Comenzar de nuevo.

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Marco despertó cuando su madre le hizo inhalar alcohol de farmacia, esperaba que fuera una pesadilla. Pero no fue así. Después de un rato de mentalizarse y tranquilizarse volvieron a hablar de ello.

-¿Entonces qué vamos a hacer?-

-Aún no lo se hijo, pero hay que ver la realidad, vamos a tener que recortar gastos como dije-

-¿Y qué va a pasar con mi carrera musical?-

-Yo veré el modo de que no dejes de estudiar música, se que, aunque tus ancestros no fueron tan buenas personas, veo en ti un futuro maravilloso-

Ambos lloraron, aunque no había necesidad, la academia de Bellas Artes en Viena eran el sueño de Marco, ahora parecía algo inalcanzable.

-¿Cuándo nos iremos?-

-No lo sé, hijo...no lo se-

Este sería el fin de su alta alcurnia.

Marco no pudo dormir esa noche, y los días siguientes tenía que despedirse de sus amigos, y he ahí el problema, todo el mundo decía ser el mejor amigo del niño prodigio. Pero al correr la noticia de la farsa de Ernesto de la Cruz, ahora todo el mundo lo veía mal, las miradas de mal gusto caían sobre él, fue víctima de burlas y repudio. No podía soportarlo, el no era el culpable de nada, su único crimen fue tener la sangre de un impostor.

-¡Ya no puedo más! ¡Ya no aguanto! ¡Ya no aguanto!-

Pero antes de poder lanzarse por la ventana ante la desesperación pensó un momento en que todo su esfuerzo por llegar a donde estaba, no sería en vano.

-No...¡esto no se queda aquí!-

En su casa tenían un altar dedicado a Ernesto, en la sala de estar, y a veces, cuando su madre no estaba, conversaba con él. Con su ídolo. Así que bajó por las escaleras hasta llegar allí.

-Yo...yo no creo todo eso que dicen de ti, tu eres bueno. ¿Quién querría difamarte de esa manera?-

Sin duda alguna tenía que averiguarlo.

Y con todo el acceso a Internet, buscó todo acerca de un tal Héctor Rivera, aunque no había mucha información, descubrió que si parentesco era Miguel Rivera.

El legado del fallecido músico continuará.
Decía la nota.

-¿Quién es Miguel Rivera?-

Indagó acerca de él, que de un momento a otro supo cual era su destino después de robar la guitarra que supuestamente fue de Ernesto, descubrió la verdad.

Era una historia muy poco creíble a decir verdad, por eso esa noticia no tuvo mucho éxito y se quedó ahí.

-¿Y quién se creyó para robar esa guitarra?-

Después seguía leyendo.

Niño afirma que Ernesto de la Cruz asesinó a la mente brillante de todas sus canciones.

Habían pruebas, las cartas que le mandaba a su hija, pero sólo eso, más nadie sabe si realmente cometió un asesinato. Descubrió el verdadero significado de las canciones que cantaba, pero eso no fue suficiente, las pruebas sólo eran absurdos poemas de alguien más, pero, eso no quiere decir que Ernesto fuera malo, pensó él. Así que rechazó las pruebas.

El día de la decadencia llegó, tuvo que ver como todos sus bienes les fueron arrebatados por el banco, pero no todo era tristeza, la mamá de Marco tenía otros planes.

-Ven, hijo, es hora de irnos-

Durante el camino hacia su nueva vida, ella le tenía preparado algo especial, quizás melancólico, pero era necesario.

-¿A donde vamos, mamá?-

-Se lo mucho que Ernesto de la Cruz significa para ti, así que, pensé que podríamos pasar por su pueblo natal, allá en Santa Ceciclia Tlalnepantla-

-¿De verdad, mamá? Eso, eso me gustaría mucho-

Ahora estaba emocionado a pesar de todo lo malo.

-Además, oí que allá hay una escuela de música, tal vez un poco humilde, pero ahí están dos maestros de música de la academia de Bellas Artes de Xochimilco, y como, bueno ya te ubican...-

-¿Enserio?-

Los ojos del niño se iluminaron.

-¡Si! Pedí que te dieran una oportunidad de estudiar con ellos, tal vez de se modo, puedas avanzar y, recuperar tu futura estancia en Viena, tienen contactos ahí-

-Gracias mamá, en verdad, lamento haber sido grosero contigo hace unos días-

-Está bien hijo, no te preocupes, no es algo fácil y teníamos que reaccionar así, pero ahora piensa en que saldremos adelante-

-¡Eres la mejor mamá del mundo!-

La relación madre e hijo tiene sus dificultades, pero ellos las enfrentan.

Tomó un poco de tiempo pero al fin llegaron. El piso no era de pavimento si no de rocas pulidas, con apariencia de ser un lugar de clase media baja, y en lugar de camiones de basura habían burros y caballos con carretas y sus jinetes quienes se la llevaban, aún así las calles del lugar estaban llenas de vida y de colores.

-¿Ahí vamos a vivir?-

Llegaron a la que sería su nueva casa, nada en especial, sólo que menos lujosa, más bien, nada lujosa, así que el veía todo con una mirada de disgusto, pero no tenían otra opción.

-Tal vez no sea como lo imaginaste, pero...-

-No, no lo es, pero es suficiente para comenzar nuestra nueva vida aquí-

El sólo quería huir del repudio de la gente que lo molestaba, tal vez con gente nueva se sentiría mejor.

La primera noche ahí fue diferente, al asomarse por la ventana el cielo contaminado cambió por la albura de las estrellas, no hacía tanto frío, todo estaba tranquilo.

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Espero que les haya gustado esta parte uwu

Entre Notas Musicales || Coco || Marco de la Cruz x Miguel RiveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora