Tengo una mala noticia.
Nunca he sido buena dando malas noticias, de hecho siempre intento evitar darlas y cuando me toca hacerlo le doy muchas vueltas a cómo tengo que hacerlo y qué voy a decir; me preparo incluso un discurso. He estado pensando varios días cómo deciros qué ha pasado, cogí una libreta y comencé a escribir cómo os iba a decir las cosas porque no solamente me he fallado a mí misma, os he fallado a vosotros, pero he decidido tirar lo que escribí a la basura y simplemente comenzar por el principio. Os merecéis saber todo y que sea honesta completamente porque sí, puedo evitar dar las malas noticias, pero cuando me toca hacerlo, a sinceridad no me gana nadie.
Los nuevos lectores no lo sabrán pero los antiguos saben que yo iba a publicar esta historia hace muchísimo más tiempo y que cancelé eso; bueno, comento esto porque los nuevos lectores deberán saberlo ya que será relevante para más adelante. Es un pequeño inciso.
Quiero empezar diciendo que yo soy de España, no soy de Madrid (aunque ahora esté estudiando allí como algunos sabréis al seguirme en las redes sociales o si habéis leído algunas notas que he dejado en mis historias), sino que soy de otra comunidad autónoma y de un pequeño pueblo de 4000 habitantes. El libro me lo iba a publicar el gobierno de esta comunidad autónoma, bueno, el teniente alcalde de mi pueblo iba a mover hilos para hacer eso posible y lo hizo y yo anuncié que iba a publicar mi libro de nuevo (aunque lo cancelase en el pasado, yo dije que tardase más o menos, mi idea era publicarlo sí o sí porque di mi palabra). Una mujer se puso en contacto conmigo y ella me pasó con un hombre que me pidió que le pasase mi libro para leerlo y revisarlo.
Yo edité mi libro; cambié faltas ortográficas, quité palabras que sobraban, usé sinónimos, reduje el uso de palabras mal sonantes e incluso las escenas sexuales las hice más sutiles y menos explícitas. También os pregunté a vosotros qué queríais que hiciese respecto a la portada y el título porque soy consciente de que muchos de mis lectores y lectoras tenéis a lo mejor doce o trece años y si os presentáis con esa clase de libros en casa, vuestros padres probablemente a parte de quemar el libro os monten la de sanquintín, así que busqué varios métodos para que todos los que pudiéseis y quisiéseis comprarlo, lo hiciéseis.
Pero aquí viene la mala noticia.
El hombre que me lo iba a publicar, cuando leyó el libro no recibió lo que esperaba. Yo tengo muchos problemas familiares, de salud, etcétera, y lo que quería es que escribiese una biografía para explotar mi vida personal e íntima. Que metiese mi salud, mi día a día, mi vida, mis problemas... Absolutamente todo. Quería lucrarse a base de mis caídas y de las cosas que me salían mal. Y cuando se dio cuenta de que la historia era ficticia comenzó a poner pegas, ¡prácticamente me estaba diciendo que no iba a aceptar ese libro! Quería que el título lo cambiase completamente, que las escenas ''sexuales'' las quitase cuando realmente las he editado de tal manera que ni si quiera se describen... Bueno, le puso pegas hasta a la trama de la historia en sí. Debido a esto, evidentemente yo me negué a cambiar mi historia (más de lo que ya no lo había hecho).
Así que esa es a mala noticia. Por ahora el libro seguirá aquí; yo os prometí que lo sacaría a la venta y así es y ahora que estoy en Madrid buscaré la manera de hacerlo pero no podrá ser este año. Siento mucho fallaros una vez más. Me he fallado a mí misma pero me duele más haberos fallado a vosotros después de haberos ilusionado tanto y haberos prometido que estaría para finales de este año. Haré todo lo posible para que el 2018 sea el año de publicación aunque no voy a prometeros nada para que me vuelvan a fallar a mí y me obliguen a fallaros a vosotros que estáis apoyándome incondicionalmente.
Mañana pondré una nota un poco más alegre. Hoy tocaba la mala noticia, dejo la buena para mañana.
Os quiero y espero que entendáis la situación. Lo siento muchísimo, de todo corazón.
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Amor y un chico no tan bueno. (Terminada)
Teen FictionAna, una chica de dieciséis años. Es responsable, buena hija, buena hermana, en todo intenta ser perfecta. Nunca ha hecho locuras y sigue las normas, hasta que lo conoce a él, Álex. Es problemático y todo un experto en el sexo, cosa que Ana desconoc...