Leo abrió la puerta con una gran sonrisa en su rostro.
—Hey, pensé que sería un lugar bonito.
Acuario se quejó.
—¿Qué dices? Es precioso. Tenemos una cabaña para nosotros.
—Si pero mira a tu alrededor, todo es neblina. Da un poco de... Miedo.
Piscis murmuró encogiendose de hombos.
—Oh vamos chicas, pondremos una fogata y malvaviscos. Les va a encantar. - Tauro sonrió.
—Concuerdo con Piscis. Además, ¿Estás seguro que somos los únicos aquí? - Cancer miró a lo lejos pero solo se veían las sombras de los árboles consumidas por la niebla.
—Segurisimo. Nosotros y un hombre que suele cuidar el lugar. - Leo asintió.
—¡Tienes miedo! Que tierno. - Aries la molestó abrazando a Cancer por los hombros. Ella lo miró algo molesta. —Tranquila cariño, tienes un hombre justo aquí que te protegerá.
—¿Dónde? No lo veo. - ella frunció el ceño y los demás se rieron. Aries incluido.
—Ya entremos. Escojan sus habitaciones. Nos vemos en veinte minutos en el patio para iniciar una fogata.
Leo avisó encendiendo la luz de la cabaña.
Todos entraron con sus maletas y caminaron perdidos por el lugar. Cancer encontró un cuarto, no era grande pero se veía acogedor. Tenía una pequeña ventana que permitía que la luz de la luna entrara. Había una pequeña cama y un pequeño armario al frente. Ella dejó la maleta encima de la cama y se puso a ver alrededor. También había una pequeña mesa de madera al lado de la cama y encima de ella una lamparita. Ella la encendió y cerró la puerta.
Luego se asomó por la ventana y observó afuera. Árboles y niebla era todo lo que sus ojos veían.
No le gustaba tanto. Ella era más de playa, amaba el agua y el sol y esa era la mejor combinación del mundo.
Se estremeció al sentir frío y abrió su maleta para cambiarse por su pijama.
Se puso una sudadera grande gris y unos joggers, medias gruesas y unas botas de tela. Se sintió más abrigada y segura así que decidió salir.
Encontró a Piscis afuera en la sala.
—¿Ya escogiste cuarto?
—Uhm... Si.
—¿Te pasa algo?
—Estoy algo preocupada porque estamos muy lejos de casa y no me gusta para nada este lugar.
—Hey, estaba pensando exactamente lo mismo. - Acuario de unió a la conversación. Cancer hizo una mueca.
—Sí... Tengo un mal presentimiento pero... Tratemos de relajarnos un poco. ¿Quieren un té?
La cangreja suspiró.
—¿Un té? ¡Por favor! Estamos de vacaciones. - Aries llegó y se burló.
—Pues yo si quiero. - Piscis murmuró.
—Uhhh, yo traje para hacer chocolate caliente.
Cancer recordó con una sonrisa.
—¡Hey! Vamos afuera. Ayudenme con la fogata. - Leo apareció con Tauro.
Todos salieron con él excepto Cancer. Quién fue a buscar su chocolate en la maleta. Luego regresó a la cocina y buscó varias tazas. Puso 3 en el desayunador y sintió unas manos rodear su cintura, ella se asustó y escuchó una risita. Aries apoyó su mentón en el hombro de ella y la abrazó más fuerte.