— ¿a donde se fueron? — Me pregunta Mel abrazada a mi en la cama.— ¿quien? — Le hago pequeños masajes circulares en su espalda.
— Tu hermano y la esposa.
— No sé, lo más probable es que sigan aquí. Nunca le pregunté. — Ella ríe.
— Eres un padrino horrible. — También me río.
— Sí, tal vez.
Hoy es nuestro último día en Bali; ya recorrimos varios lugares de aquí. Fuimos a Seminjak que es como un pequeño mercado en el que pudimos comprar recuerdos y comer en las pequeñas cafeterías de allá. Luego, por petición de mamá, estuvimos en algunos templos, de los cuales no me acuerdo ningún nombre porque son condenadamente difíciles de aprender. Después alquilé una moto y conduje con Mel por las calles de las playas, y nos tomamos varias fotos.
Chloe jugó con los niños de la isla cuando pasábamos por las playas. Se hizo amigos de ellos, aunque ningúno se entendiera lo más mínimo, pero a Chloe le encantaba estar rodeada de todos los niños, y eso me hacia feliz a mi, así que la dejaba jugar. Se puso muy triste cuando tuvo que despedirse de todos (lo gracioso era que no podía decirles nada que entendieran, así que solo agitó la mano). Luego Mel y yo le subimos el humor yendo a ver las cascadas y lagos, cosa que le encantó porque no podía apartar su mirada de sorpresa viendo tanta agua caer de tan alto.
Comimos mucho helado y dulces con mis padres y compramos más cosas (como ropa, sombreros o cosas estúpidas que nos gustaran). En realidad fue una tarde muy linda. Ahora Chloe está con mis padres y Dom jugando en el parque del patio, y Mel y yo estamos aprovechando el tiempo estando acurrucados.
— Lo peor es que tengo que volver a trabajar cuando vuelva. — Hace un pequeño mohin, que inmediatamente beso.
— Eso se llama: Volver a la triste realidad. — Le quito un mechón de pelo de la cara y se lo pongo detrás de la oreja.
— Como desearía quedarme aquí para siempre. — Sonrío y le doy otro beso.
— Congelar el tiempo y quedarnos aquí. — Ella asiente — Lastima que no podamos.
— Sí podemos, solo que no debemos.
— Miro la hora en mi reloj y suspiro.— Tenemos que hacer maletas. — Ella asiente y nos bajamos de la cama. La cosa es subir al jet a las siete de la noche para llegar a Nueva York cerca de las once o doce de la mañana. Empiezo recogiendo todas las cosas de Chloe y meterlas en la maleta.
— Mañana es lunes, lo que quiere decir que el martes tendré que trabajar. — Comenta guardando sus cosas.
— Creeme, pasarás todo el lunes dormida.
— Ojalá. — De pronto Chloe entra al cuarto dando saltitos.
— Papi, ¿nos tenemos que ir ya? — Asiento y ella hace un puchero — ¿no nos podemos quedar un poquito más? ¡por fis, papi!
— Sabes que no podemos; tú estás en la escuela y yo tengo que trabajar. — Se cruza de brazos. — Pero podemos volver.
Su mueca se convierte en una gran sonrisa.
— ¡¿en serio, papi?! — Asiento y ella salta. — ¡podemos venir los tres!
Mel me mira de reojo.
— Eso lo discutiremos después, ¿bien?
— Ella asiente con entusiasmo. — Ahora, ¿tienes todos tus peluches?Ella mira a Molly en su cama y asiente.
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Mi razón de vivir [EDITANDO]
RomanceNo te escogí, ni te quise a primera vista. no supe de ti hasta muy tarde. No tomé las mejores desiciones contigo. Hago muchas cosas mal. Tengo problemas y casi siempre terminas en medio. Cometo muchos errores. No soy perfecto y tengo mucho que mejor...