Hoy ha pasado lo que llevaba meses posponiendo. Después de sufrir acoso por parte de gente de mi clase que no da la cara, de una denuncia y de volver a sufrir acoso, esta vez, por parte del amigo de una ex amiga, he tenido que acudir a una tienda de Orange a cambiarme el número, con el consiguiente coste de casi 15 euros que lleva el cambio.
Me he cansado. No quiero recibir sms ni llamadas de personas que me resultan desagradables, y menos con insultos o con insistencias para que haga cosas que no quiero hacer. Gracias a mi ex amiga, he podido conocer a lo peorcito de mi ciudad, pero según ella la mala amiga soy yo y se alegra mucho de haberse alejado de mí, comentario que me hizo bastante gracia. Lo primero es que me alejé yo de ella al ver que su rollo no me gustaba un pelo y lo segundo es que yo he hecho muchas cosas por ella: se ha quedado en mi casa cuando tuvo problemas con su madre, la he escuchado cuando me contaba cada problema que tenía, la he llevado en coche a su casa más de una vez, y en una ocasión mi padre la llevó borracha a su casa, porque se le había ocurrido meter anís en una botella de agua y bebérselo. Si esto es ser mala amiga, no me imagino cómo serán los amigos que la dejan tirada cada dos por tres, porque grupo al que se va, grupo en el que tiene un problema y sale echando pestes de todos.
Ella me presentó a mala gente que ahora va hablando mal de mí (aparte de que antes incluso de que me conocieran daba información sobre mí y enseñaba fotos mías) por ahí y, sabiéndolo, lo ha permitido y ha dejado que me enterase tarde, de una forma bastante mala, cuando yo la defendía a capa y a espada y sus enemigos pasaban a ser automáticamente los míos. Pero eh, que según dice yo me voy a quedar sin amigos (cuando no he perdido ninguno, ella hacía mucho tiempo que no contaba como amiga), porque he creído a personas que dijeron ciertas cosas sobre ella, cuando su versión sobre la cosa que más le molestó que no me creyese (que habían estado a punto de violarla en una fiesta llena de gente mientras ella estaba borracha en el suelo) la había refutado todo el mundo. ¿Y qué puedo decir? Le encanta llamar la atención, de hecho, en un cumpleaños mío (cuando cumplí 20, creo) se emborrachó tanto que un amigo tuvo que irse a acompañarla a su casa porque no era capaz de andar sola y, según él, ni siquiera era capaz de usar la llave para abrir la puerta. Basándome en todo eso, y en que lo normal si te intentan violar es denunciar (cosa que pasó de hacer), ¿a quién me voy a creer? A ella, desde luego que no.
Es posible que lo demás que me contó su amigo (el que me acosaba) fuera mentira, pero podría haber sido perfectamente verdad. Así que, viendo que yo no me la creía, se enfadó y amanecí hace un par de días con 10 mensajes en WhatsApp diciendo lo mala amiga que soy, entre otras cosas, y confesándome lo que su amigo había estado contando por ahí, que no era muy bonito y, además, era machista (y ella defendía que él dijera todo eso y se mostró de acuerdo).
Su amigo llevaba meses llamándome y mandándome sms, pidiendo que lo desbloquease en WhatsApp y que terminásemos una canción que empezamos hace dos veranos, cuando todavía él me parecía una buena persona. Lo intenté todo, desde ignorarle, contestarle amistosamente e intentar "acabar" de buenas, a mandarlo directo a tomar por saco. El porqué de mi bloqueo es evidente: hablaba mal de mí, me insultaba, me trataba mal y me presionaba para que me acostase con él, y cuando me negaba, se enfadaba e insistía, de hecho, hasta el otro día seguía insistiendo y, si alguien dice que es mentira, tengo las conversaciones guardadas en el correo. Además, me conseguía engatusar algunas veces para que le hablase haciéndose la víctima, diciéndome que había estado ingresado, que estaba muy solo, que estaba triste, disculpándose por todo lo malo que me había hecho y portándose bien, aunque cuando conseguía que le hablase volvía a lo mismo y comprobaba que no había cambiado y que quería lo que quería y punto. Entonces volvía a bloquearle, a decirle que dejase de llamarme, pero él continuaba haciéndolo cada X tiempo varias veces y volvía a mandarme sms al ver que cuando me llama salta directamente el buzón de voz.
Por tanto, viendo que la situación no parece que vaya a acabar ni mejorar pronto, ya que ha tenido meses para hacerlo, y que la policía no va a hacer nada si denunciase (no he tenido noticias de la denuncia que puse en septiembre, cuando dieron mi número en chats y me llamaban a las 4 de la mañana desde un número privado), he decidido cortar el problema de raíz, cambiarme de número y dárselo solamente a mis amigos más cercanos y a mi familia. Ya no estoy en el grupo de WhatsApp de mi clase, ni en grupos donde no conozco a la mayoría y no le he facilitado mi número a nadie que estuviera relacionado con mi ex amiga y su queridísima joya de amigo.
¿Qué conclusión saco de esto? Pues que no debo darle oportunidades a gente que, en mi corazón, sé que es mala. Y yo sabía que él no era buena persona y sabía que mi ex amiga había cambiado para mal (aunque según ella, no ha cambiado, ha madurado "que es distinto"), pero como realmente quería ver lo bueno y no lo malo, daba oportunidades que no debía dar. Ya no lo haré más, no solo con ellos dos, sino con nadie. Quien me aporte cosas buenas y me aprecie, sabrá aprovechar la oportunidad que tiene de estar en mi vida y quien no, se queda fuera y punto.
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El rincón de mis desastres
RandomEste es mi espacio personal, como un blog. No es una novela ni tiene solamente una clase de contenido. Aquí podréis encontrar relatos, poemas, reseñas, etc. Como bien dice el nombre, es el rincón de mis desastres, mi sitio donde expresarme librement...