Instintos

Tiempo de Vals

Aun le parecía descabellada la idea de acudir a un baile con todo lo que estaba ocurriendo en el pueblo, pero lo que le sorprendía en cierta parte era la capacidad de los habitantes de fingir que nada ocurría mientras que los reportes continuaban indicando algunos atentados por parte de los híbridos. Hermione había ido a investigar , solo que esta vez lo hacían durante el dia.

Como un comunicado especial del pueblo se les sugería a los ciudadanos no salir a carretera a altas horas de la noche, pues ellos atacaban en ese periodo y no escatimarían ningun alma transitando por esos lares. Las patrullas acordonaban los lugares marcándo el límite con el pretexto de que una jauría de lobos estaba por los bosques listos al acecho.

La castaña terminaba su labor cotidiana dispuesta a ir al Grill para tomar una bebida baja en alcohol solo para relajarse; no consideraba conveniente toparse con Damon dados los sucesos recientes y los sueños algo subidos de tono que tenía con el pelinegro vampiro. A la vez le inquietaba que Katherine rondara por la casa para en cualquier oportunidad sacarla de sus casillas.

Tomaba su bolso y se despedía de Jeremy quien se ofreció a acompañarla, pero le argumentaba que debía alistarse para la fiesta que precisamente sería aquella noche. El joven Gilbert deseaba invitarla como su pareja pero deducía que no aceptaría por la ligera diferencia de edades. 

Eran todavía la media tarde y por las calles se observaba al comité organizador llevando y trayendo adornos para la ocasión engalanando la plaza principal que serviría como punto de reunión ante tal evento. Miraba que una agitada y mandona Carol Lovegood manoteaba al aire probablemente enfadada por el pésimo gusto en colores que tenía la nueva chica Amy; quien fuese la nueva encargada  en lugar de Caroline Forbes.

Aparcó el automóvil en el estacionamiento haciendo sonar la alarma con el llavero, y antes de que se condujera a la entrada del restaurante escuchaba claramente a una lechuza agitar sus alas ululando para llamar su atención; era la misma que le llevaba la correspondencia los días anteriores. Tenía una carta en el pico sellada debidamente con cera bajo la firma del ministerio de magia. Concluyó que Kingsley le tenía noticias.

Tomo el sobre dando una caricia al ave misma que se retiraba del lugar a toda prisa dejando a la castaña con su encargo en las manos. Cuando se metió al restaurante observó el rostro de Matt quien la recibía con una sonrisa saliendo de la barra para dedicarle solo la atención a ella. Hermione percibió lo que estaba provcando y le perecía correcto guardar cierto limite con el joven, no le gustaba la idea de que alguien se hiciera ilusiones.

-Buenas tardes Helen, ¿Te apetece algo de comer?

-No Matt, muchas gracias, pero sería mucha molestia si me traes solo una margarita?, creo que será una noche larga.

El chico se rascaba la cabeza tratando de decirle algo, su actitud mostraba nerviosismo reflejado en unas manos sudorosas y unas mejillas enrojecidas. Hermione fruncía el ceño con una sonrisa para ver su actitud.

-Sucede algo?- Preguntaba ella mientras que el chico respiraba hondo.

-Te… te gustaría ir al baile de colonos conmigo?, se.. bailar bien.

La castaña se sintió halagada que sus dos apuestos chicos se pelearan por ser su acompañante, pues consideraba que Matt podría ser el elegido ya que Jeremy era mucho más joven. Pero para colmo de sus males o fortunio de su suerte ya tenía con quien ir al evento.

-Escucha Matt, te … agradezco que pienses en mi para acompañarte pero- El hacía un silencio. -Alguien más me invitó. -El chico suspiraba decepcionado, pues llevaba toda la semana pensando las palabras adecuadas para esa petición, ahora se sentía como un estúpido; solo se limitaba a sonreir apretando sus labios mientras que ella le volvía a sonreir.