Cuando te encuentre.

021 | Cuando no sale como lo planeo ♡

El helado frio comenzaba a hacer titiritar a la muchacha, a pesar de que se había puesto un suéter este no era el ideal para poder estar a las afueras, mucho menos en invierno.

Carlos al darse cuenta de que la chica sufría de frio decidió darle su chamarra pero ella lo detuvo rápidamente.

Aun sentía algo por el chico no lo iba a negar pero necesitaba mantener una distancia prudente porque no quería volver a salir lastimada.

—Natalia...—Ella lo interrumpió.

—¿Qué haces aquí, porque viniste? —Le pregunto demasiado enfadada.

—He venido por ti, desde el primer día que no apareciste en la escuela no pude evitar el presentimiento de que algo malo había sucedido así que comencé a buscarte y mira aquí estas.

La chica sonrió un poco pero enserio que no quería salir lastimada.

—¿Co...como sabes que he estado enamorada de ti?

—Tus amigos me lo han contado.

—Creo que tenemos muchas cosas por platicar. —Dijo la chica, él asintió y siguió a la chica que se había sentado en las escaleras que estaban en la entrada.

Natalia nunca se imaginó que esto llegaría a pasar así que en realidad no sabía cómo reaccionar, que hacer o que decir, ella pensó que nadie iba a notar su ausencia y que cuando regresara solo bastaría con una conversación para que así sus amigos estuvieran al tanto de lo sucedido pero no fue así, ellos la buscaron pero en especial él.

—Lamento que no haya sido el mejor contigo en estos últimos días y también lamento que por mi culpa hayas salido lastimada—Se disculpó el chico apenado.

—No es tu culpa, al final del día no sabías que estaba enamorada de ti.

—¿Estabas, acaso ya no lo estás? —Pregunto Carlos dolido.

Natalia se quedó callada por un momento.

Tenía dos opciones, una era mentirle y la otra era decirle la verdad, después de todo lo que estaba pasando sabía que mentir ya no era parte del juego.

—Aun lo estoy pero tu estas con Laura ¿O me equivoco? —Pregunto ella rabiosa.

—Lo mío con ella termino el mismo día que comenzó, aunque en realidad nunca fuimos nada, Laura solamente quería un nuevo juguete.

—Supongo que te diste cuenta demasiado tarde. —Le dijo ella encogiéndose de hombros.

Carlos no dijo nada.

Sabía que había cometido un error al creer en lo que Laura le había dicho pero al igual que Natalia él se había enamorado y había salido lastimado.

—¿Por qué no me marcaste?—Se atrevió a preguntar.

—¿Perdón?—Pregunto la chica enojada.

—Lo que escuchaste ¿Por qué nunca me llamaste? ¿Por qué le llamaste a Mauricio en vez de a mí?

—Porque Mauricio es mi mejor amigo—Respondió rabiosa.

—Pensé que yo era tu mejor amigo.

—Tú solamente eres el chico que me rompió el corazón.

Aquellas palabras fueron como una daga clavada en el corazón del chico, estaba dolido pero no se iba dejar vencer tan fácil.

Carlos se hincó frente a la chica para poder mirarla a los ojos.

Natalia rápidamente volteo a verlo, ella estaba al borde de las lágrimas, no solo estaba confundida si no que se sentía vulnerable.

—Natalia sé que cometí uno de los errores más grandes de mi vida, no me fije en la chica que debía de fijarme, desde un principio tú fuiste la que estuvo conmigo, sin importar nada tu siempre me apoyaste y tal vez me tarde muchísimo en darme cuenta de que estoy enamorado de ti.

No estoy aquí solamente porque estaba preocupado si no porque también vine a decirte lo que te quise decir desde el primer día que desapareciste, estoy irremediablemente enamorado de ti.

Pequeñas lágrimas comenzaron a salir del rostro de la chica provocando que esta se tapara la cara rápidamente, no sabía qué hacer.

—Mi niña, por favor di algo.

Cuando Natalia se descubrió la cara las lágrimas ya habían parado.

—Escuche vagamente que Nina le estaba contando a mi hermano que ustedes deben de regresar pasado mañana, hablare con mi padre para que la hija de su amigo les de habitaciones económicas en su posada.

La chica se incorporó rápidamente para acto seguido entrar a su cabaña, dejando al chico con el corazón roto.

Tal vez, ya era demasiado tarde.