By Your Side [Austin Carlile x Oliver Sykes]

23

No tenia ganas de quedarme todo el día en la escuela, no quería hablar con Austin ni con nadie. Aún me sentía mal por saber que Carlile estuvo con Alan, no se cuanto tiempo ¿Y si me engaño con él? Eso seria el famoso Karma, yo le quite a su novio -sin intención de hacerlo- y él me lo quitaría por venganza. Seguro que por eso estuvo con él días atrás.

Como sea, como no me encontraba en las mejores condiciones, fue que por eso hice todo lo posible para que me mandaran a detención y mientras caminaba hacia aquella sala, podria escaparme sin problema alguno. Era un plan sencillo de ejecutar.

Al menos eso habia imaginado yo cuando planee mi escape perfecto.

Pues apenas puse un pie fuera del salón, comencé a caminar de lo más tranquilo, pero en cuanto pase por la dirección fue que había comenzado a correr como un maldito loco por los pasillos, creyendo que no habia nadie más que yo.

Oh que equivocado estaba.

Al dar vuelta en uno de los pasillos que me llevaban directo a la salida del edificio me encontré con el subdirector y uno de los alumnos ¿O era su hijo? No se, pero el tipo era mucho más alto que yo, y también más musculoso que yo.

Intente retroceder, pero ya era tarde. Ambos sujetos ya me habían visto, así fue como comenzó una carrera sin final. Yo corriendo por los pasillos como un desquiciado mientras que el subdirector y el tipo desconocido corrían detrás de mi mientras gritaban que me detuviera.

Oh bendito suelo, acompañándome en mis peores momentos.

-Lo lamento, enserio que si. -Escuche como decía el chico. -¿Esta bien?

-J-joder...

-Si te hubieras detenido, seguro que esto no hubiera pasado.

El subdirector se paro frente a mi y me quito la hoja que tenia echa bolita en mi mano derecha y comenzo a leer lo que decía, me miro ceñudo y luego miro al chico a lado de mi. Y como si con la mirada estuvieran hablando, el tipo desconocido me tomo de mis caderas y me cargo sobre su hombro comenzado a caminar a la sala de detención.

-¡Bájame! ¡No me pueden tratar así!

-Joven Sykes, guarde silencio.

-¡No hasta que me bajen!

Seguí quejándome todo el camino -el cual era corto- hasta que llegamos a la sala de detención, el chico me bajo, pero tampoco me soltó el brazo, mi mochila estaba a punto de caerse.

-¡Maldición, que puedo entrar yo solo!

El subdirector abrió la puerta de aquella sala entrando primero, luego yo y al final el chico que me había cargado, no mire a nadie en esa sala. Seguro que eran los mismos chicos de siempre. Chicos problema.

Hubo un momento en el que el subdirector hablo sobre mi fallido escape y vire los ojos encontrándome con que el señor Austin Carlile estaba en la misma sala que yo.

Intente pedir que me dejaran quedarme hasta el final de las clases, pero bueno, me lo negaron, así que tuve que quedarme.

Tome asiento en la primera butaca de la segunda fila. Busque mis audífonos en el basurero que tenia como mochila, los conecte a mi celular y luego me los puse, agregando el hecho de que me coloque la capucha de mi sudadera y escondí mi rostro entre mis brazos. Solo quería que el tiempo pasara rápido para poder salir de esta maldita aula y regresar a mi clases como la gente normal.

Levante solo un poco mi rostro para ver más de las canciones que tenia en mi lista de reproducción le puse pausa a la canción que había estado escuchando hasta ese momento, pero en lugar de ir hacia donde mis canciones, mi cerebro me dio otra orden y me mando directo al contacto de Austin. Estaba releyendo los primeros mensajes que nos habíamos estado mandando hasta el ultimo que le había mandado esta semana, de hecho aparecían esas palomitas azules indicando que si había leído mi mensaje.

-¿Por qué no me mandas un mensaje? -Escuche decir a Austin a lado de mi, mi corazón de acelero de sobremanera con tan solo escucharlo. -Lo lamento. -Me quede callado. -Oliver enserio, dime que es lo que te sucede. -Intento tomar mi mano, pero la aleje por simple reflejo. -Por favor.

-¿Por qué faltaste tres días?

Se quedo callado solo unos segundos, supongo que estaba tratando de buscar la respuesta o la excusa perfecta.

-Fue por cosas personales.

-Y tus "cosas personales" -Hice comillas. ¿Era estar con Alan?

Y nuevamente volvió a guardar silencio, creo que eso respondía por completo mi pregunta, deje salir una risita sarcástica, ya no hacia falta seguir cuestionandole el porque.

Intente volver a poner mi música para ignorar de la mejor manera a Carlile pero en esta ocasión él fue más rápido que yo, tomo mi mano evitando que le diera play a la canción que estaba escuchando antes de que llegara, le mire ceñudo esperando a que me soltara, pero no lo hizo, de hecho hizo su agarre más fuerte además de que me estaba mirando de la misma forma en la que yo lo hacia.

-No puedo creer que estés haciendo esto.

-Y yo no puedo creer que no me dijeras donde estabas.

-Nunca llamaste, ni un mensaje fuiste capaz de mandarme. -Dijo un poco molesto. -No puedes pedirme explicaciones si tú tampoco haces acto de aparición.

-¿Qué no te mande mensajes? -Negó. -Austin, estuve mandándote mensajes esos tres malditos días, te estuve llamando esperando a que me respondieras ¡Pero nunca lo hiciste! -Medio grite, a este punto ya tenia ganas de llorar. -No puedes decirme que no me preocupe por ti, porque si lo hice.

-Claro que no lo hiciste. -Seguia insistiendo.-

-Entonces no se a quien mierda le estuve hablando todo este tiempo. -Entre a la aplicación de WhatsApp y le mostré la pantalla. -Se supone ese número es tuyo ¿No? -Asintió, le quite el celular y entre a donde las llamadas. -También te estuve llamando, no solo una o dos veces, fueron varias ¡Obvio me preocupe por ti!

Sentía como mis mejillas estaban mojadas a causa de las lagrimas que había dejado salir, no eran de tristeza. Era de la impotencia y el enojo de saber que Austin creyera que no me preocupe por él en estos días. Vi como Carlile bajaba la mirada apenado.

-No me llego ningún mensaje.

No dije nada luego de eso, pero tampoco podia quedarme callado y no decirle lo que estaba pensando en ese momento.

-Perdóname por no ser como Alan. -Le susurre, inmediatamente levanto la mirada. -Pero estoy haciendo lo mejor que puedo, para ser un buen novio para ti.

-Oliver no... -Negó frenéticamente. -No te estoy comparando con él, y-yo solo...

-Solo estuviste con tu ex novio estos tres días, pero a mi, que soy tu novio no me puedes decir el porque ¿O acaso ya te acostaste con él y por eso no me lo quieres dices? -Eso ultimo lo dije en voz bajita. -Austin...

-E-eso no es verdad, no te engañe con Alan, no seria capaz de hacerte algo así.

-¿Entonces que fue lo que sucedió?

Nuevamente se quedo callado, eso me dolió mucho más, me estaba haciendo creer que enserio se acostó con Alan, aún si ya estaba conmigo.

-Enserio Austin. -Suspire pesado. - Si aún no puedes olvidar a Alan, es mejor que dejemos por la paz lo que sea que apenas estábamos teniendo. -Limpie mis mejillas. -Así tú y mucho menos yo, salimos lastimados.