Me atrapaste [[Noodoc]] ©

Capíulo 26

-¿Te gusta la cerveza?

-No, la verdad no. Es más, la encuentro horrible. -respondo y le doy un sorbo a mi café. Thomas y yo nos encontramos conversando en la sala mientras Murdoc y sus amigos hablan en la cocina.

-Yo igual. Es amarga y... no lo sé. -alza los hombros

-¿Eres amigo de Lenna?

-Si, nos conocimos desde hace 3 años.

-Vaya, pareces agradable -sonrío

-Gracias. También me agradas, Noodle.

-¡Bien, niños! -exclama Murdoc apareciendo frenéticamente y haciendo que ambos soltemos un pequeño grito- ¡Hora de salir de aquí!

-¿A dónde vamos? -pregunto

-A pasear. No vinimos para quedarnos encerrados aquí, el festival empieza mañana, debemos recorrer las calles para no perdernos mañana.

-Okay... -me levanto del sillón y cuando intento ir hacia nuestra habitación, me toma por la cintura y me besa apasionadamente. Eso fue repentino. Abro un poco los ojos y noto que está mirando a Thomas con firmeza. Me separo de él algo avergonzada y camino hacia nuestra habitación.

¿Acaba de decirle indirectamente a Thomas que es mi novio omqlgo así? Rayos, ¿Por qué todos los hombres piensan que los vamos a engañar tan fácilmente?

Me coloco unas zapatillas y una casaca azul y salgo a la sala. Todos salimos. Camino junto a Thomas, pues Murdoc se va carcajeando con Alex y Neil. Lenna se nos une en la charla, hablamos de el festival. Asistirán más de 2 mil personas según Thomas.

-Oh, vamos, Tommo -supongo que así le dice de cariño- 2 mil personas es muy poca gente. -ríe Lenna

-¿Entonces cuántos?

-Hm... Alrededor de 5 mil.

-No lo creo

-Yo tampoco -hago una mueca

-Ya lo verán mañana -sonríe victoriosa

Luego de unos minutos, Murdoc me separa de Lenna y Thomas para estar junto a él. Rodea mis hombros fon su brazo y me pega a su cuerpo

-¿Sucede algo? -pregunto algo extrañada

-No, es solo que Neil y Alex querían hablarte. -sonríe y besa mi cabeza

-Así que... Eres de Japón, ¿Eh? -pregunta el pelirrojo Alex.

-Así es.

-¿De qué parte?

-Osaka.

-Vaya. -suspiro Neil y se pasa las mano por el cabello

-¿Tienes familia allá?

-Pues... Mi padre. Casi nunca hablo con él... Sólo llama para desearme un feliz cumpleaños-me encono de hombros. Me da tristeza hablar de mi padre, de mi familia en general. Nunca hablo con mis hermanos ni con mi tía Jin... Que mala sobrina, que mal hermana, que mala hija...  Mamá no le hubiese gustado mi comportamiento. Seguro estaría decepcionada...

-Oye, ¿Estás bien? Perdón si te ofendimos en algo... -dice el castaño mirándome con preocupación, es entonces cuando me doy cuenta de que estoy llorando.

-Estoy bien... -seco mis lágrimas.

-¿Chiyoko? -pregunta Murdoc mirándome y parando de caminar

-Tranquilo, Mudz. Estoy bien, en serio.

-Ya basta de pregunta personales, idiotas.

-¿Preguntas sexo anales? -broma Alex y todos reímos

-¡Miren, una taberna! -todos volteamos a mirar el descubrimiento de Thomas.

-¿"Taberna del muertito"? ¿Que clase de nombre de ese? -ríe Murdoc

-Se ve antigua. ¿Por qué todo aquí está decorado con flores? -pregunto

-Es la temática -informa Neil.

-¿Deberíamos entrar? -cuestiona Thomas

-Nah, seguro hay más lugares interesantes a los cuales entrar. -Todos apartamos la vista de la taberna y seguimos con nuestro recorrido.

-Empiezo a cansarme, Mudz. Deberíamos parar -digo

-Sólo llevamos 2 horas caminando, Noodz.

-¿Noodz? -ríe Neil

-Cállate. -lo mira de reojo.

-Murdoc... -Gimoteo

-Está bien, cariñ--- Chiyoko. -se corrige y se asegura de que nadie lo haya escuchado. ¿Por qué no me llamó así? ¿Acaso sus sentimientos respecto a mí están cambiando y ya no me quiere?.- Buscaremos algún lugar. 

Me alejo de él y vuelvo a caminar junto a Thomas, Lenna se ha unido a Murdoc y a los chicos. Lo sabía, se está hartando de mí, no le agrado... tal vez sólo me quiere para sexo. Ya no me quiere...

-¿Estás cansado, Thomas? -pregunto para olvidarme de lo anterior 

-No, la verdad no. He caminado mucho más con Lenna y Alex.

-¿En serio?

-Sí, cuando ella busca ropa en el centro comercial y la acompañamos nos hace caminar durante horas -dice y suelto una carcajada 

-Yo... casi nunca salgo. Mi mejor amigo es Stuart... y... no caminabamos mucho. Éramos más de nadar en una piscina o manejar bicicleta... Él siempre traía flores a casa o a veces algún libro para leerlo juntos. También veíamos películas... y me dejaba pintarle las uñas cuando estaba aburrida o quería practicar. Recuerdo cuando viajamos a Japón para visitar a mi madre en el cementerio... y él... prometió no dejarme jamás. Prometió que siempre estaría a mi lado y me ayudaría en lo que fuera. Prometió ser mi mejor amigo para siempre... pero... -no puedo terminar la oración y subo ambas manos a mi rostro. Estoy llorando. Estoy llorando de nuevo.  Pero esta vez es peor... no puedo paraer de hacerlo.

-¿Qué le sucedió?

-Está en coma, los doctores dudan que despierte algún día -digo y ahogo un sollozo

-Carajo -se acerca y me abraza- Tranquila, todo estará bien -me sonríe

-Gracias, Tommo...

Sé que todo estará bien.

Porque...

Stuart nunca ha roto una promesa.