Mi Loca Mente Y Yo

Cap. 45: Como si todo fuera un sueño

Hola a todos, aquí se reporta su servidora Azulari jejeje. Como podrán notar, está capítulo es especial y por ello me tomé bastante tiempo para escribirlo (en serio, me arden los ojos de tanto estar en la computadora 😅). Espero les guste. Lo iba a poner en tres partes, debido a lo extenso y explicativo que es, pero se iba a alargar demasiado, así que decidí hacerlo en dos. Esta es la primera parte. Gracias por el apoyo ❤️😊✌️

Elisse ahora está en una cama de hospital, al lado de Israel. Ambos están graves. Los doctores no logran explicarse que fue lo que sucedió. Primero con él, que apareció desconectado y al borde la muerte; unos minutos más hubieran bastado para que sea demasiado tarde. Y luego la misteriosa chica que entro como una demente, gritando y golpeando a los guardias, hasta que al final se desmayo quedando en estado crítico.

- En toda mi carrera… Juro que nunca había visto a una persona hacer algo como eso. ¿Cómo logro esa chica quedar en un profundo coma? ¿Qué fue lo que le pasó? Esto debe ser estudiado a profundidad. Tal vez tenga un coágulo en el cerebro o…

- Doctor –una enfermera interrumpe la conversación del médico con otro colega suyo- hemos dejado en observación a la paciente. Es una joven de 18 años. Su nombre es Elisse Segovia. Por lo que me dijo un familiar cercano, ha tenido problemas de salud, pero nunca algo como esto. He buscado en su historial médico y logre tener acceso algunos antecedentes. Pero por su circunstancia, el coordinador ha sugerido que la traslademos al hospital que le corresponde, porque aparentemente tiene seguro allí y… No creo que pueda cubrir los gastos de aquí.

El doctor mira a la muchacha ahora con frialdad y finalmente responde:

- Bien, entonces tendremos que prepararla. Pero no va a ser nada fácil… No sabemos que le podría pasar si también la desconectamos.

Mientras tanto, dentro de la cabeza de Elisse…

Ella está en una especie de sueño profundo, del cual despierta con lentitud… En una especie de jardín lleno de azucenas amarillas e iris azules. Ella mira a su alrededor y descubre en un punto no tan lejano, un árbol enorme. Sentado bajo su sombra, contemplando el apacible paisaje, esta él.

- Israel –ella se incorpora de inmediato y empieza a correr hacia su dirección, pero en cuanto esta cerca, algo parece tomarle ambas piernas y la hace caer- ¡No! ¡Israel! Escucha mi voz, estoy aquí… Solo mírame –con sus dos manos se aferra a la tierra, luchando por no rendirse.

De pronto, siente que algo ala de ella y por fin repara en dos grilletes con extensas cadenas que la van arrastrando lejos de su amado. Ella se esfuerza en tratar de quitárselos, romperlos o hacer que dejen de lastimarla, pero cuanto más lo intenta, estos parecen hacerse más fuertes y toman un color diferente cada uno. Uno azul y el otro amarillo, al igual que las flores.

- Pero ¿Qué? –dejando de intentar quitárselos porque siente que ya no la jalan más- ¿Qué es esto?

En ese momento, del lado izquierdo aparece un halo de luz amarilla, se hace presente la figura de Jack, peinado y vestido de forma antigua. Luego, del lado derecho sale Erik, acompañado de otro halo, pero esta vez de color azul; él la observa con una sonrisa nostálgica en el rostro, mientras Elisse nota que viste prácticamente igual que Jack.

- Hola Adena –le saludan los dos parándose justo frente a ella.

Cuando Elisse los vuelve a mirar, se da cuenta de que cada uno tiene encadenado un tobillo y estas cadenas terminan donde empiezan las suyas. Piensa en como ambos la llamaron y alza la vista asustada, para verlos nuevamente.

- Yo soy Elisse… ¿Por qué me han llamado… Adena?

- Porque ese también fue tu nombre –le dice Erik.