Narrador Omnisciente
Una niña azabache de alrededor de unos nueve años se revolvía en su futon tratando de evadir o mejor dicho dispersar un mal sueño, el sudor que poco a poco bajaba de su cabeza era fácil darse cuenta de que la niña estaba teniendo una pesadilla. Vio una capa con nubes rojas y que esta estaba acompañada de sangre en sus bordes inferiores. Hasta que finalmente luego de unos minutos moviéndose logra despertar y ver hacía el frente con algunas pequeñas lágrimas. Y ahí estaba de vuelta, de nuevo aquellos sueños atormentándola desde hace algunos años atrás cuando eso sucedió.
—Debo dejar de pensar en eso y olvidar de una vez. —se decía a si misma para luego proceder a suspirar y mirar por la ventana cercana a ella y ver todo gris.
Sin duda es una costumbre ver el paisaje gris y sin una pizca de la luz del sol, y agradecía internamente que no hubiera sol por qué era algo que realmente le molestaba e irritaba. Vaya que había cambiado y como no hacerlo después de que tuvo que presenciar cuando estaba más pequeña. Pero hagamos un recuento de lo ha pasado en su vida desde la masacre.
Después de aquella masacre, después de recibir un golpe observo como algunos árboles se habían vuelto ceniza y otros solamente estaban quemados de un extremo, se levanto con un poco de dificultad y camino un poco hasta encontrarse con los restos de su aldea, para ser específicos pequeños restos ya que las casas estaban totalmente quemadas y había cuerpos de personas de su clan, tanto de personas mayores y niños pequeños. Se detuvo al observar su antigua casa casi destruida y rastros de sangre seca, un recuerdo rápido surgió de lo que había pasado la noche anterior.
—Perdóname, Natsuki.
Se derrumbo en el suelo, totalmente destrozada, sus padres, su clan entero murió y todo a causa de aquellos hombres con capas negras con nubes. Sus lágrimas pasaron de ser de dolor a rabia y enojo. Sentía rabia al ver como alguien venía a su aldea y sin motivos algunos la destruía pero eso no era todo, jamás iba a pensar que hubiera un aliado de aquel hombre entre su clan, sin duda alguna se sentía realmente furiosa al enterarse de que aquel que ella consideraba su mejor amigo la traiciono y no sólo a ella, sino también a su clan. Debido a la furia que la niña de seis años sentía una leve aura azul y sus ojos comenzaron a derramar algo que ella pensaba que eran lágrimas, pero en realidad era sangre.
Tsubasa lo iba a pagar al igual que el hombre que asesino a su clan entero y en especial al asesinar a su padre y madre sin piedad alguna. Y se dejo llevar por la furia, desde ese día juro vengarse. Muy pronto la noticia de que la aldea cercana a Kirigakure fue totalmente masacrada y dejar a una sola sobreviviente voló como el polvo, pero únicamente en el País del Agua y un poco más de sus exteriores.
La azabache ya lista salió de su apartamento y metió sus manos dentro de sus bolsillos, rumbo a la academia. Paso alrededor de unos puestos para luego ver la entrada de la academia y ver personas caminar adentro de esta. Entro como si nada y fue directo a su aula, las clases para ella eran aburridas pero eran necesarias para poder ganar mucha más fuerza y conocimientos aunque le habían dado la opción de hacer convertirse en una genin a corta edad, lo pensó y debía admitir que no le gustaba el hecho de que sus manos iban a estar manchadas de sangre.
Ella sonrió al pensar en eso.
—Que ridículo. —murmura para sí misma.
Y era verdad, era ridículo que ella pensara en eso cuando sus manos ya estaban manchadas de sangre a causa de molestias o mejor dicho compañeros. Por eso ella era conocida por Kirigakure como el sufijo de la Princesa Carmesí, así que no era de esperarse que ella fuera temida por que sin rechistar por que puede matar a quien se le antoje pero Yagura, el Mizukage le menciono que si volvía a repetir aquello iba a ser sancionada con la muerte y por ello únicamente mira a sus agresores gélida para hacerlos sentir con miedo y que su mascara de agresor se cayera .
¿Pero por qué lo hace?
La respuesta era que cuando hace algunos años atrás después de unos días de la masacre tuvo que ser llevada a la aldea más cercana o mejor dicho directamente a Kirigakure, cuando llego y estuvo en sus primeros días de academia sufrió burlas y hasta golpes por parte de sus compañeros por saber que ella era la última de su clan hasta que eso cambió, ella estaba harta de las burlas y maltratos que sufría una niña de su misma edad la estaba golpeado y ella no hacía nada ante esto pero grande fue la sorpresa de que su victima había detenido su puño y rápidamente se abalanzo a ella y comenzó a golpearle hasta hacerla sangrar. Natsuki sonrió con psicopatía, le gustaba tener escurriendo por sus manos la sangre de la niña, los demás sólo observaban la muerte de la niña y ver la sangre escurrir por las manos de la oji-azul. Desde ese día comenzaron a rondar rumores de ella, el más concurrido era que Natsuki Boru había asesinado a su clan entero incluso a su familia para ser la última de ellos y ganar mucho más poder. Y fue desde eso que la tachaban de asesina, se gano el odio de todos los aldeanos y ya no es raro para ella escuchar lo que siempre le decían.
Asesina.
Demonio.
Engendro.
Ella fingía que aquellas palabras no le dañaban, pero cuando estaba totalmente sola ella se desmoronaba y sollozaba sin parar hasta que sus ojos se ponían hinchados de tanto llorar, pero había una palabra que más le afectaba; Monstruo. Esa palabra le dolía pues le hacía recordar a lo que le decían en su antigua academia cuando su clan aún existía, ya que después de que ella comenzó con su entrenamiento unos pocos días durante la practica de pelea a ella le había tocado con un niño de su clase, ella estaba en total desventaja por qué estaba herida pero a gravedad y el maestro no hizo nada para detener la batalla entre sus alumnos hasta que Natsuki envuelta en miedo de que siguiera siendo golpeada una leve aura la cubrió y cuando su compañero iba a ensestarle otro golpe su piel comenzó a arder al entrar en contacto con Natsuki y eso sorprendió tanto a sus compañeros como al maestro, sus compañeros sintieron miedo de la azabache a partir de ese día y comenzaron a llamarle monstruo, ella continuamente lloraba siendo consolada por Tsubasa ya que sus padres no estaban enterados de esto. Tsubasa le dijo que ella no era un monstruo y que debería ignorar a sus compañeros, y de ahí ella no dejo que aquella palabra le lastimara más.
Natsuki sacudió levemente su cabeza al pensar en el pasado.
—Maldito. —dijo en voz baja.
Vaya que siente un profundo rencor hacía él, e iba a conseguir su tan ansiada venganza, ella sonríe ladina al pensar en la muerte de aquellos dos.
ESTÁS LEYENDO
𝗟𝗢𝗡𝗘𝗟𝗜𝗡𝗘𝗦𝗦 | 𝗌𝖺𝖻𝖺𝗄𝗎 𝗇𝗈 𝗀𝖺𝖺𝗋𝖺
Fiksi Penggemar𝗟𝗼𝗻𝗲𝗹𝗶𝗻𝗲𝘀𝘀| ❝Vale la pena pasar por la soledad sólo para ver a la persona que quieres bien.❞ ❧No copiar y/o plagiar historia. 💮𝐈𝐧𝐢𝐜𝐢𝐨: 27/03/19. 💮𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥: 24/06/19. ❧Naruto le pertenece a Masashi Kishimoto. Copyright © All Right...