Un futuro incierto

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Bajo una infantil e inmadura actitud se esconde aquel hombre que pasó por lo peor, aquel cuyo cuerpo y mente afrontaron el peso del poder, finalmente emergía con su penetrante y seria mirada, observando sin temor a aquel ser que ahora se encontraba en su dominio.

No había cejas, mejillas o cualquier otro tipo de característica que pudiera otorgar una información o sentimiento, más Ryo solo podía observar con tranquilidad aquel par de ojos blancos y brillantes, junto con aquella dentada boca de negros y afilados dientes creados a partir de la misma materia con la que estaba creado, los cuales únicamente terminaron por causar una peculiar sonrisa en el rostro del Kurogane.

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Ya que en aquellas simples y monótonas características que la criatura poseía, Ryo era capaz de detectar el temor.

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-"¡¿Cómo es que... sabe...?!" -Aquella criatura solo podía pensar en sus adentros, a la par que observaba completamente incrédulo a Ryo.

-¿...Qué estarías aquí? -Ryo completó la pregunta del parasito con tranquilo tono, solamente para hacer que el mismo se espantara y abrumara aún más.

-No es como si no hubiera sentido tu asquerosa presencia en el cuerpo de Kenji luego de que bloqueáramos la naturaleza de su aura... nunca podría olvidar algo tan asqueroso que estuvo dentro de mi cuerpo por tanto tiempo, pero ¿Sabes? -Ryo únicamente empezaba a sentarse con comodidad sobre aquel inmovilizado parásito, aún sujetando la Katana de Yome -Me das demasiada curiosidad, quería saber qué más podrías hacer -Ryo continuó hablándole sin mayor incomodidad y alguna sombra de remordimiento, mientras que aquella criatura solo podía permanecer callada.

-Kenshi solo balbuceaba de que no estaba a tu altura. Que eras capaz de predecir a la perfección todo lo que ocurriría. Y aún así, aquí estamos, contigo completamente a mi merced, ¿Por qué alguien con tal nivel de clarividencia no habría supuesto que esto ocurriría? -Reconoció el Kurogane, mientras que aquella oscura materia solo pudo empezar a sonreír.

-¿"No sabría que vendrías"? no me hagas reír... -Una masculina voz empezó a emerger de la criatura, mientras que Ryo solo se mantenía con mirada pensativa -Solo quería tener la oportunidad de ver tu maldita cara una vez más... -Afirmó, únicamente para callarse en el acto, una vez que el propio Ryo solo retorció de manera leve la espada que aún se encontraba enterrada sobre él.

-Me cuesta creer eso viniendo de alguien que solo siente miedo y preocupación por mi presencia ahora mismo-Las palabras de Ryo dejaron callado al monstruo, conforme el propio Kurogane únicamente empezaba a fruncir el ceño.

-Pero, ¿Sabes? todo estaba demasiado preparado para Kenji cuando fui a la capital... supongamos que tú realmente eres capaz de predecir el futuro de alguna manera, que supiste qué y cómo lo haría -El Kurogane comenzaba a pensar en voz alta -Entonces, ¿Cómo es que fallaste? ¿Por qué alguien que conoce el futuro es incapaz de prever que va a perder? Mi hija sobrevivió, no pudiste controlar a Yoshiro, Ryo logró salvar a mi hijo... -El Kurogane solamente podía hablar, mientras que solo el silencio era la respuesta de la criatura, únicamente para exaltarla, luego de que el propio Ryo comenzara a esbozar una pequeña sonrisa.

Antes de que el mismo solo señalara y golpeara con la uña de su dedo índice su Katana.

-Creo que hay factores que pueden arruinar tu... "clarividencia"~ -Dijo con tono confiado y con una pequeña sonrisa, Ryo, solamente para formarse un nuevo silencio entre ambos, conforme el Kurogane solo seguía jugando con la espada enterrada.

Eterna Voluntad: Los nuevos portadoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora