Propiedad Privada (CHERIK - AU)

Extra

Charles caminó por uno de los pasillos de su escuela, observando con tranquilidad. El silencio reinaba puesto que todos los alumnos estaban en clase, y disfrutó de la calma que raramente reinaba allí. En un mes cumpliría seis años desde que la había inaugurado y tenía preparada una celebración para festejar el aniversario. Aún le costaba pensar que había pasado tanto tiempo desde que Erik le diera la noticia de que podría cumplir su sueño. Sin duda uno de los días más felices de su vida.

Entró a su oficina, y tras sentarse en su escritorio comenzó a organizar los papeles que tenía pendientes del día anterior. Estaba concentrado en su tarea cuando la puerta se abrió de golpe, dejando entrar a un Pietro indignado.

- ¡Renuncio! - Pietro exclamó colérico, con las mejillas rojas y sosteniendo su abultado vientre. 

- ¡Oye, no! Eres de mis mejores profesores, ¿por qué? - Charles inquirió con suavidad. Desde que había comenzado su embarazo, Pietro era un torbellino de emociones violentas y había que calmarlo con paciencia.

- No puedo más con ésto. ¡Logan gana! Estoy harto de sus estúpidos celos, cree que hay un alumno que está enamorado de mi. DE MI! Puedes creerlo? Tengo más circunferencia que un planeta, y mis tobillos desaparecieron hace dos meses. Y él aún así cree que los jovenes me miran! No lo soporto más! - El joven repuso indignado y Charles tuvo que hacer un gran esfuerzo por no reír.

- Tranquilo, cariño. Logan es un imbécil pero te ama. Dudo realmente que quiera que renuncies. Es sólo que es posesivo por deporte, no le hagas caso. Yo hablaré con él... - 

- ¡Pietro! - Logan irrumpió con brusquedad en la oficina y Charles rodó los ojos con fastidio. Justo cuando empezaba a calmar al omega...

- ¡Largo de aquí! No quiero ver tu peluda cara por el resto del día! - Pietro exclamó con histeria.

- Pues soy tu esposo y me temo que no tienes otras opciones que verla! - El alfa repuso molesto.

- ¡Ya basta! Estamos en la escuela, no puedo permitir éste escándalo. Logan, deja de comportarte como un idiota y no hagas enfadar a Pietro. Está sensible, espera un hijo tuyo, y tú lo único que haces es proyectar enemigos en sus alumnos? -

- Sí, cree que todo el mundo va detrás de mi! - Pietro agregó indignado.

- Yo... yo no estoy diciendo eso. Sé que en su estado... -

- En mi estado? Me estas llamando gordo, Logan? Eso es lo que estás intentando decir? - Pietro chilló, enfadado.

- No, mi amor. No es lo que estoy diciendo... - El alfa suspiró, cansado.

- Pietro, cariño... entiendo como funcionan las hormonas en el embarazo, lo pasé con Wanda pero por favor has el esfuerzo de moderarlo. - Charles aconsejó con dulzura y Pietro asintió tímidamente.

- Y tú, Logan, deja las idioteces. Supera que tu esposo es atractivo y deja que lo mire quien quiera, aún así es tu pareja y te ama a ti. Así que calma tus celos! - Charles lo reprendió y Logan gruñó en respuesta.

- Así que... espero que lo resuelvan. No quiero que ninguno renuncie, son los mejores profesores que tengo y además son mis amigos. Por favor, hagan el esfuerzo. Los necesito aquí... ahora, arreglense... -

Logan se acercó a Pietro y tomó sus manos, depositando un beso en ambas.

- Lo siento, amor. No era mi intención hacerte enfurecer. Te amo... me perdonas? -

- Sí, te perdono. Yo también te amo, Logan... - El omega se paró de puntitas y depositó un suave beso en los labios de su esposo. El beso comenzó a subir de tono rápidamente, y Charles tuvo que toser varias veces para que la pareja se soltara.