La perfección #2

41. Hace tres años (2/2)

Mágicamente como llegó se fue, esa mujer aparece y desaparece cuando quiere ¿Y qué íbamos a hacer? ¿Detenerla? Ni que fuéramos la policía. Además, empiezo a creer que Nyx no es su nombre verdadero.

Reviso las cajas de la fiesta para elegir los adornos nuevos que llegaron y Emmet camina hasta acercarse a mí.

—Esperaste a que estuvieramos solos —bromeo y muevo las cejas divertido.

—Estuve pensando con respecto a lo que dijiste.

Levanto la vista.

—¿Sí? —presto atención.

—Durante los tres años que he estado cuidándolo, usted no se ha involucrado de manera sentimental con nadie.

Sonrío.

—Creo que ya hemos tenido esta conversación.

—Sí, hace tiempo.

—¿No fue esa la primera vez que nos acostamos? —muevo las cejas —Ahora que me doy cuenta —me pongo pensativo —siempre que estoy de dramático tenemos sexo, debería empezar a fingirlo, así te atrapó más fácil.

—Preste atención —me reta.

Me río.

—Perdón.

—Ha confiado en mí y me ha contado todo lo que le sucedió.

—Sí —presto atención seriamente dejando de sonreír —. Tú ya lo sabés.

—Ha sido muy sincero siempre conmigo.

Sonrío.

—Más de lo que debería.

—Me contó sobre su miedo, lo mucho que le cuesta involucrarse sentimentalmente con las personas, por todo lo que le ha pasado.

Dejo de sonreír y bajo la vista.

—Cierto ¿Por qué estamos hablando de esto? La pregunta no era para mí.

—No, pero quiero saber lo que piensa.

Levanto la vista.

—Lo note ¿Qué deseas que te aclare? —entrecierro los ojos.

—Lo que admitiste esa vez que estuvimos juntos.

—Ya hablamos de eso —ruedo los ojos —¿Por qué todo el mundo insiste en recordarmelo?

—Me contaste de la decepción de Diana, también de lo que ocurrió con Eliza y por último, me hablaste de Seyn.

—Sí, lo que ocurrió en el galpón, una situación que me gustaría olvidar, gracias.

—Aclara eso —insiste.

—¿Qué hay que aclarar? Ya te lo dije, fue una situación horrible que me hizo sentir muy defraudado, luego me di cuenta el por qué de mi enorme decepción, ya que trascendió de mi ira hacia toda la pandilla, fue porque me gustaba, pero me rompió el corazón, lo desgarro —suspiro —. Ya está ¿Contento? Ya me pusiste de malas.

—Una última pregunta.

Bufo.

—¿Hay más?

Sonríe y me sobresalto.

—Es la última, lo prometo —vuelve a su semblante serio —. Esto es una teoría pero, ¿confías en mi porque me has estado considerando cierto?

Lo miro fijamente y opino con sinceridad.

—Que perspicaz.