El avión del muchacho aterrizo haciendo que este fuera el primero en pararse, él había deseado poder cerrar los ojos mientras iba hacía Argentina pero no fue posible porque no se podía quitar en mente todo lo que estaba arriesgando por la chica, pero en realidad no le importaba.
Salir del aeropuerto fue como recibir un golpe de la realidad, no sabía a donde se tendría que dirigir para tomar un taxi o algo que lo ayudara a llegar con la chica, se encontraba perdido.
A pesar de que ya había estado en aquel lugar los nervios lo estaban cegando haciendo que olvidara todo por completo.
—¿Carlos?—Dijo una voz femenina llamando la atención del chico.
—¿Giselle?—Pregunto demasiado emocionada para correr a abrazar a la chica.
—¿Qué haces aquí? Hace tiempo que no sé nada de ti, desde que me mude con mi padre ya nunca más supe de ti.
—Han pasado muchísimas cosas desde entonces, no sabes cuánto te extraño—Dijo el muchacho dándole otro abrazo.
Giselle, la primera y única novia seria que tuvo el muchacho en la preparatoria.
La historia es demasiado sencilla, Carlos y Giselle se conocieron en el primer año, ambos eran amigos pero se notaba que entre ellos pasaba algo más, no tardaron mucho en confirmar que ambos eran novios y tuvieron una buena relación hasta que tuvieron que terminar porque la chica se mudó de ciudad a causa del divorcio de sus padres.—Y yo a ti, pero ¿Qué estás haciendo aquí en mi bella Argentina? —Pregunto la muchacha separándose del chico.
—Bueno, es una historia larga, tengo que ir a Salta.
—¿Salta? Creo que el destino quería que el día de hoy tú y yo nos encontráramos, voy camino a Salta.
—Me gustaría ir contigo pero no quiero incomodarte en lo absoluto.
—Para nada, vamos Carlos terminamos en buenas condiciones, además de que terminamos por culpa de la distancia, puede que lo nuestro aun tenga salvación, después de todo estas aquí.
El muchacho no dijo nada y comenzó a caminar hacía el estacionamiento, causando cierta incomodidad en la chica pero no le quedo de otra que seguirlo y guiarlo hacía su auto.
Que Giselle apareciera en su camino había complicado aún más las cosas, sabía muy bien que los sentimientos por la chica aun no estaban apagados del todo.
La razón por la cual nunca había tenido una relación sería fue a causa de ella, Carlos aún tenía la esperanza de que Giselle regresara y pudieran retomar en donde se habían quedado pero ahora Natalia estaba en su vida y no sabía qué hacer.—Nunca contestaste por completo mi pregunta así que te haré otra ¿Por qué vas a Salta?
—Natalia.
—¿La Natalia de Mauricio? —Pregunto la chica confundida, que la recordara de aquella manera había hecho enfurecer al chico.
—No entiendo porque la recuerdas así, pero si ella.
—La recuerdo así porque recuerdo que cuando compartíamos curso siempre estaban juntos, como uña y mugre pero ¿Por qué te enfadas, que sucede entre ustedes?
Carlos volteo a ver a la chica pero no dijo nada al poco tiempo regreso su vista hacía la carretera, ya estaba en camino y no había rastro de trafico, si mantenían la velocidad que llevaban llegarían antes del atardecer.
—Carlos te conozco demasiado bien, te recuerdo que fuimos novios por más de un año y sé que estas celoso, tenemos mucho camino así que tengo tiempo para escuchar la historia.
—¿Estas lista para que te rompa el corazón? —Pregunto en forma de broma.
—Creo que puedo soportarlo.
Carlos suspiro y comenzó a contarle todo lo que había sucedido desde que ella se había marchado. Le conto acerca de Laura, de Natalia, del viaje, de lo sucedido entre Mauricio y Natalia, acerca de lo que Oscar le había contado, en tan solo unos minutos el chico ya le había contado absolutamente todo.
El muchacho se sintió bien al liberar todo lo que traía dentro con alguien de confianza y alguien que él quería demasiado.
—Comprendo a Natalia, nadie se puede resistir a tus encantos, pero hablando enserio ¿Por qué ella no regreso contigo?
—No tengo la menor idea, conozco a Natalia como la palma de mi mano y sé que algo la está deteniendo en ese pueblo y no me importa cuál sea el riesgo yo iré por ella.
—Wow, creo que es oficial—Dijo Giselle observando al chico.
—¿Qué es oficial? —Pregunto el muchacho confundido.
—Que te he perdido para siempre, estas más enamorado de Natalia de lo que tú crees estarlo.
Ambos no dijeron nada y regresaron sus vistas a la carretera, estaban a tan solo unos kilómetros de llegar y todas las dudas que Carlos tenía acerca del viaje se habían aclarado gracias a Giselle.
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Cuando te encuentre.
RomanceElla está enamorada de él. Él solamente la ve como una amiga. Ella está cansada de intentar luchar por él. Él la ve como la hermana que nunca tuvo. Ella busca una salida. Él busca una oportunidad. Ella huye sin dejar rastro o incluso decir algo. Él...