You're My Blood Sweat & Tears | BTS

XXXIII - ¿Estamos juntos?

YOON GI

—Es broma. Soy virgen Yoon Gi, no sé nada —dijo empujándome por el pecho.

—¿Por qué Na Mi? ¿Ahora prefieres a Ji Min más que a mí? —pregunté.

—¡No! ¿Qué es lo que está pasando? ¡Porque estoy confundida! —contestó desesperada y la callé con un beso. Le demostraré que soy mejor que Ji Min. La besé profundamente y ella cedió. Na Mi empezó besarme también.

Algo en ella me hacer perderlo. Nunca experimenté esto hacia Iseul. Y con otras chicas, solo voy directo a follar. Pero con Na Mi, besarse parece ser suficiente y satisfactorio. No puedo evitar devorarla una vez que empezamos. 

 

No puedo controlar mis manos por más tiempo, deslicé mi mano sobre su cintura subiendo hacia su pecho.

—Lo siento —murmuré mientras la besaba. Dejé de tocarla, sintiendo que ella podría ofenderse.

—Está bien. Tócame más —susurró Na Mi sin soltar mis labios. Ella tomó mi mano para ponerlo en su pecho. Guiando mi mano para que lo acariciara.

—No mierda, Na Mi para, me pondré duro.

—Pues ponte duro. Pónmelo dentro, Yoon Gi —murmuró y me separé del beso para mirarla.  

—No sabes lo que dices.

—Sí, tal vez no lo sé. Pero hay una cosa de la que estoy segura, que me gustas y te amo. Cógeme, Yoon Gi. Te amo, no puedo pensar en ningún otro chico que me lo haga. 

—Si te cojo, ¿ya eres mía? —pregunté. 

—Sí... para siempre... —contestó Na Mi a la vez que me agarraba en las mejillas para besarme. 

—¿Nada de Ji Min? ¿Nada de Tae Hyung? —pregunté en medio de nuestros besos.

—No me importan bebé... soy alérgica a los reyes... —contestó y profundizó el beso. Luego tiró de la cinta del cuello de su vestido y empezó a desabotonar su frente. Ella es quien está iniciando ahora. ¿Así de loca está por mí? Está dispuesta a darme todo. 

—Na Mi... —susurré mientras veía su piel lechosa. Empecé a darle besos en la piel mientras agarraba su pecho.

—Quitámelo, tócalo desnudo —susurró referiendose a su sujetador de encaje. 

—Oh sí, lo haré luego —contesté. Esta vez lo haré bien y despacio. Primero voy a satisfacer mis ojos mirándola. Quitándole la ropa uno por uno.

Me senté para subir su vestido. Le eché un buen vistazo a sus piernas. Deslizando mis manos hacia sus muslos. Sintiendo la suavidad de su piel, acariciándola me pone duro y loco.