Etapa crónica

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Tengo una semana que llegué, papá no se despega de mi lado y ni hablar de Sam, justo ahora no ha parado de hablas por 20 minutos, sin parar, si, lo digo en serio, sin parar.

-Estaba tan preocupado por tí que no vi ni un dorama en todo un mes!! Puedes creer tal cosa!? Pppffff por tu culpa me perdí de esas ardientes coreanas.- Samy y su obsesión con las coreanas.

-Podemos ver un dorama juntos! Es más por tí repetiría otra vez "uncontrollably fond" nahhh no por tí, es que quiero volver a verlo. Verás se trata de un pana que tiene cáncer, entonces le dan tres meses de vida, obviamente se va a morir osea es cáncer,  el cáncer...

Si, tiene razón, si tiene cáncer morirá. Las mejillas de Sam se tornan de un rojo intenso y no encuentra hacia donde mirar, su vista solo se fija en las baldosas del piso.

- yo...  Osea... Me...  Me refería a... Que... Aaaiisshhh- pongo una mano en su hombro para que no se preocupe, el pobre no encuentra que hacer, ha metido la pata en sus palabras, pero vamos!! Es Sam, nunca piensa lo que dice.

-Perdón, que tonto soy!- golpea su cabeza repetidas veces, lo detengo y lo golpeo yo para que deje de golpearse él, se queja pero no me devuelve el golpe.

Hoy es mi primera quimioterapia desde que regresé, volverán los vómitos, el cansancio, los desmayos repentinos, el sangrado... Depende que tan avanzado esté el cáncer me internarán o me dejaran volver a casa, te mentiría si te dijera que no tengo miedo, estoy aterrada, me había olvidado un poco del mundo del cáncer, pero esta es mi realidad ahora, siempre lo fue.

-Lista? - papá sale de la cocina, al parecer estaba cocinando algo, llega secándose las manos del pantalón.

Nós dirigimos al coche, pero solo somos papá y yo, Sam tenía un compromiso con sus padres, nós encontraremos con Matt más tarde en el hospital.

- estás asustada?- niego con la cabeza, papá debe saber que miento pero no dice nada al respecto.

-Me dijeron que hay una nueva enfermera, la anterior de retiró, estaba embarazada.

Que bueno! En algunas de mis sesiones, Dorotea, no sé si recuerdas su nombre, me contaba cuanto anhelaba poder darle un bebé a su esposo, horas y horas platicandome de todas las pruebas que se hacía y tratamientos para poder quedar encinta, hoy me alegro de que haya podido cumplir ese sueño.

No sé si Matt vendrá, espero no se tarde, las horas en la quimioterapia con Roger las aprecio pero me aburren mucho, más ahora que Matt y yo estamos saliendo... Se escucha cool... Saliendo... Estamos saliendo...  Una sonrisa boba decora mi cara, papá me mira extrañado y toca mi frente en señales de fiebre, ruedo los ojos y aparta su mano.

-Hola mi nombre es Nicolas, yo seré el que me encargaré de tu quimioterapia de ahora en adelante.

Un chico completamente guapo, musculoso, ojos verdes, pelo castaño claro con flequillo, labios rosados y quijada marcada hace presencia frente a mi. Mi vista viaja de la punta de sus pies hasta la Punta de su cabeza una y otra vez. Sus alineados dientes me regalan una sonrisa brillante que hará que de ahora en adelante me guste la quimio... Ok no, solo bromeo, no negaré que es guapo, con esa bata de doctor parece sacado de Hawaii 2.0 pero no es mas guapo que Matt, él  es alto pero Matt lo supera en estatura, los rizos de Matt me gustan más que el flequillo del enfermero y aunque el enfermero es más musculoso, la espalda de Matt es más definida.
Dejo de analizar a mi nuevo enfermero y levanto la mano en señal de saludo.

La puerta se abre, cuando Nicolas está a punto de abrir la boca teniendo que tragarse lo que sea que iba a decir, un Matt en ropa informal entra al cuarto, mirando en mi dirección sonríe automáticamante, se detiene saluda a papá y luego me saluda a mi con un gesto de alzar la mano, me esperaba un abrazo pero entiendo que actúe así ya que Roger está en la sala.

Toque De Un Alma Fugaz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora