Esto es más cliché. 😑
Esta es la Parte 1.
...
Escorpio apagó su cigarrillo con su bota y se dedicó a esperar a que la lluvia dejara de caer, al menos tan fuerte. Estaba debajo de un techo de una tienda, miraba a la gente correr o apurarse en caminar con sus sombrillas.
Pronto vio a una chica acercarse, caminaba tan lento y sin ninguna protección bajo la incesante lluvia.
Llegó al lado de Escorpio y se detuvo. Ella estaba empapada, con su cabello castaño, su piel blanca, sus ojos café claro, su vestido blanco hacía que su piel se viera a veces. Escorpio la detalló bien, y sonrió.Ella no reparó en él, no, ella solo se apoyó contra la pared, se abrazó ella misma y suspiró.
-¿Mal día?
La ronca voz del Escorpión la sobresaltó.
Ella lo miró con una expresión casi de susto.
-Eso creo. - ella se sonrojó al notar la intensa mirada de él. Él en cambio era pelinegro, su barba rodeaba su quijada con perfección, sus ojos eran negros y su piel era blanca, pero no tanto como la de ella.
-¿Y qué esperas por aquí?
-Un taxi, iba a pedir un Uber pero mi teléfono murió.
Él sonrió más.
-Oh, ¿y vives muy largo?
-Como a media hora de aquí. - ella se puso nerviosa cuando lo vio quitarse la chaqueta.
-Ten, niña. Hace mucho frío.
Ella dudó en aceptarla.
-No puedo, es decir, no te conozco.
Ella miró el suelo avergonzada.
Él rió un poco, se acercó más a ella y le puso la chaqueta encima de sus hombros. -Soy Escorpio.
Ella levantó la mirada al sentir la prenda pesada en ella. Se sonrojó un poco al verlo más cerca.
-Soy... Uhm...Cancer.
Se puso la chaqueta bien, y agradeció un poco de calor.
-Interesante nombre, Cancer.
-Gra-Gracias.-ella curvó sus labios un poco.
-¿Sabes? Tengo una moto estacionada por allá. - señaló una pesada moto negra al otro lado de la calle. -Si no te molesta un poco de lluvia más, te puedo llevar a mi casa. Está a cinco minutos de aquí, te puedo prestar un poco de ropa y esperaremos a que deje de llover para llevarte a tu casa.
-Pero... Te acabo de conocer, Escorpio. No deberías de llevarme a tu casa.
-¡Piénsalo! - él le sonrió -Podrás cargar tu celular ahí, yo también lo cargaré porque también está muerto.
-Oh...
-Y si quieres, o no te dejan llegar con chicos en moto a tu casa, pides un Uber.
¿Ella realmente lo estaba considerando?
-Yo...
Escorpio le sonrió.
"Di que sí, nena."
-¿Por qué haces esto?
-¿A qué te refieres, preciosa?
Un rojo intenso pasó por sus mejillas. Ella lo miró con pena.
-Normalmente las personas no son así de buenas a menos que quieran algo. Siempre quieren algo de mí. - ella bajó la mirada.
-Te aseguro que soy de las personas que dan y no piden nada de regreso. Puedes confiar en mí. ¿Trato?