Eterna Voluntad: Los nuevos portadores

Manipulación

Sus inexpresivos y blancos ojos... su actitud fría y controlada donde solo un mar de ira se demostraba en sus pálidas facciones acompañadas con la horrida tez de la tercera fase era lo único que se presenciaba en Ryo...

Mientras que su único objetivo... era matar a la mujer que intentaba detener su actuar.

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Sin embargo... aquella historia no se aceptaría nuevamente en la mente de aquel hombre.

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—N-No... —Ryo, como si realizando el máximo esfuerzo posible se tratase... detuvo en el acto su esfera aural a pocos centímetros del rostro de Harumi —N-No volveré a perder la maldita cabeza, otra vez... —dichas palabras desconcertaban a Harumi, la cual, con el miedo aún vigente en su tembloroso rostro, no sabía cómo reaccionar a la actitud del propio hombre.

—¿R-Ryo...? —las nerviosas palabras finalmente emergieron en la mujer... mientras que Ryo empezaba a apretar sus dientes con todas sus fuerzas, a la par que su enfurecido rostro únicamente daba una mayor énfasis al propio temblar de su mano que aún mantenía la esfera aural apuntando hacia el rostro de su esposa.

—Estoy... d-demasiado enojado...—gruñía Ryo abordado por la rabia demostrada en sus facciones, a la par que su puño tiritaba cada vez más ante las "fuerzas opuestas" que lo controlaban —¡Salte de una vez, Harumi! —gritó con todas sus fuerzas, Ryo, a la par que el mismo casi parecía suplicar a su mujer el que lo soltara y con ello no la atacara con aquella esfera aural, mientras que el rostro tembloroso de Harumi junto con su paralizado cuerpo no tardó mucho en cambiar...

Por uno completamente serio y decidido.

—¡Me niego! —gritó de igual manera Harumi hacia Ryo luego de unos segundos de silencio, a la par que la misma no dejaba de sujetar el brazo del hombre —No me pienso mover de acá, Ryo...—decía ahora con un tono más bajo pero con la seriedad aún reflejada en su rostro, mientras que Ryo únicamente bufaba enfurecido ante las propias palabras, aún intentando controlar sus violentos e inexplicables impulsos... solo para volver a exaltarse levemente, pero sin apartar su mirada de la de su esposa, en el momento en el que es Takeshi el que sujeta con ambas manos su otro brazo.

—¡Ya es suficiente, viejo! —exclamó Takeshi con el mismo esfuerzo de intentar detener las acciones de su padre, pero no inmutando en lo absoluto al hombre...

—¡P-Por favor...! —rogaba con enfurecida voz Ryo, a la par que el vapor naciente de sus lágrimas comenzaba a emerger conforme su puño lentamente empezaba a acercarse al rostro de Harumi —¡S-Sueltenm...! —Apenas alcanzó a decir aquellas palabras...

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Antes de que Haruko lo golpeara por la espalda... con la gruesa barra de Arkon que Yoshiro utilizaba para entrenar...

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Haciendo que el cuerpo del Kurogane saliera expulsado varios metros hacia delante, rompiendo por completo los brazos de aura con los que sostenía a Kazuma de igual manera.

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