CAPITULO 10

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Nada mas aterrizar en Miami, los chicos bajaron del avión y recogieron sus pertenencias.

Estaban caminando hacía la salida, cuando de pronto Christopher agarró a Zabdiel del brazo.
-Chicos, ir yendo vosotros, tengo que hablar de una cosa con Zabdiel.
(Erick miró a sus dos amigos y se encogió de hombros)
-Vale, pero no tardéis.
Nada mas decir eso, el menor agarró a Joel de la mano y ambos se encaminaron hacía la salida.

Una vez solos, Christopher hizo que Zabdiel se sentará en un banco y después se sentó él, a su lado.
-Como estás?
-No lo sé. Dijo este bajando la cabeza. Mal, supongo.
(Christopher se acercó a él y aprovechando que era de noche y el aeropuerto estaba casí vacío, le dió un beso en los labios)
Al separarse, le agarró tiernamente de la mano y le miró a los ojos.
-Verás, antes de nada quiero decirte que aunque estés mal y pienses que todo se ha ido a la mierda, quiero que recuerdes que yo estoy aquí, siempre preparado para apoyarte en cualquier momento difícil de tu vida. Y.. Que si en algún momento piensas que no te queda familia, mires a tu lado, donde cuatro chicos de diferentes nacionalidades siempre van a estar allí, apoyándote en todo momento y desiciones que tomes, el resto de tu vida. Porque no sé si lo sabes, pero nosotros, tus amigos, somos tu verdadera familia, una la que jamás te va a abandonar.
(Una lágrima resbaló por la mejilla del boricua)
-Lo sé. Dijo secándose la resbaladiza lágrima. Por eso os quiero tanto.
Sonriendo, Christopher agarró a Zabdiel del brazo y lo atrajo hacía él para unirse en un tierno abrazo.

☆☆☆

-No le veo. Dijó Joel mirando a su alrededor. Donde demonios está?
(Erick se encogió de hombros)
-Tal vez se haya retrasado un poco, Ricky nunca ha sido muy puntual que digamos.
-Ya, pero aún así...

Su conversación fue interrumpida por un auto deteniéndose enfrente de ellos. Este era bastante grande, de color negro.
(Erick miró a Joel, y vió que este tenía el ceño fruncido)
-Joey, ocurre algo?
-No te muevas. Dijó este poniéndole la mano en el pecho. Enseguida vuelvo.

Poco a poco, Joel comenzó a caminar hacía el auto.
Erick quiso seguirle, pero algo en su interior le dijó que no lo hiciera. Así que decidió hacerle caso a su pareja, y quedarse ahí parado, viendo como este se acercaba lentamente al auto.

Una vez al lado de la puerta del piloto, Joel llamó suavemente a la ventana, dando unos pequeños golpecitos en ella.
Pronto, esta se comenzó a bajar lentamente dando a ver una cara conocida.
(Joel, al ver al hombre que se encontraba trás la ventana, sintió unas ganas tremendas de salir corriendo)
-Hola. Dijo el tipo mostrando una gran sonrisa. Desea algo?
-Eeeemm...no. Dijo Joel rascándose nerviosamente la nuca. Perdón, me he equivocado.
(Una malvada sonrisa se dibujó en el rostro del extraño hombre)
-Yo creo que no.

Nada mas decir eso, una de las puertas traseras se abrió completamente dejando salir a dos hombres armados.
Al verlos, Joel rápidamente se dió media vuelta y miró a Erick, que estaba observándolos a tan solo unos metros.
-ERICK, CORRE!
(El menor, al escuchar decir eso a Joel se asustó bastante)
-Joel...
-Corre! Gritó este a la par que uno de los hombres armados le agarraba del brazo y tiraba de él. Por diós Erick, corre!

Sin saber que hacer, Erick se dió media vuelta y salió corriendo.
Pero no llegó muy lejos, porque tan pronto dió tres pasos, un hombre ya le tenía agarrado de la camisa.
-SUELTÁLE! Gritó Joel pegando una patada al hombre que le tenía agarrado. SUÉLTALE MALDITO CABRÓN!

Erick intentó soltarse del agarre, pero lo único que consiguió fue cabrear mas al tipo que estaba sobre él. Lo que ocasionó, que este, enfadado cogiera la pistola y con la culata le pegará un fuerte golpe en un costado de su cabeza haciendo que el menor perdiera la vista por un momento.

Joel, al ver que Erick se quedaba pálido y desorientado, sintió que todo lo que había a su alrededor desaparecía, concentrándose sólo en él.
-Erick...

Tras haber recibido un fuerte golpe en la cabeza, Erick sintió que todo a su alrededor daba vueltas.
Aquel golpe le había afectado, bastante.
Mientras se preocupaba por mantenerse en pie, notó como alguien le agarraba de los pies y lo elevaba en el aire.
-Suelt...
No pudo terminar la frase, ya que todo a su alrededor se volvió negro.

☆☆☆

Después de haber llorado desconsoladamente en los brazos de su amor, Zabdiel decidió que ya era hora de dejar los sentimientos atrás.
Así que poco a poco, se separo de los brazos de Christopher y le miró a los ojos.
-Ya está. Dijo secándose las lágrimas. Ya esta.
(Christopher le miró tiernamente)
-Ya estás mejor?
-Si. Dijo mostrando una pequeña sonrisa.
-Ves? Llorar no es nada malo, de echo, es lo mas normal del mundo.
-Lo sé. Dijó sonriendo. Y te doy las gracias, me ha sentado bastante bien desahogarme.
-No tienes que darlas bebe, sabes que estoy aquí para todo lo que quieras.

Trás secarse la última lágrima, Zabdiel se pusó en pie y extendió la mano a Christopher.
-Vamos, vayamos a buscar a los dos enanos. De seguro que estarán dejando loca la cabeza del pobre Ricky.
-Si. Dijo Christopher agarrándole de la mano y poniéndose en pie. Antes de que se preocupen.

Al llegar afuera, Christopher y Zabdiel vieron que todo el aparcamiento estába vacío.
Buscaron con la mirada a sus dos amigos, pero no les encontraron.
-Donde demonios están? Dijó Christopher mirando a su alrededor. Les dijimos que esperarán aquí.
-No lo sé. Dijó Zabdiel dando unos pasos adelante. Pero esto no me huele bien.

Estaban revisando la zona en busca de sus amigos, cuando de pronto Christopher encontró un pequeño charco de sangre.
-Zabdiel! Gritó llamando la atención de este. Aquí hay algo!
Rápidamente este corrió hacía donde estaba Christopher y se agachó a su lado.
-Eso es..?
-Un charco se sangre. Dijó Christopher.
-Oh, vaya. Eso no es nada bueno.
-No, no lo es.
-Christopher!
Sorprendido, este miró a su pareja y vió que estaba mirando algo. Al seguir su mirada, vió de que se trataba.
A tan solo unos metros de ellos, se encontraban las dos maletas de sus amigos.
-Los tienen. Dijó Zabdiel apenas en un susurro. Alonso los tiene.

Corre,escapa,huye [Cnco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora