Estamos en un restaurant que está adornado con cosas gays y banderas se arcoíris. Hay en un cuadro un... pene de plástico de color morado.
-Bien... esto es extraño -dice Murdoc y enciende un cigarrillo pero inmediatamente se le acerca un chico
-No puedes fumar aquí, mi amor. -le quita el cigarrillo y le guiña un ojo. Murdoc se queda con los ojos bastante abiertos y mirándo al piso con una mueca de asombro.
-¿Que van a ordenar, guapos?
-Pues... yo quiero un filete jugoso y una limonada. -se adelanta Lenna
-Eh... yo lo mismo que ella -dice Neil
-Si, eh... igual. -Alex.
-Yo quiero... hm... un estofado. -masculla Thomas
-Yo un souffle de brócoli. -sonrío
-Lo mismo que ella. -Murdoc cierra la carta y el hombre se va.
-Tienes 19, ¿No? -me pregunta Thomas
-Así es, ¿Tú?-22.
-Todos aquí son mayores que yo -río. Miro de reojo a Murdoc, quien me mira con bastante seriedad. Lo ignoro y sigo hablanso con Thomas- ¿A qué te dedicas?
-Estoy estudiando contabilidad.
-Oh, vaya. Eso debe ser muy interesante
-Sí, no... Bueno, es lindo pero a veces cansa. Debo estudiar para las prácticas todo el día y eso es agotador
-Sí, me imagino. -suspiro
Luego de unos minutos de charla nuestra comida llega. Todos empezamos a comer, no en silencio, todos hablan con todos, pero Murdoc no me ha dirigido la palabra en todo el almuerzo.
-Yo pagaré todo con la condición de que ustedes me paguen las cervezas en la noche. -dice Neil
-Hecho. -hablan todos al unísono.
El castaño paga la cuenta y salimos del restaurante.
-No se ustedes pero yo estoy cansado y quiero regresar a casa. -Habla Alex
-Sí, yo igual -digo
-Regresemos, me duelen los pies -Lenna hace una mueca.
Paramos un taxi y subimos todos, en 20 minutos llegamos a casa y entramos a nuestras respectivas habitaciones. Me quito los zapatos y la camiseta. Cuando estoy apunto se ponerme una más comoda siento unos dedos recorrer mi hombro, un escalofrío pasa por todo mi cuerpo. Baja hasta llegar a mi mano y entrelaza nuestros dedos. Quita el cabello de mi nuca y la besa, luego pasa a mi cuello. Cierro los ojos y suelto un suspiro entrecortado. Su mano sube hasta mi mi vientre y luego hasta mis senos. Aplasta uno y ahogo un gemido
-M-Murdoc...
-Shhh, debes ser silenciosa, Noodle -susurra y besa mi mejilla.
-Murdoc, yo--
-Silencio. Todo está bien -besa mis labios y correspondo. Comienza a jugar con mi pezón bajo mi brazzier masajeandolo suavemente. Me separo de sus labios y suelto un pequeño grito- Thomas, ¿Eh?
-Solo hablábamos...
-No me gusta que hables con él.
-Es sólo un amigo...
-Lo sé, y espero que no pase de eso -Se pone en frente de mí y me quita el sujetador, besa mis senos. Jadeo aceleradamente y enredo mis dedos en su cabello.
-Lo prometo -susurro
Vuelve a besar mi boca, esta vez con más deseo y lujuria, subo mis manos a sus mejillas y caminamos hacia la cama, nos recostamos en ella, él está sobre mi. Pasa su mano por mi zona íntima y arqueo la espalda
-Ah, nhg~
Él sonríe y sigue besándome, baja sua labios hasta llegar a mi zona ya húmeda. ¿Que va a hacer?
-Murdoc, ¿Qué-- ¡Ah!
Empieza a succionar y a lamer mi vagina, se siente bien... esa sensación placentera que vuelve, la misma que apareció cuando lo hicimos ayer y la primera vez.
-Noodle, querida, ayúdame con esto. -Dice bajándose los bóxers y dejando al descubierto su miembro erecto.
-Bien, ¿Qué hago? -pregunto con la respiración acelerada
-Lo mismo de ayer, honey.
Tomo su pene con ambas manos y lo lamo con lentitud
-Ah, mierda... -suspira y tira su cabeza hacia atrás
Vuelvo a lamerlo y luego me lo introduzco en la boca, subo y bajo mientras mi mano hace lo mismo.
-Lo haces muy bien -noto como sonríe
Sigo con lo mío, no sabe mal, digo... no es que sepa delicioso pero no está mal. Es la segunda vez que hago esto. Luego de unos minutos me lo saco de la boca. Me recuesta de nuevo en la cama.-Bien, cariño, escucha: Debes ser silenciosa, ¿De acuerdo?
Asiento con la cabeza mordiendome el labio inferior.
Comienza a entrar en mí despacio, tiro de las sábanas de la cama con fuerza.
Se mueve con lentitud por unos cuantos segundos y poco a poco va acelerando. Rodeo su espalda con mis piernas y hago que se hunda en mí aún más.
-Hmmm -gimo.
Murdoc sale de mí repentinamente y me dice que me de la vuelta. Mis rodillas están apolladas en la cama al igual que mis manos, siento como vuelve a entrar en mi y esta vez va más rápido. Mucho más rápido...
Siento que estoy llegando a mi punto, la sencación amenaza con volver y lo hace, hundo mi rostro en la almohada y suelto un gemido. El orgasmo llega, lento y perfecto, y Murdoc se da cuenta de ello. Poco después él sale de mí y suelta un gruñido. Cuando volteo, veo que ha venido él también. Me recuesto en la cama y él a mi lado.
-Te amo tanto, mi amor. Tanto, tanto mi amor... -dice besando mis labios con ternura. Siento mariposas en el estómago al oír eso.
-Y yo a tí -susurro
Apoya su cabeza sobre mi pecho y acaricio su cabello y su nuca. Siento su acelerada respiración que poco a poco se calma hasta estar normal. Coloco ambas manos en sus mejillas y deposito muchos besos en su rostro.
-Nunca me dejes, Murdoc...
-No lo haré.
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Me atrapaste [[Noodoc]] ©
Fiksi Penggemar-¿M-mi número de teléfono? -pregunté. Creí que me odiaba.- ah... Yo... ¡Me necesitan en la cocina, que tenga un buen día! -dije y salí corriendo de ahí