Jeon observaba el cielo gris desde la reposera en donde se encontraba sentado.
Su mirada se encontraba neutra, reflexionando acerca de lo cruel que era la vida y lo distorsionado que estaba el mundo como también lo distorsionada y retorcida que estaba su cabeza.
Jeon ya estaba muerto y no renacería,Eso pensaba él.
El cielo cada vez se iba haciendo más gris y apagado, pues la noche venía llegando y al parecer no llegaría sola, la lluvia vendría con ella.
Un ligero viento fresco hizo que sus hilos negros danzaran levemente, haciendo que por una vez en tantas semanas se sintiera tranquilo. Incursionándose más profundo en su cabeza, recordó unos cabellos rojos como la sangre y una sonrisa llena de bondad e inocencia.
Sonrió al recordarlo, a pesar de saber que JungKook era un asesino, este lo ayudó sin pedir nada a cambio, y eso hizo florecer en JungKook un sentimiento cálido envuelto con unas llamas abrazadoras.— ¿Qué será de ti pequeño saltamontes? — nuevamente volvió a sonreír como tonto.
Sin darse cuenta, la noche había llegado y con ella pequeñas gotas comenzaron a caer.
— JungKook, será mejor que entres o te vas a enfermar — habló la nana del conejo.
Este solo asintió para luego levantarse de su reposera y juntar las botellas de cerveza que había tomado.
Sin decir nada, subió las escaleras para dirigirse a su habitación en donde se dejo caer y comenzó a reflexionar nuevamente.
— Necesito sexo... — habló para él mismo, pero sinceramente tenía ganas de quedarse en casa, más las ganas de tener sexo podían más.
A su mente llegó nuevamente el pelirrojo, debajo de él gimiendo y pidiendo por más, gritando y arañándole la espalda al conejo, y estos dos llegando al orgasmo juntos, TaeHyung corriéndose en su abdomen y JungKook corriéndose dentro del pelirrojo.
— Maldición — maldijo por lo bajo al darse cuenta de que ya se encontraba con una erección encima.
Nunca había sentido atracción por ningún hombre, sin embargo llegaba el pelirrojo y le hacia dudar de aquello.
Estaba totalmente seguro de ser heterosexual, estaba cien por ciento seguro pero si era así ¿Por qué estaba dudando?
Sin duda la abstinencia le estaba afectando.Tocó su miembro levemente y se quejó al sentir dolor. Definitivamente el conejo cargaba una imponente erección y no debía dejarla así.
Se levantó frustrado de la cama para luego buscar una gabardina negra, pantalones ajustados negros, convers rojas y una camisa blanca. Una vez listo se miró en el espejo y noto que su erección era más que visible al llevar aquéllos pantalones ajustados, suerte que llevaría una gabardina o sino cualquiera que lo viera, lo trataría de pervertido.
Bajó las escaleras despidiéndose de su nana con un beso en la frente para luego dirigirse a la cochera, en donde un lujoso automóvil lo esperaba.
Pasado los minutos conduciendo, el conejo se detuvo en una calle, buscó algo en el asiento del copiloto y suspiró desganado al darse cuenta que había olvidado el paraguas.
Salió del auto sin importarle nada y corrió para buscar un lugar en donde refugiarse de la lluvia.
Al doblar en la esquina, chocó fuertemente con alguien y este soltó un gemido de dolor al sentir un fuerte golpe directo a sus testículos.— ¡Lo siento mucho señor!
¿Señor? Ni que fuera tan viejo.
Una joven con una capucha puesta se levantó de encima del pelinegro con la intención de ayudarlo.
— Maldición... ¡Ah! — gritó al sentir el dolor intensificarse más.
Se llevo las manos a la zona afectada mientras no paraba de revolcarse en el mojado piso.— Lo siento mucho es que llevaba prisa y... ¡Dios mío su mano esta sangrando! — la joven nuevamente se tiró en el piso para ver la mano del pelinegro.
— ¡Ay, Dios que torpe soy!JungKook rápidamente sacó su mano herida, pues la joven no la había causado, esa herida la obtuvo al pelear con un policía el día el rescate.
Con dificultad se levantó y se frustró al saber que la joven lo seguía con la mirada.
— ¿Qué? ¿Qué me ves? — contestó cortante.
— Déjeme ayudarle por favor, mi casa queda cerca.
— ¿Me ves cara de vagabundo? Porque desde ya te aviso que no lo soy.
La joven bufó molesta, al parecer era uno de esos jóvenes idiotas, sin embargo debía ayudarlo con la herida de su mano, pues no paraba de sangrar.
Sin permiso tomó la mano contraria del pelinegro y comenzó a llevarlo hasta su casa, este último se sorprendió de sí mismo al no haber puesto queja alguna por ser llevado por una desconocida.
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♣ 𝕯𝖊𝖕𝖗𝖊𝖉𝖆𝖉𝖔𝖗𝖊𝖘 𝕳𝖚𝖒𝖆𝖓𝖔𝖘♦(전정국) TERMINADA | BOOK 1
Hayran KurguBienvenidos a un mundo lleno de enigmas, un callejón oscuro; el universo de los asesinos. la revolυcιón nace y loѕ reвeldeѕ ѕe revelan. > ⚠ Contenido explícito. ⚠ Lenguaje vulgar. ⚠ Violencia. ⚠ Escenas sexuales. ┌──────── ☢️────────┐ ...