Capítulo 6.

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—Hoy hay una fiesta ¿quieren ir? —nos preguntó Abraham.

—No lo sé, no creo —me encogí de hombros.

Al parecer la fiesta es a las siete de la noche, y es lógico que ellos no se la van a perder, como todas. Me gustaría ir, al igual que las chicas; pero ya mañana es domingo y no me agrada pasar el día agotada y luego al día siguiente, ir al colegio.

A los pocos minutos vi a Fernando llegar, vestía un short playero y franela. Traía una cava ¿más hielo o más alcohol?

Él llegó saludando a todos y por último, a mí.

—Hola mi amor —lo abracé.

—Hola, chiquita —depositó un beso en mi cabeza —¿otra vez amable?

—Tonto —reí golpeando levemente su pecho.

Y sólo faltaba él para pasar un día sumamente chévere y placentero. Bebimos unos cuantos vasos y comimos chucherías hasta más no poder.

El día transcurrió algo rápido, los chicas se fueron con los chicos a final de la tarde y yo, sin perder tiempo subí para quitarme el agua de piscina. Cuando culminé y me vestí, me dirigí al cuarto de Marcos.

—¿Tú vas a la fiesta? —pregunté acercándome a la cama.

—Obvio.

—Marcos, ¿qué con la chica de la otra vez? —me senté en el borde de la cama.

—Esa chica.. ella me aburrió —dijo en suspiro.

—¿De verdad? ¿Por qué?

—No es de mi tipo, Anto.

Efectivamente, se sobreentiende. Marcos es el tipo de chico que no se toma ninguna relación en serio, sólo le gusta temporales y le encanta follar con muchas chicas sin importar el qué dirán.

Sí, así es mi querido hermano.

Ambos somos totalmente opuestos en algunos sentidos. A él, le gusta pasársela de fiesta en fiesta, probar chicas, bien sea aquí en casa o alguna otra. Le encanta que la chica que se consiga sea parecida a él, que le guste aventurar. Además, le fascina beber alcohol hasta decir basta.

Con respecto a sus estudios, a veces suele ser aplicado, así como también descuidado. Él toma la opción de dar dinero en algunas materias en ciertos casos.

Yo, soy muy diferente, soy pasiva pero a la vez, alocada y divertida. Si se me da la oportunidad de tener algo con alguien, ese "algo" me refiero a "formal" no me gusta para nada las cosas de a rato o juegos.

Nelson

Por mi carrera, me toca recibir clases particulares. Me encontraba en mi casa obteniendo lecciones de matemáticas y físicas, materias que a veces suelo ser tapado. Sin embargo, la física se me hace más fácil y no sé por qué...

—Nelson, signos iguales se suman, y signos diferentes se restan.

—A veces me confundo —dije rascando mi nuca.

—Estudia eso entonces. Tú como que vas a tener que hacer planas, caligrafías de esto.

—No no, que caligrafía nada. Yo no estoy en preescolar —reí —Signos iguales se suman y diferentes se restan, ya.

Mi profesora no pudo evitar reír. Me dejó unos cuantos ejercicios y se fue a la ventana con mi madre a hablar y tomar café, sí, ella se volvió amiga de la familia.

Cuando estaba terminando de hacer la tarea, timbraron y mi madre abrió. Nos quedamos sorprendidos al ver que era mi padre, no nos esperábamos su visita y él tampoco me avisó que vendría.

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