CAPITULO 18

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-RICKY!!!

Sonrientes, los tres chicos corrieron hacía su manager.
Este, con lágrimas en los ojos, abrió totalmente los brazos y espero a que estos llegarán a abrazarle.
Al impactar sus cuerpos contra el de este, los chicos cerraron los ojos y disfrutaron de la sensación de protección que este derramaba.
-Shhh. Dijó Ricky abrazando a los tres chicos. Ya esta, todo a acabado.

De pronto, la puerta de la cocina se abrió y por ella entraron Zabdiel y Richard.
-Que haces tu aquí? Preguntó Zabdiel enfadado.
(Sorprendido, Ricky posó la mirada en Zabdiel)
-Zabdiel, hijo... Cuando gusto verte.
-No me llames así. Dijó este mirándole de arriba a abajo. No soy tu hijo, mis padres están muertos.
-Si, lo sé. Dijo bajando la cabeza. Lo siento mucho.
-Sé que lo sientes, porque es culpa tuya.

Todos en la sala se quedaron estupefactos.
-Zabdiel! Dijó Joel abriendo los ojos de par en par. No digas eso, no es verdad.
-Si lo es! Dijó este mirando con odio a Ricky. Porque una vez él nos prometió que iba a estar con nosotros, apoyándonos en todo momento, en los buenos y malos momentos. Si digo que mis padres han muerto por su culpa, es porque él no estuvo ahí cuando debería haber estado... Nunca lo ha echo, ni cuando nos secuestraron el año pasado ni ahora, que casí nos matan.
-Tienes razón. Dijó Ricky. Os he fallado, no he estado con vosotros cuando mas me necesitabais. Y ceerme que me arrepiento enormemente de haberlo echo, porque para mí vosotros sóis como mis hijos.
-Siento decirte esto Ricky pero no te creo.

Nada mas decir eso, se dió media vuelta y camino hacía la puerta de la cocina.
-Voy a dormir, buenas noches.

☆☆☆

-Edurne! Gritó Alonso entrando ferozmente en la cocina. Quiero veros a tí y a tu hermano en mi despacho en dos minutos! Tengo que hablar con vosotros.
-Si padre. Dijó esta dejando el baso de leche sobre la encimera. Voy a avisarle.

Sin mirar siquiera a su padre, está salió por la puerta de la cocina y se dirigió al piso superior, donde su hermano menor descansaba plácidamente en su cama.
-Hey, tú! Dijó entrando en el dormitorio y retirándole las sábanas de golpe. Despierta, papá quiere vernos.
(Enfadado, su hermano abrió los ojos y la miró de mala manera)
-Podrías ser mas educada? Estaba durmiendo.
-Me da igual! Papá quiere vernos en un minuto en su despacho, y ya sabes como se pone cuando no hacemos lo que quiere.
-De acuerdo. Dijó este resoplando. Ya voy.

Al llegar al despacho de su padre, ambos se sentaron en uno de los enormes sofás que tenía enfrente de su escritório.
-Bien. Dijó Alonso mirándolos de arriba a abajo. Os he echo llamar para haceros un comunicado de urgencia.
-Que comunicado? Preguntó Edurne extrañada.
-Sé que últimamente no he sido el mejor padre del planeta ni he estado mucho con vosotros, por eso quiero que sepáis que a partir de ahora vamos a trabajar los tres juntos, mano a mano, como una familia.
-Espera, que? Dijó el menor sorprendido. Vamos a trabajar contigo? Aqui, en tu oficina?
-No del todo. Dijó Alonso mostrando una pequeña malbada sonrisa. Sé que ambos sabéis a lo que me dedico, y también sé que no os gusta del todo mi trabajo, por eso vengo a proponeros un trato; vosotros me ayudáis a acabar con mis enemigos, y yo vuelvo a ser el mismo padre de antes, el que estaba siempre en casa, jugando con vosotros.
-Acabar con tus enemigos? Preguntó el menor mirándole fijamente. A que te refieres con eso?
-

A matarles. Contestó su hermana. Quiere que matemos a unos chicos por el, ya que él mismo no puede hacerlo.
(Los ojos del hermano se abrieron de par en par)
-Ma-matar? Yo nunca he matado a nadie!
-No quiero que matéis a nadie. Dijó Alonso rodando los ojos. Simplemente quiero que los drogueis, que los sometais contra su voluntad.
-Que... Los secuestremos?
-No. Eso no sirve con ellos, siempre se acaban escapando. Edurne, recuerdas lo que utilizaste con Richard para que hiciera todo lo que tu querías?
-Si, aquel líquido extraño.
-Exacto. Pues quiero que prepares mas de esos, como unos cinco o seis. Cuando los hayas echo y estén terminados, quiero que se los des a tu hermano, él se encargará de que los chicos se lo beban.
-Yo? Dijó este sorprendido. Porque yo?
-Porque eres de su misma edad. Dijó levantándose de su escritório. Y ellos confiaran en ti.

Corre,escapa,huye [Cnco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora