Capítulo 9

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-Entonces... ¿Eres de China?

-No, soy de Japón, Osaka. 

-Ah.

-¿y tú?

-Oh, mira. Ahí vienen nuestros tragos. -ignora mi pregunta. El mesero pone sobre la mesa nuestros vasos de Vodka Nuvo con agua. Doy un sorbo y pongo una mueca de asco

-Ugh, esto es horrible. 

-Una vez que lo tomas seguido te acostumbras al sabor. 

-¿Tomas esto seguido?

-Eh... Mira, que buena música. -Dice y pongo una mueca.

-¿Quieres bailar? ¿Bailar conmigo? -sonrío

-No, no quiero bailar. -suelta.

Doy otro sorbo al Vodka y doy una arcada, otro sorbo y otro sorbo. La música suena cada vez más fuerte. Es agradable, el ambiente es movido y la gente está en la pista de baile. Comienzo a marearme, mi visión es lenta. Miro de un lado a otro para intentar regularla pero no funciona.

-Ese... trago es muy fuerte 

-Para mí no, necesitas como 10 de estos para emborracharme -sonríe moviendo la bebida 

-Esto... es.... esto es... Dios mío, debo dejar de beber. -Me levanto de la mesa 

-Oye, ¿Estás bien? 

-Debo ir al baño. -camino hacia los servicios higiénicos y me mojo la cara. No puedo verme bien, no sé si mi maquillaje está bien o mal, no sé si me veo bien o mal. Hago mis necesidades y salgo. 

Un chico me mira de arriba abajo y habla

-Hey, ¿Que tal? ¿Haz venido sola? Soy Jace.

-¡¡Hola!! Soy Noodle. Vine con... un amigo. 

-Yo vine con una amiga y se me perdió. -Sonrío y suelto una carcajada. Su cabello es castaño y él muy pálido. Ojos celestes.

-Vaya, deberías buscarla. 

-Deberías darme tu número de móvil para hablar algún día.

-Excelente jugada -entrecierro mis ojos con una sonrisa y apunto mi número de móvil en una servilleta. Se lo entrego.

-Genial, linda. ¿Y qué tal? ¿Quieres que te invite algo?

-No, ella no quiere nada. Está conmigo y nos estamos divirtiendo, será para la próxima amigo. -Murdoc aparece y me lleva de nuevo a la mesa.

-Hice un amigo, Murdoc. Se llama--

-No me importa, ¿Sabes que tipo de gente viene a estas discotecas? Pudo violarte.

-No seas exagerado.

-¡No soy exagerado! 

-No me grites -mis ojos se llenan de lágrimas y comienzo a llorar. ¡él me gritó!

-Oye, no... No llores, no llores

-¡No me toques, me gritaste!

-¡Shhhh! ¡Shhhhhhh!

-¡No me--- tapa mi boca con su mano y le sonríe nerviosamente a la gente que nos mira extraño. Quito su mano y me cruzo de brazos

-Aprendí la lección, no te daré más alcohol. 

-Me largo de aquí. -tomo mi cartera decidida a irme pero me detuvo su mano en mi hombro

-No, no. ¿Q-quieres bailar? 

-¡Sí! -sonrío y camino hacia la pista de baile tomando su mano.- Me gusta bailar, ¿A tí te gusta bailar? A mi me encanta bailar. También le gusta leer y bailar y salir con mis amigos. ¿Ya mencioné que me gusta bailar?

Pone una mano en mi cintura y la otra en mi mano, yo coloco la mía en su hombro y la otra en su mano también. Nos movemos de lado a lado, apoyo mi cabeza en su pecho y suspiro.

-Esta canción es aburrida. No quiero bailar esto.

-No podemos sentarnos ahora, haríamos el ridículo.

-Tienes razón -seguimos bailando, su perfume huele riquísimo. Siento que su mano comienza a bajar lentamente hasta llegar a mis glúteos.

-Murdoc...

-¿Sí?

-¡Quita tu mano de ahí! Pervertido. -lo miró con el ceño fruncido y él me sonríe.

-Iré a prisión.

-¿De qué hablas?

-Estoy bailando con una menor.

-¿Menor? ¡Tengo 19! -cada vez todo está más borroso y yo más mareada.

-¿En serio? ¿Estás hablando en serio?

-Sí, tonto.

-Pues... Entonces está bien, supongo.

-¿Y tú?

-26.

-Wow... Eres 7 años mayor que yo.

-Que lista -sonríe de lado. Cambian de canción a una más movida y toda la gente que estaba sentada antes sale a bailar. Es una canción pop. Suelto a Murdoc y comienzo a bailar, él me sigue. Muevo mis caderas al ritmo de la música, agitó mis brazos. Me pego a él y bailó muy cerca.

La vergüenza se fue rápidamente y ahora tengo más energías que nunca. ¿Es por el alcohol? No me importa. Sea lo que sea es genial.

-¿Murdoc?

-¿Russ?

-¡Hermano! ¿Qué haces aquí? -Oigo una conversación pero no me detengo.

-Ya sabes, sólo me distraigo un rato.

-¿Estás con ella?

-Oh, sí.

-Baila muy bien -el extraño ríe. La canción termina y todos aplauden. Volteó a ver con quién habla Murdoc.- Hola, princesa.

-Hola -sonrió agitada

-Chiyoko, Russel. Russel, Chiyoko. -me presenta Murdoc y le doy un codazo

-Mucho gusto, Chiy--

-Noodle, por favor, llámame Noodle. -le doy la mano- El gusto es mío, Russel.

El bonachón me sonríe.

-Bueno, viejo, los dejo solos. Nos vemos luego, Noodle.

-¡Hasta luego! -agito mi mano- Me cae bien tu amigo

-Russ es el tipo de amigo que todos quieren pero pocos tienen la suerte de tener.

-Lo haré mi amigo. -digo y él ríe.

-Quiero otro trago y no acepto un no por respuesta.

-Lo que quieras, querida.

Me atrapaste [[Noodoc]]	©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora