¿Qué pasó con Marco?

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Al decir eso, Marco alzó su pierna para darle una patada a Miguel, la cual lo dejó en el suelo, pero el movimiento fue tan brusco y con tanta fuerza, tan rápido que el contrincante al estar de pie con un sólo pie perdió el equilibrio, cayó de espaldas sobre las láminas que al no ser muy resistentes no amortiguaron su caída.

-¡Marco!-

Miguel olvidó esa tonta rivalidad y abrió paso a la preocupación, se levantó para evitar que se soltara su contrincante quien estaba colgado de la orilla dentro del pozo a punto de caerse pues su mano no aguantó su propio peso, pero le fue imposible, el pequeño Rivera ni siquiera pudo acercarse cuando en menos de un segundo...

-!AAAAAAAAAAHHHHHH!-

-!NOOOO MARCOOOOOOO!-

De la Cruz cayó de lleno al oscuro pozo, sus gritos se dejaron de oír mientras más de alejaba de la superficie, aunque este era más profundo de lo que pensaba, hasta que al final cayó al agua, todo estaba muy oscuro, tanto que no pudo ver más allá de su propia nariz.

Nadó hasta asomar su cabeza fuera del agua, tenía los ojos cerrados ya que estaba muy asustado, agitaba los brazos pidiendo ayuda pues sentía que se hundiría y moriría pues no sabía nadar muy bien.

-¡Ayúdenmeee!-

Pero entonces sintió una atmósfera muy diferente, pues los ecos de sus gritos se escuchaban de manera muy diferente, sentía el pozo mucho más amplio de lo que se veía, hasta que abrió por fin los ojos y se dio cuenta que estaba en otro lado.

-¡Ayú...denme?-

Marco tenía los ojos bien abiertos de la impresión, descubrió que estaba dentro de una piscina de agua estancada, sintió mucho asco y pataleó hasta la orilla y salió de ahí. Hacía frío, tenía mucho miedo y estaba desorientado.

-¿En dónde estoy? ¡¿Miguel?! ¡¿Mamá?! ¡¿Están ahí?! ¡¿Alguien puede escucharme?!-

No había respuesta, no entendía, estaba dentro de un salón abandonado, era un lugar lúgubre y demacrado, se dio cuenta de que la piscina tenía forma de guitarra.

Pensó que estaba en una casona embrujada, abandonada, pero no podía quedarse ahí parado toda la vida, así que decidió investigar.

Se acercó a las escaleras y subió, mientras que los nervios a flor de piel erizada lo mantenían alerta de cualquier sonido provocado por el viento.

-¡¿Ho-hola?!-

Habló alto, su voz retumbó en las paredes que algún tiempo guardaban tantos recuerdos.

Esperó a que alguien contestara.

Nada.

Pero todo cambió cuando escuchó pequeños pasos que le parecían pisadas de elefante, alcanzó a ver la sombra de lo que parecía ser una bestia gigante la cual escuchó rugir cual león.

-Ay no...-

Retrocedió de manera considerable mientras veía su vida pasar en frente de sus ojos de lo atemorizado que estaba, tropezó, se cayó al suelo y solamente se colocó en posición fetal esperando lo peor.

Cuando esa monstruosa criatura salió ante la luz de la luna no era lo que parecía. Ya que era un simple y adorable alebrije de perrito chihuahua. Quien le ladró muy agudamente y le saltó encima para lamerle la cara en el momento en que Marco se descubrió para ver qué era.

-¿Eh, qué?-

Le extrañó mucho la apariencia del alebrije, pero le pareció inofensivo. ¿Acaso estará a un lado de una planta nuclear?

El pequeño perrito escuchó los ladridos de los demás y fue tras ellos.

-¡Oye espera! ¿A dónde vas?-

Marco lo siguió pues estar sólo en medio de quién sabe donde no fue algo muy agradable.

Lo condujo hasta lo más alto de la torre, donde se encontró con sus hermanitos alebrijes.

Marco los miró y les simpatizó.

De repente una voz estruendosa interrumpió la calma.

-¡¿Quién eres y qué haces aquí?!-

Esa voz hizo estremecer a Marco, pero estaba tan oscuro que no podía ver de quién se trataba.

-¡N-no me hagas daño por favor!-

El niño volvió a entrar en pánico.

En ese momento salió ante la luz de la luna el mismísimo Ernesto de la Cruz, con la ropa gastada, desde aquel día en que había perdido todo y descuidó su imagen. Marco alzó la mirada y al ver que eran tan diferentes ambos gritaron del susto alarmando a los perros.

Marco se escondió detrás de una gran maceta de mármol parte de la decoración del lugar.

-¡Estás vivo!-

Ernesto no se le quería acercar, el rechazo y desprecio lo volvieron antisocial.

-¡E-eres un esqueleto!-

Respondió Marco quien respiraba agitado del miedo.

-¿Qué...qué haces aquí?-

-¡No lo sé! ¡Pero por favor no me lastimes!-

-¡No pienso acercarme!-

Pero Marco se desesperaba fácil y ya se había aburrido de estar ahí escondido, así que asomó la cabeza para ver mejor al sujeto. Se levantó del piso y se acercaba poco a poco a esa figura esquelética la cual estaba asustada al igual que él.

-¿Quién eres tú? ¿En dónde estamos?-

Preguntó Marco esperando que las preguntas no lo incomodaran.

-¿Para qué te lo digo? ¿Tu también me vas a humillar? ¿Sabes qué? ¿Por qué no mejor me dices lo que tengas qué y te vas de aquí?-

-¡Es que no sé cómo llegué aquí! ¡Yo no debería estar aquí!-

-Estamos en el mundo de los muertos, ahora dime, ¿Quién eres tú?-

-¿Muertos? Entonces, ¡¿Estoy muerto?!-

Eso resonó en la mente de Marco.

-¡No lo creo, mocoso, no eres un esqueleto como yo!-

Le gritó.

-¡¿Entonces qué está pasando aquí?!-

Marco respondió de la misma manera pues no le gusta que le griten.

--¡No lo sé, no soy científico!-

Al parecer ambos coincidían en el carácter.

-¿Entonces qué eres?-

Mientras Marco estaba tenso, el esqueleto hizo una pausa, para recordar lo que fue.

-Yo...yo solía ser...alguien que lo tenía todo...mujeres, dinero, ¡fama!-

Haciendo énfasis en "fama" el niño sólo lo veía aunque no reconocía bien sus facciones, ya que este dejó de mirarlo y concentró su vista hacia los ventanales que daban a la ciudad.

-Yo era...el mejor músico de todos los tiempos, ¡hasta que llegó un ser acompañado de mi desgracia eterna junto con mi pasado en vida!-

Narra Marco

Te compadezco.

Narrador

-¿El mejor músico de todos los tiempos?-

-¿Qué estás sordo?-

-¡Oye no me hables así!-

Salió el esqueleto ante la luz de nuevo luego de refugiarse en las sombras dejando ver su rostro.

Marco soltó un jadeo de la impresión, una mezcla de emociones se concentró en su mente tan repentinamente que no supo cómo reaccionar.

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Al fin \ :V / está vez lo subí más tarde pero gracias por la espera :'3

Entre Notas Musicales || Coco || Marco de la Cruz x Miguel RiveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora