Capítulo 19.

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— Mamá, él no sabe lo que dice —hablé rápido.

—¿Y las tantas miradas de hoy?

¡Joder! Marcos se ha pasado de la raya y en realidad estoy conteniendo las ganas de levantarme de la mesa e irme a mi cuarto, pero no lo haré.

Mi mirada fulminante hacia él no disminuye, él no deja de hacer ese tipo de comentarios en momentos inoportunos, de verdad.

—Hija ¿por qué lo miras así?

— Ya lo dije, él no puede decir cosas que no sabe.

El disgusto seguía intacto, el momento resultó tenso hasta que me dirigí a mi habitación. Me bañé y luego me apliqué una mascarilla, llevé mucho sol mientras caminaba por el parque y la cara la sentía caliente. Tardé con ella aproximadamente 15 minutos y me eché agua para quitármela.

Después de haber finalizado, me acosté para dormirme, pero un toque a la puerta me interrumpió.

Marcos.

—Antonella, ¿por qué eres malcriada? — pregunta al pasar.

—Sólo dije la verdad —hablé entre dientes.

—Y sabes perfectamente que estás consciente de que lo que dije, es cierto —dijo mientras se sentaba en la cama.

— Marcos, yo...

—¿Sucede algo con él?

— No..

— ¿Entonces? ¿Por qué esas sonrisas y suspiros que te salen de repente? — sonríe.

Negué con mi cabeza, queriendo decir algo que yo ni sé como expresarlo con palabras.

— ¿Sientes algo por él?

—No — respondí enseguida, parándome de la cintura para arriba.

— Ay hermanita — se levanta —El tiempo lo dirá.

Tras depositar un ligero beso en mi frente, salió de la habitación.

Por una parte, sus interrogantes causaron pensamientos profundos en mí, estaba tan pensativa en ese tema, que el sueño no hacía efecto.

No cabe duda de que Nelson es un chico súper amigable, sobretodo extrovertido. Francamente no pensé que precisamente yo, me hiciera tan cercana a él, un famoso. Desde que empezamos a hablar, le da un toque de alegría a mi vida por sus ocurrencias, es un chico un poco alocado.

A pesar de tener ocupaciones y no tener siempre tiempo libre, cuando hablamos, hablamos constante, la conversación fluye naturalmente y eso, para mí, es un factor esencial.. es algo que simplemente me agrada de alguien a la hora de chatear.

Debo de confesar que de vez en cuando, se le escapa su antipatía y arrogancia, pero aún así, lo sigo viendo como un chico lindo.. sus hoyuelos y sonrisa hacen una maravillosa combinación, incluyendo sus hermosos ojos.

Tanta pensadera, y finalmente me quedé dormida.

Un fuerte ruido causó que me despertara de golpe. El ruido proviene de la ventana, me asomo y es del estacionamiento (mi ventana da vista a él). Era Marcos tratando de abrir el capó del auto, al parecer le ha costado abrirlo, se nota en su semblante.

Veo la hora y justamente faltan 15 minutos para las siete de la mañana. Procedí al baño a tomar una refrescante ducha y luego arreglarme para irme al colegio; pero recuerdo lo del auto y no tengo certeza de irme con él.

Tras coger mi bolso, bajé directamente al garage.
Encuentro a Marcos tratando de abrirlo, y además.. sale humo, pero no oscuro.

—¿Qué sucede? —pregunto acercándome a él.

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