Tengo un problema serio y se llama ¡Los celos Seyn! Le golpeo la cabeza para que deje de hacer esa expresión de enfado y se agarra adolorido la zona afectada.
—Me pegas con tu puño de hombre ¡Eso no vale! —se queja —Peor aún, ¿Por qué está este tipo aquí? —señala a Emmet que prueba una masita.
Estamos en el cumpleaños de Maik, una pequeña reunión en su casa, nos encontramos sentados comiendo cosas dulces, obra de Rein, pero Seyn no para de estar enojado.
—Es inofensivo —lo señalo.
—Esto está horrible —opina el vampiro sin expresión —simplemente no puedo comerlo —deja la masita sobre la mesa.
—¡Es el enemigo! —grita Seyn y lo vuelvo a golpear —¡Ay, duele!
—Te va a doler más, si sigues hablando —amenazo.
—Que bonitos —exclama Ace sonriente y toma un poco de su jugo.
—Tú no opines —lo reprendo —y ve a por tu saltamontes.
—Pequeño saltamontes —me corrige tranquilo.
—¡Es lo mismo! Estoy ocupado aquí ¿Sabés? Voy a solucionar todos mis problemas —sonrío.
—¿Y en cálida de qué viene este? —bufa Seyn mirando a Emmet de refilón, aunque la verdad el vampiro no le presta ni atención, está concentrado observando a Rein que habla con su hermano en la otra punta de la mesa.
—Puedes dejar tus celos por un segundo —frunzo el ceño —es mi amigo, fue mi escolta y si yo quiero que esté aquí, está aquí y punto —repito dictaminando.
—Pero...
Sonrío y le agarro la barbilla.
—Después te atiendo, no sufras.
Se sonroja.
—No me digas eso, que ya me pongo caliente.
—¡Vamos a cortar la torta! —grita Rein levantándose de su asiento —¡Tienes que felicitarme Maik, no me la comí, me aguante! —exclama feliz.
—No le creas, yo sé que le falta una frutilla —se ríe Max y apoya la mano en el hombro de Rein, entonces Emmet frunce el ceño.
—Ahí está tu inofensivo —opina Seyn y lo golpeo otra vez —¡Auch! Agresión.
—Si tú fueras un vampiro, con tus celos, ya hubieras asesinado a todos, en cambio aquí no está pasando nada ¡Así que te callas! —lo vuelvo a reprender y luego miro a Emmet —Todo a su debido tiempo —le aclaro.
—No sé de qué hablas —observa a un costado.
—Que lo acorralas después y no cuando estás enojado por una simple mano de un cazador, ambos sabemos que tu mano es mejor —le guiño el ojo.
—Estoy aquí ¿Sabés? —Seyn presiona los dientes.
—Lo sé —me burlo —ahora sí hay una razón para tu actitud, las demás no eran justiciables.
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La perfección #2
ParanormalUna mariposa, un don, un destino, así es como lograrás resolverlo todo, porque aquel mágico bichito es la solución. Confía en La Perfección. *Secuela de Una chica serás. [Restauración #2] *Por Viviana Valeria V.