que a nadie, ____-
Dijo, mientras una lágrima resbaló por su mejilla- Y no voy a perdonarte, porque no tengo por qué, nunca me enojé contigo… es solo que… Me doy cuenta de que Harry dejó de ser mi mejor amigo hace mucho tiempo, solo que nunca abrí los ojos para darme cuenta.
-No digas eso… No puedo hacerte separar de tu amigo… No debería meterme entre ustedes, los amigos van antes que cualquier otra cosa- Sollocé.
-No antes que el amor- Dijo, para luego besarme.
-Justin- Dije, separándome de él lentamente- ¿Qué… harás con Harry?
-Nada, es lo mejor que puedo hacer. Solo… Ignorarlo, no juntarme más con él… separar nuestra amistad como debí hacer hace mucho.
-Pero… yo tengo que hacer su campaña- Me lamenté- No puedo separarme de él.
-Puedo confiar en que no harás nada tonto, ¿verdad?- Asentí y sonreímos- Mira, ya te
conozco y te amo… es raro.
-Yo también te amo, y apenas nos conocemos. ¿Sabes? Valió la pena casi morir.
-Que cosas tan feas dices- Carcajeó- Buscaré una película para ver, ¿Qué quieres ver?
-No lo sé, cualquier cosa. Mejor si es de terror, realmente amo esas películas- Justin me miró y luego rió.
-Sabía que eras diferente- Susurró, para luego desaparecer por la puerta.
Me recosté en su cama. Todo me daba vueltas, aunque quisiera demostrar lo contrario.
Solo podía pensar en un Harry distinto al que conocí, en Harry llorando y triste.
Por mí.
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Underwater <H.S J.B y TN>
Teen FictionUno la salvó de la muerte y le reveló la otra cara de la vida. El otro, le enseñó a enfrentar sus miedos y a vivir la vida. Uno dulce, otro rebelde. Dos chicos totalmente paralelos, con una sola similitud: el amor a una simple chica, quién deberá es...