Sweet Blood [BTS versión] -EN EDICIÓN-

Capitulo 1

Solo el sonido del motor del automóvil me acompañaba durante la fría tarde de invierno en que comencé mi viaje. Todo por que el chofer no era de esas personas muy sociables y solo estaba concentrado en no chocar con algún árbol del exterior, ya que la espesa neblina no lo dejaba ver el camino. Pero bueno, mientras les contaré mi historia de vida.

Me llamo Shin Ye Ji, tengo 17 años y seis meses, mis padres fallecieron en un accidente y estuve viviendo con mi abuela hasta que ella falleció. Tuve que ir a un orfanato ya que apenas tenía 10 años cuando eso pasó.

Nadie me adoptó durante siete años, ya que era muy grande. Las parejas solían buscar bebes recién nacidos, aunque la familia qué me adopto ahora...

- Ya llegamos - el automóvil se detuvo -

- ¿Qué? - miré hacía el frente - Pero, no hay nada en este lugar.

- La casa esta a unos metros. No puedo entrar con el auto, ya que no se ve muy bien -

Solte un suspiro lleno de frustración, al darme cuenta de que el chofer no iba a arriesgarse a avanzar.

- Esta bien, gracias -

Tome mi bolso y la maleta, para bajar del automóvil. Para mi suerte la lluvia se habia detenido y la luna, iluminaba el camino.

El problema fue qué me di cuenta que al escoger tenis blancas para crear mi outfit fue mala idea. Quedaron llenas de barro y se me humedecieron los pies.

Sentí como una rama crujió detrás de mi, era muy probable que en el frondoso bosque algún animal estuviera intentando comerme. Así que mejor apresure el paso y note la presencia de una gran reja al frente eso significaba que ya estaba cerca.v

- Hola - mi voz resonó como eco en la gran mansión, tras abrir la puerta - Hoolaa...

Esto debia ser una broma, alguien me envio a una mansion a vivir con fantasmas que decidieron adoptarme. Solte un bufido.

¿Cómo pude ser tan ciega?. Nadie adopta a alguien en sus 17 años.

Senti que algo cayo a mis espaldas, pero al ver que habia dejado la puerta abierta supuse que el viento lo habia tirado. Deje mi maleta a un lado y me acerque para recoger aquel libro algo empolvado que habia caido al suelo, era una edición bastante antigua de Hansel y Gretel, lo puse en el estante y note la presencia de un espejo junto a este.

Me puse frente a el, para limpiar mi rostro un poco que estaba bastante salpicado por algo de barro tras caminar tanto, y entonces fue cuando me percate de una sombra masculina detrás de mi.

- Hola, ¿Quién... - en cuánto me voltee ya no estaba, a lo que mi corazón respondió con algo de palpitaciones alocadas. Sacudí mi cabeza para tranquilizarme un poco y entonces fue cuando aquel rayo ilumino todo el lugar, mostrando nuevamente una sombra, pero esta vez, de un animal que en verdad odiaba - ¡¡Ahhh!! ¡Aléjate maldito murciélago!