Capítulo 3

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—¿Estás bien Tae? —al instante de escuchar la voz del menor en un tono algo preocupado mientras siente su mentón ser elevado para dar una mejor perspectiva.

 TaeHyung agita levemente la cabeza mientras retira esos pensamientos y sonríe a la par que asiente cual niño pequeño. El menor esboza una sonrisa mientras agarra la mano del mayor guiándolo a la habitación. 

—Quiero que quede algo claro. —se gira quedando frente con frente.  —Hago esto para que no te quedes en la calle, a cambio tú me ofreces lo que me puedas dar. ¿No te arrepientes de haber aceptado? —TaeHyung niega mientras intenta tragar el nudo que se le ha formado en la garganta, pensando como estaba firmando un pacto con el mismo demonio. —¿Vas a desobedecerme alguna vez? —el de piel canela vuelve a negar recibiendo una sonrisa de parte del contrario. —¿Te opondrás a algo que yo te mande hacer?

—¿A qué quieres llegar con todo esto? Me estás asustando un poco. —no puede acabar la frase ya que los labios del chico están sobre los suyos, moviendo sus belfos sobre los del sorprendo acompañante. El azabache coloca una mano en la espalda baja del contrario mientras que la otra la se dirige a la mejilla ajena. 

"Joder, sus labios se sienten mejor de lo que me esperé. Me va a salir hasta rentable."

Después de recuperarse del shock, el mayor de ambos mueve torpemente sus labios al ritmo del experto muchacho. JungKook delinea con su lengua el labio inferior de TaeHyung haciendo que este se estremezca.

El joven Jeon muerde levemente el labio inferior del contrario a lo que este abre la boca dando total acceso a su cavidad a JungKook. Después de una dulce danza entre sus lenguas, se separan a causa de la falta de aire.

JungKook es el primero en recuperarse de los dos, así que abre sus ojos para ver el rostro del opuesto. Sus mejillas ahora mismo son tan rojos como una bella rosa roja; sus labios, rosados e hinchados, son aún más apetecibles pero el menor sabe que si no se controla acabará haciendo algo que lastime a su nuevo protegido.

"Es jodidamente tierno e inocente. Me gusta."

Ha sido algo torpe pero no ha estado nada mal para el pelinegro. Con el tiempo ya se soltaría más.

—Por eso preguntaba, no quería asustarte. —el azabache se separa del chico y se tumba en la cama mirando como su invitado solo toca sus labios analizando si el beso fue un sueño o no.

"Es tan adorable" 

JungKook deja escapar una risita en bajo, enternecido.

—Tae. —el mencionado gira su cabeza y mirar al muchacho parpadeando numerosas veces mientras muerde su labio inferior. —Ven. —palmea el espacio que hay a su lado a lo que el mayor obedece sentándose, quedando de frente a él. —Ponte cómodo, esta será tu nueva cama.

—Pero esta es tu cama. —el joven juguetea con sus manos de manera nerviosa intentando evitar el contacto visual con JungKook.

—Así es. Es mi cama, pero vas a dormir conmigo. ¿Algo en contra? — El emisor levanta una de sus cejas esperando, algo curioso, una respuesta por parte de su receptor.

—No hay nada malo que deba decir, solo pensaba que te molestaría mi presencia. —se gira para observar a su "jefe". —No tienes que hacer todo esto si no quieres, no pasa nada, yo estaré bien. —sonríe de tal manera que sus ojos quedan en una delgada línea.

"¿Y dejar tirado a semejante espécimen? Ja. Ni en broma muchachito. Tú vas a ser mi juguete."

El rostro de JungKook se desfigurar en una mueca de confusión.

—No digas tonterías, si no me agradara tu presencia ni te hubiera dejado pasar. Tae, debes quererte más, eres un chico hermoso. Si no me hubieras agradado, no te hubiera besado hace unos minutos. Vamos a trabajar en tu autoestima. —aprieta sus labios y esboza una pequeña sonrisa, viendo como el contrario empieza a relajarse en su presencia. — No sé porque estoy haciendo todo esto la verdad.

"Mentiroso"

TaeHyung no aguanta más y deja escapar las lágrimas que ha querido contener desde que empezó el día. Esconde su cara entre sus manos dejando salir toda la tristeza que ha acumulado por años dentro de él. 

—Mierda, no sé como consigo cagar todo. —JungKook rodea el cuerpo ajeno de tal manera que el chico está entre sus piernas con la cara escondida en su pecho. —Soy malísimo con todo esto. No sé como animarte. Te dije que necesitas un hombro para llorar y que mejor manera desahogándose con un desconocido que no te puede juzgar. Cuéntame que es lo que te hace llora, así podré entenderte. —JungKook abraza a joven hasta el momento en el que éste se suelta de su agarre para poder hablar. La cara de Tae está roja y algunas lágrimas siguen saliendo de sus ojos.

"Mierda, está llorando... ¿Qué coño hago?"

Una repentina ráfaga de miedo se apodera de JungKook, pero consigue calmarse al ver como el otro chico abre si boca.

— Yo... Mierda, llevaba años sin sentir lo que es que alguien se preocupe por ti mínimamente. Es algo que me recuerda la asquerosa persona en la que me he convertido después de la muerte de mis padre — Tae sonríe con nostalgia mirando un punto fijo en la sabana. —Empecé a fumar, beber y de vez en cuando a consumir drogas a temprana edad. Al año dejé ese mundo e intenté seguir adelante, pero entonces conocí a HoSeok. Empezamos a salir. Él me daba las drogas y yo me acostaba con él y eventualmente a los meses me mudé con él. Los primeros dos años fueron bien, pero acabó convirtiéndose en un infierno diario. Si no me acostaba con él, me golpeaba hasta dejarme inconsciente. Hace unas semanas rompí con él denunciándolo por maltrato y tráfico de drogas. Soy un estúpido y no me paré a pensar que él estaba enfadado antes de ir  a su casa a por algo de maría y bueno... El resto de la historia ya te la sabes. —sonríe con indiferencia, restándole importancia al asunto. No quiere dar pena, eso lo haría sentir peor.

"Joder... ¿Por qué siempre encuentro a gente así? Aunque... punto a mi favor."

—Pues entonces prepárate, porque a partir de hoy tu vida va a mejorar. Yo no seré como el capullo de tu ex, no haré nada que tú no consientas y lo de las drogas ve olvidándote. Vas a ser mimado y consentido.—JungKook esboza una de sus características sonrisas alegres, arrancándole sin poder evitarlo una pequeña sonrisa al contrario. El móvil de pelinegro suena rompiendo su burbuja. JungKook agarra el móvil contestando sin mirar. —¿Qué? 

"Ya tiene que venir alguien a romper las pelotas. Como de costumbre"

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¡Hola bellos, bellas y belles!

Editando quería cambiar las canciones porque no cuadraban tanto con los capítulos pero esta sorprendentemente esta me agrada. Un punto para mi yo del 2018.

Quiero disculparme si hay alguna falta de ortografía. Cualquier cosa que vean avísenme. Sé que está editado, pero soy despistada y seguramente se me ha pasado alguna falta.

LUV U ALL <3

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