Mi Loca Mente Y Yo

Cap. 6: Rutina

Si hay algo que odio es... La puta rutina.

Lista resumen de mi semana:

1. Es lunes...

— Y tu cuerpo lo sabe ;) —añade Jack.

— Deja que Elisse termine su lista, debemos tenerla lista para mañana.

— Si... Pero, ¿a quién le importa? Ya tengo sueño, vamos a dormir —bosteza.

— Si, Jack, por primera vez en poco tiempo, tengo que darte la razón.

— ¿Te das cuenta? La pobre chica ya está hablando tonterías.

— ¡Olvídalo! —les recrimina Erik— prosigue Elisse.

— Oj, esta bien —suspira pesadamente Elisse.

Elisse se vuelve a concentrar en lo que está haciendo.

1. Es lunes, tengo levantarme temprano, desayunar e ir a la universidad. Llevo mi TAREA (ya que casi siempre se me olvida :'v) y se la entrego al profesor. Termina la clase, puedo respirar y... Llega la hora feliz :)

— ¡Comidaaa! —emocionada— creí que moriría de hambre 😂

— No seas exagerada Elisse, solo han pasado dos horas de la última vez que comiste. Y tú sí que comes —la mira admirado.

— ¿Y eso qué? Calla y abre el taper, esto no se calentara solo querido.

Ambos van hasta el microondas y ven como su recipiente da vueltas hasta que se termina el tiempo y chilla del aparato un ruidoso: Ti, ti, ti.

— ¿Qué dices si nos sentamos dónde nadie nos vea? —le dice ella tranquilamente mientras recoge su taper con su almuerzo, que evidentemente (por ser lunes) es lentejas verdes.

— Lisse —la mira con cara de impacto y fingida ingrata sorpresa— ¿Me estás haciendo una propuesta indecente?

Elisse capta rápidamente lo que le dice su amigo y lo mira con picardía.

— Si comer lentejas a solas, es lo más indecente que te puedes imaginar, pues si. Es toda una propuesta indecente —se le acerca mucho y luego ríe.

— Y yo que me la estaba creyendo —murmura mientras ve a Elisse adelantarse— ¡Lisse! ¡Espérame! —recoge su comida, que es igual a la de ella.

La ve correr jugueteando. Y cuando la alcanza, la toma de la cintura y la levanta a penas unos centímetros, haciendo que ella ría aún más.

— ¡No, suéltame! Yo sé que es lo que quieres, ¡quieres chorearte mi comida! ¡No lo permitiré!

— Pero de qué hablas si yo comeré lo mismo que tú, tonta —😒. Luego ríe.

— Ah ya, así estamos —le pega fuerte en el pecho y se va.

— Lisee, espera. Hay algo muy importante que quiero decirte.

Por la seriedad de la voz de Eban, Elisse se detiene y lo mira duditativa. Él se le acerca y ella lo mira a los ojos.

— Lisse...

— Si... —anhelante.

— Escondamonos, de la multitud, del absurdo vida mía —toma su rostro.

Ella lo mira totalmente confundida.

Y mientras tanto por la cabeza de Elisse...

— ¡¿Qué tamales fue eso?! —se desespera Erik— ¡¡¿¿acaso se nos acaba de confesar??!! ¿¿Qué es lo que quiso decir?? —Mira a su costado— este es el peor momento para que te quedes callado Jack. ¡Di algo maldita sea!