CAPITULO 11

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Este capítulo se lo dedicó a mi pequeña user81532051

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Un fuerte dolor en el pecho hizo que Erick abriera los ojos poco a poco, encontrándose con una figura borrosa enfrente de él.
-Joel...

-Vaya. Dijó sonriendo. Al fin la bella durmiente se ha despertado.
(Erick le miró de arriba a abajo, aún sin creérselo)
Enfrente de él estaba Richard, con un cigarro en las manos.
-Hola Erick.
Enfadado, este se intentó abalanzar sobre Richard, pero algo se lo impidió.
-No te esfuerzes. Dijo Richard llevándose el cigarro a la boca. No te vas a soltar.

Sorprendido, el menor levantó su cabeza y vió que tenía las dos manos atadas en la parte superior de su cabeza, donde una gran cadena pasaba directamente desde sus muñecas al techo.

-Richard... Dijó Erick apenas en un susurro. Porque haces esto?
-Porque quiero. Dijó este en tono serio. Y porque mi jefe me lo ordena; quiere que sufrais, y yo le voy a obedecer.
Nada mas decir eso, se sacó el cigarrillo de la boca y se lo clavó a Erick en el pecho, haciendo que este gritará desesperadamente de dolor.

☆☆☆

Un fuerte grito despertó a Joel, haciendo que este abriera rápidamente los ojos y mirará a su alrededor.

-Hey, tranquilo, tranquilo. Dijó una voz a su lado. No vamos a hacerte nada, aún...
Sorprendido y asustado a la vez, Joel giró su cabeza y se encontró con una cara muy conocida; Alonso.

-Tu... Dijó mirándole con asco.
(Esté se comenzó a reír)
-Vaya Joelito, veo que te alegras de verme.
-Si, me gustaría verle, pero bajó tierra.
-Oh, vaya. Dijo Alonso aún riéndose. Eso ha sido bastante feo.
-Donde esta Erick?
-No te preocupes por él. También esta vivo, aún. Aunque pronto dejará de querer estarlo.
-Hijo de puta...
Un fuerte dolor en la mejilla izquierda hizo que Joel girará bruscamente la cabeza. Alonso le había golpeado.
-No se te vuelva ocurrir insultar a mi difunta madre, pedazo de mierda.
(Joel le miró con rabia)
-No te mereces que te tenga respeto, no después de lo que nos as echo.
-Echo? Lo que os he echo es poco comparado con lo que os voy ha hacer ahora, eso tenlo por seguro.

☆☆☆

Trás haber encontrado sangre en el suelo del aparcamiento y las maletas de sus dos amigos tiradas en el suelo, Christopher y Zabdiel supieron que Alonso los había secuestrado, así que rápidamente corrieron a pedir ayuda a la única persona que sabían que podía ayudarles; Juan.

Este, al enterarse de lo que había ocurrido, no dudo ni un segundo en ayudar a los chicos.
Así que cuatro horas después, los tres se encontraban reunidos en una zona apartada de Colombia.

-Donde está mi sobrino? Preguntó Juan nada mas verles. Por favor, decirme que no lo tiene el loco de Alonso.
-Lo tiene. Dijo Zabdiel bajando la cabeza. También tiene a Joel.
-Oh, dios mío... Mi pobre pequeño.
-Juan. Dijó Christopher llamando la atención de este. Tenemos que hacer algo, sacarles de donde quiera que los tenga secuestrados.
-Usted sabe donde podría tenerlos?
-No. Dijo Juan dándo un suspiro. No tengo ni idea, desde que ocurrió lo de su hijo, Alonso no ha vuelto a pisar el monasterio.
-Pues tenemos que encontrarles, o pronto les matará.
(Juan abrió totalmente los ojos y miró a Zabdiel)
-Ha.. Ha matado a alguien ya? Donde esta Richard?!
-Si. Dijo Christopher bajando la mirada. Si ha matado a alguien, pero no a Richard.
-Entonces a quien?
-A mis padres.
(Sorprendido, Juan giró la cabeza y miró a Zabdiel, que estaba con la cabeza gacha, aguantando las lágrimas)
-Oh mi diós... Lo siento mucho.

Corre,escapa,huye [Cnco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora