Entre Notas Musicales || Coco || Marco de la Cruz x Miguel Rivera

Amenaza

Ya sé que es horario riveracest pero sigo trabajando en ese capítulo ewe así que tengan esto:

El día de la fiesta había llegado, en una zona rica apartada del pueblo, había un gran salón de fiestas rodeado por un jardín majestuoso. Donde sólo asistía gente importante y donde hasta la servidumbre era refinada.

Empezando el ambiente musical de aquella fiesta, tocaron piezas dónde nadie canta. Y durante ese transcurso de tiempo, los invitados se deleitaban ante aquellas obras de arte en movimiento y sonido, que prácticamente ya se estaban aburriendo, la temática era folclórica y elegante al mismo tiempo.

-¿Sabes qué es lo peor? Ni siquiera sé qué estamos celebrando-

Decía Miguel mientras descansaban de estar en escenario, el cual estaba al aire libre, aún así, muchos de los invitados estaban dentro del salón de fiestas.

-Eso estuvo realmente impresionante-

Dijo una muchacha que caminó hacia el par de músicos, llamando su atención por el arreglo de flores que tenía en la cabeza y una sonrisa coqueta.

Ambos chicos no se molestaron en expresar lo mismo más que agradecer por ello.

-Pues muchas gracias...?-

Decía Marco conservando su seriedad.

-Mireya..., Mireya Graciela Santos de Villaseñor, hija del presidente municipal-

Habló aquella encantadora alzando la mano con la intención de que ambos la besaran, pero Miguel la estrechó, Marco sólo la sostuvo un segundo y con mucha indiferencia la soltó.

Eso causó un poco de disgusto en Mireya, así que aclaró la garganta.

-Supongo que ustedes saben que está fiesta es por mi cumpleaños, y por ese motivo, quisiera de la compañía de ustedes dos tan distinguidos mariachis-

Soltó una suave carcajada, se notaba que era una niña de mundo al igual que Marco, lo que causó un poco de preocupación a Miguel.

La festejada se tomó la libertad de tomarse de ambos brazos de los músicos quedando ella en medio mientras que divagando por la fiesta se encontraban. No se salvaban de las fotografías que tomaban, sin olvidar que los tres eran ya celebridades y juntos eran el centro de atención.

Entrando al salón de fiestas, la música sonaba y aquí es cuando Mireya quiso romper el hielo.

-¿No vas a invitarme a bailar?-

La chica miraba atrevida a Miguel.

-Es que yo...-

-¡Acepto encantada!-

Deliberadamente tomó a Miguel de la mano y se lo llevó a bailar, Marco sólo se sintió ofendido, pero no sabía como evitarlo, sin hacer un escándalo puesto que no estaban haciendo nada fuera de lo normal.

-¡Espera! No sé bailar-

Cualquier pretexto era válido con tal de separarse de ella.

-No importa, yo te enseño-

-No no no yo de verdad no puedo-

Miguel se soltó, se miraba nervioso y buscaba con la mirada a su novio.

Marco quien lo había perdido de vista, ahora era presa de Mireya, quien no le tomó mucho tiempo atraparlo para ponerlo a bailar.

Él tenía su carácter con las damas, lo que lo hizo más difícil soltarse, pues de vez en vez, era casi una figura pública que no podía armar una escena por el simple hecho de no querer bailar.