Me atrapaste [[Noodoc]] ©

Capítulo 47

Murdoc estaciona el coche fuera de la discoteca, la música se escucha fuerte.

-Escucha, Chiyoko, yo sabré guiarte si te confundes en algunos pasos, ¿bien? Sabemos que no eres una muy buena bailarina y yo sí, así que... -bromea

-Jah, calla, tonto. -río- ¿Estás nervioso?

-Satán, claro que no. -masculla- No vamos a un concurso de baile, cariño. Solo vamos a bailar música disco... cosa que ensayamos en casa muchas veces para impresionar a muchos estúpidos que se creen que saben bailar y dan pena al momento de hacerlo.

-Bueno, bueno -le doy un puño en el brazo- ¿Entramos ya?

-Entremos. -Murdoc sale primero del auto y se apresura a abrirme la puerta y darme la mano al bajar. Caminamos hacia la discoteca y la pista de baile está casi vacía, aunque hay varias personas al rededor bailando y hablando entre ellos.

Nos sentamos en una mesa para 2 y Murdoc ordena un par de bebidas. Al llegar, las bebemos apresuradamente pues ambos tenemos muchas ganas de bailar.

Hace unas semanas Murdoc me ofreció ser su compañera de baile, vaya... Le pregunté a qué se debía esa desición de bailar de repente y respondió "No lo sé... solo se me antojó" y desde ese día hemos practicado y pasos de baile de música disco con canciones de Bee Gees y realmente creo que somos unos muy buenos bailarines. Al principio torpes, pero con los días mejorábamos y ahora lo hacemos muy bien. 

Mi atuendo de hoy consiste en un vestido rosa empolvado y unos tacones del mismo color, no muy altos. Traigo puestos unos pendientes que compré junto a Stuart el otro día. Son flores rosas muy lindas. Murdoc tiene un terno blanco con una camisa celeste que le queda excelente.

Nos alejamos de la mesa en dirección a la pista de baile y empezamos a bailar al escuchar una canción a pedido de Murdoc. La gente se nos queda mirando y en seguida empiezan los aplausos y comienzan a bailar a nuestro alrededor. Veo que la cara de Murdoc se torna molesta

-Esto no se supone que debía pasar, Chiyoko. Ellos deberían solo mirar, fotografiarnos y aplaudirnos. 

-Cariño, calma -río mientras seguimos bailando 

-Creo... que ya estoy cansado. ¿Te parece si nos sentamos?

-Está bien -suspiro y nos dirigimos nuevamente a la mesa en la que nos habíamos sentado

Murdoc se levanta a saludar a un conocido que encontró y se quedan hablando un par de minutos no muy lejos de nuestra mesa. Vuelvo mi vista hacia la pista de baile, la gente sigue bailando en ella. Bueno... podría decirse de alguna u otra manera que pusimos la fiesta. 

Mi acompañante de acerca de nuevo a nuestra mesa

-¿Qué tal con tu amigo, cariño? -pregunto

-Bien, bien. Él me vendió unas cosas que quiero compartir contigo -sonríe con malicia

-Mmm... ¿Qué cosas?

-Unas cosas que luego ya verás

Luego de un par de horas agradables en la discoteca, Murdoc decide que ya es momento de irnos

-Mudz, ¿puedes llevarme a casa?

-... Ahí nos dirigimos, querida. -responde sarcástico

-M-me refiero... a la mía

-Mmm, ¿Estás segura?

-¿Por qué no lo estaría? 

-Mmm, no lo sé... creí que tendríamos sexo esta n---

-Murdoc, cariño... Sólo quiero ver a los chicos hoy, ¿está bien? ¡Ayer lo hicimos, no exageres!

-Está bien, está bien... No me grites -pone los ojos en blanco

Al llegar me despido de él con un beso en los labios y un agrio "Te quiero". Toco la puerta de casa y me recibe quien no espero

-¡Stuart! 

-Noodle -sonríe y me propina un abrazo- Te extrañé

-Stu, nos vimos hace 4 días -río

-Eso es... mucho tiempo, ¿no es así? -sonríe tiernamente

-Creo que sí -le devuelvo la sonrisa y beso su mejilla

Entro a casa.