19

5.4K 280 6
                                    

— ¿porque tienes esa cara? — Me pregunta Dom mirándome con curiosidad.

Todos decidimos ir a la playa para aliviar tensiones, así que aquí estamos. Puedo decir que no se ha aliviado nada porque mamá y la señora Rebecca se están lanzando miradas no tan agradables desde que pisaron la arena. Dom y yo estamos sentados en la arena, tomando unas cervezas.

Mel y Chloe están jugando en el mar junto con mi hermana y sus hijos. Los demás están en la arena hablando de temas triviales, tratando de olvidar ese inconveniente del almuerzo.

— Es la cara que tengo, ¿algún problema? — Él se ríe.

— Es que desde que Melody se quitó su vestido y quedó en su vestido de baño, no has dejado de mirarla con esa cara. — Señala mi rostro — Pareciera que en cualquier momento le fueras a saltar encima.

Resoplo y tomo otro trago de mi cerveza.

— No luzco así. — Él alza una ceja.

— ¿que pasó cuando fueron a la playa? Y quiero la verdad.

— Nada, solo que oficialmente ya es mi novia. — Dom abre los ojos y me sacude violentamente por los hombros.

— ¡Joder, Matt, ya no eres un perdedor! ¡te felicito, amigo! — Deja de sacudirme y ruedo los ojos.

— Me gustan tus felicitaciones, amigo.
— Me guiña un ojo.

— Pero volviendo a lo importante, ¿se besaron salvajemente?

— ¿porque en el mundo tu quisieras saber sobre eso? — Él se encoje de hombros.

— Trato de entender a las mujeres. Esto es lo que hacen las mejores amigas ¿no? — Me rio.

— ¿porque quieres entender a las mujeres?

— Porque es divertido. — Frunzo el ceño.

— Eso no es divertido.

— Tú cállate, yo sé lo que hago. — Me encojo de hombros — Todo este viaje ha abierto la mente a viajar a otros lugares.

— ¿te vas? ¿sabes que tienes trabajo, verdad? — Él hace una mueca.

— Ese es el pequeño detalle que me falta por cubrir. — Se quita su camisa quedando con el pecho descubierto. — ¿y si me adelantas las vacaciones?

— ¿que ganaría con eso?  — Muchas de las mujeres que pasan por delante de nosotros se quedan viendo a Dominic con sonrisas en sus rostros.

— Ganarías ver a tu mejor amigo feliz en otro país. — Ruedo los ojos y también me quito mi camisa. Él alza una ceja — Si fuera una mujer, estaría saltando sobre ti en este mismo instante.

— Bien. — Él frunce el ceño.

— ¿Me voy de vacaciones, o salto sobre ti? Porque eso de saltar sobre ti no iba en serio. — Ruedo los ojos.

— No, idiota, puedes ir de vacaciones. 
— Su boca se abre.

— ¿en serio? ¿me estas hablando en serio? ¿no es una broma, verdad? Porque si es una broma...

— Es en serio, puedes irte de vacaciones, pero... — Rueda los ojos.

— Ahí está.

— No puedes perderte, te llamaré un par de veces y tienes que contestar. — Me da una sonrisa burlona. — Te daré tres semanas.

— ¿y que pasa si no lo hago? ¿vas a ir a pegarme? — Hace un mohin de lo más pretencioso.

— Si no me contestas, el día que regreses, bajará tu salario y no tendrás más vacaciones. — Abre los ojos y su boca con sorpresa.

Mi razón de vivir [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora