Lie to me. (Frerard)

Volviendo a la rutina...

Involuntariamente, Bandit había unido a su padre y al esposo de este nuevamente. No toleraba verlos juntos y era porque creía que su papá era demasiado para ese hombre que solo lo hacía poner triste, le hacía llorar y le hacía sufrir. Y era por eso que se había enojado un montón cuando su papá le había dicho que él y Frank se irían un fin de semana completo a un resort en Orlando y que tendría que quedarse con su tía esos días, hasta le dio la opción de ir a casa de su tío Mikey para tener una pijamada con Rowan, pero ella estaba tan enojada que no quiso aceptar nada. Se terminó quedando en casa de Allie, pero demasiado desconforme con la decisión de su papá.

Ya que no tuvieron vacaciones de verano, Gerard decidió gastar el dinero de dichas vacaciones en un fin de semana completo en un resort en Florida para él y para Frank, cuando le informó acerca de la pequeña escapada que se darían, el menor quedó maravillado, era algo que les iba a servir para pasar tiempo los dos alejados de todos y así que el matrimonio recupere la fuerza que había perdido a causa de tantas peleas ocasionadas por ambos. Y en dicho fin de semana ambos la pasaron demasiado bien. Pasearon en la playa, nadaron en el mar e hicieron el amor apasionadamente varias veces durante esos días. Ambos querían que esas pequeñas vacaciones que se habían dado para mejorar su relación no acabasen, no querían regresar a la monotonía de sus vidas. Y lo que más temía Frank era que después del viaje, las cosas volviesen a ser igual que antes... Que Gerard le descuidase nuevamente y no quería eso. Se rehusaba a aceptar la realidad de su vida porque estaba seguro que ya no iba a aguantar más y que todo iba a explotar.

—Gee... —Llamó la atención de su marido cuando regresaron al cuarto de hotel, Gerard le miró atento— En unos días habrá un evento tipo coctel de mi trabajo y tengo que ir con alguien... Pensé en decirle a Bob o a Susan que me acompañase... ¿Crees que si les digo que luchen a muerte para ver quién me acompaña, ellos digan qué si? —El mayor me miró serio, Frank sonrió y se sentó en el regazo de su esposo para besarle.

—Tendrás que meterme a esa pelea a mí también entonces —Frank rio.

—Es este jueves... dime que irás.

—Sí, cariño... voy a ir. Te lo prometo. —El menor asintió, Gerard le dio un beso.

*

Dicha conversación fue el sábado, dos días antes de que regresen a Summit. Y cuando regresaron, ambos fueron a recoger a Bandit a casa de su tía. Frank no quería ver a la niña, Gerard le había contado todo lo que ella dijo con anterioridad y sinceramente le importó un bledo. Hasta rió, porqué ya sabía que la hija de su esposo lo odiaba, no era una novedad para él y se lo dijo a Gerard. También le dijo que él no la odiaba, que no sentía ningún tipo de afecto hacia ella, pero eso era preferible antes que decirle que la odiaba. El pelinaranja agradeció su sinceridad, Frank se disculpó por lo que había pasado en el comedor ese día pero Gerard le había callado con un beso. Él no tenía la culpa de nada.

Al momento de llegar a la casa, se encontraron con las chicas entrando con unas bolsas de la compra en las manos, ambos se bajaron y las ayudaron. Luego, Bandit corrió hasta donde su padre para saludarlo, se abrazaron fuertemente, como si no se habían visto en mucho tiempo. La niña ignoró a Frank y él simplemente le restó importancia. Tampoco es que se iba a morir porque Bandit no lo saludaba, le daba absolutamente igual.

Allie los invitó a cenar, pero Gerard rechazó la oferta, pues ya se había ofrecido para cocinar en su hogar y le había prometido a su esposo que le prepararía su platillo favorito, la mujer tampoco insistió y se despidió de su sobrina. Pero antes que se fuesen, Ballato les detuvo un momento.

—El jueves es mi cumpleaños, quiero verte aquí. —Le dijo a Gerard, Frank miró inmediatamente a su esposo, él ya le había dicho que tenía aquel evento en su trabajo— Bueno, estaría genial que ambos viniesen... —Frank iba a hablar pero el mayor se le adelantó.