Conociendo(nos)

5: Preguntas.

Otro día más en el trabajo. Ya al fin me he habituado, además me llevo bien con mis compañeros de trabajo, cuya compañía ayuda a que la jornada se haga más amena. Que a pesar de que es a tiempo parcial, es mi primera vez trabajando, y no me imaginaba que esto fuera tan duro.

Ya al fin terminaba la jornada y mis compañeros y yo nos disponíamos a recoger y cerrar, cuando de repente entra un cliente. Cómo no, era Alex de nuevo, el cual lleva yendo desde que nos vimos en la discoteca, y cada vez llega más tarde. Normalmente tras comerse su hamburguesa de siempre, solemos dar largos paseos si tengo tiempo libre, y cuando no, me acompaña a casa. En el fondo ambos agradecemos tener a alguien de nuestro antiguo pueblo en una ciudad tan grande y lejana.
Y en estos días he descubierto bastantes cosas que desconocía sobre él, aunque la mayoría son anecdotas suyas con chicas con la que ha estado de lío y con el hecho de ser un licantropo; como una vez de pequeño, cuando aún no había aprendido a controlar sus instintos, conoció a una amiga nueva y como ya sabréis, los perros y los lobos se suelen saludar y conocer oliendose el trasero mutuamente, y en fin, la chica llevaba falda y... ya os podéis imaginar qué pasó después. Su madre de la vergüenza no le volvió a llevar a ese parque. También le hice miles de preguntas sobre los hombres lobo y vampiros. Como por qué se odian, y básicamente por qué existen. Éste asegura que el principal motivo antes era por enfrentamientos que hubieron siglos atrás, pero actualmente porque los vampiros se suelen reir de los licantropos por ser mortales, a lo que ellos suelen responder que al menos ellos no huelen a muerto, a lo que los vampiros suelen responder que es mentira ya que eso sólo pasa si estás en descomposición, y que al menos ellos no huelen a perro mojado cuando llueve, a lo que los hombres lobos contestarán diciendo que si no se transforman no huelen a eso, y en fin, es la guerra de nunca acabar. También me confesó que los licantropos que viven en la civilización, no tienen permitido transformarse por motivos obvios, que es además algo complicado y su sueño es transformarse algún día. También afirma que no sólo hay hombres lobo y vampiros, de hecho, aunque los seres humanos normales y corrientes predominan, hay un poco de todo, y que espera encontrar algún día a su 'cat woman', hasta me dijo que los reptilianos puede que sean reales, e incluso los iluminatis, lo cual espero que lo dijera en broma. Sobre el origen de estas especies tan particulares, aseguró que no lo saben ni ellos. Hay teorías sobre que en una isla hicieron fuertes y múltiples experimentos con personas y animales, y de ahí salieron. Otras teorías afirman que al igual que los seres humanos evolucionaron del mono según la ciencia, otros seres vivos pudieron evolucionar de manera diferente etc...
También descubrí que escucha todo tipo de música, al igual que yo, pero que últimamente escucha sobre todo rock, rap y trap. Estuvo durmiendo con peluches hasta los diez años. Su primer beso fue a los cinco años con una amiga, o más bien su 'esposa', mientras jugaban a papás y mamás, ya era un don Juan hasta a esa edad... Se rompió el brazo tres veces ya que estaba obsesionado con hacer actividades extremas con su bicicleta cuando tan sólo tenía ocho años. La tercera rotura fue a los catorce ya con la moto, cuando se la compraron y continuó con esa extraña obsesión por arriesgarse a perder la vida en cualquier momento.

Éste insistió en que sirviera expresamente yo la hamburguesa, rechazando tajantemente a mi compañero, y cuando terminó, en nuestra rutinaria vuelta por la ciudad no pude evitar preguntarle algo que siempre había querido decirle.

—Oye... por qué yo.

Sus gestos mostraron lo confuso que le dejó aquella pregunta.

—¿Que por qué tú tampoco te resistes a mis encantos? No lo sé, es un misterio de la vida, soy sobrenatural ya tu sabe —trata de poner una especie acento cubano y mirada seductora—

—Tonto— le doy una pequeña colleja mientras me aguanto la risa— me refiero a por qué siempre tuviste tanto interés en pasar tiempo conmigo, cuando ni si quiera me conocías.

—ríe mientras mira al suelo— ¿Y por qué me preguntas esto tres años después?

—Mejor tarde que nunca ¿No?

—Supongo —sonríe— pues a ver, tu ex me habló mucho de ti, y sólo por el hecho de haberte confesado que es mitad lobo, demuestra que eres en parte especial, o quizá que aún era un crío y simplemente confió en su primer amor.

—Ya veo... a pesar de lo diferentes que sois, siempre fuisteis muy amigos, ¿verdad?

—Buenos, amigos y primos, los primos por regla general se suelen llevar bien. —sonríe—

—Alex, no me mientras, no sois realmente primos.

—¿Y por qué no? —frunce el ceño—

—Antes me lo podía creer, pero ya no cuela. Por lo que he podido ver desde que te conocí, a pesar de que se supone que ambos nacisteis en Francia y vivisteis vuestros primeros años allí, no tienes ni idea de francés, en cambio Javier hasta me hizo una vez un poema en ese precioso idioma. Además nunca me has dicho tus apellidos, de hecho sólo lo deben saber tus compañeros de clase.
No sé si eres de mi misma nacionalidad, pero no me mientas más por favor.

Éste se queda callado unos segundos mirando hacia el suelo hasta que me mira sonriente.

—Chica lista— sonríe y me mira fijamente— nuestras familias eran las únicas 'diferentes' de ese pueblo, así que desde que se conocieron nuestros padres, nos hemos llevado todos siempre muy bien, sobre todo Javier y yo, que nos llevábamos tan bien que decidimos llamarnos primos. De hecho mi padre aún mantiene mucho contacto con ellos.
Y bueno, puedo ser checoslovaco, británico, griego, noruego, polaco, un macho ibérico o incluso filipino, quién sabe baby —me guiña el ojo—

—Uffff está difícil, pero me atrevería a decir que eres filipino —digo apartando por completo mi seriedad de hace unos segundos—

—¡Bingo!

—Venga dime algo en tagalo entonces.

—¿Qué me dice usté?

—Venga ya, todo filipino debería saber que el tagalo es su idioma —digo cruzada de brazos, con mirada desafiante—

—Estaba de broma obvio.

—Venga, habla entonces.

—Mmmmm mira, ¿no es ese batman? —dice señalando a lo alto de un adificio fingiendo sorpresa—

—Yo sólo veo un gato lamiendose la pata, y todos sabemos que es mejor super man —le miro desafiante—

—Aurora me decepcionas —se cruza de brazos—

Y ambos rompemos a reír. Tras unos segundos de silencio, me decido a romperlo tras recordar algo.

—Por cierto... ¿Sólo tu padre?

—Sólo mi padre... ¿Qué? —Me mira extrañado tras ese cambio de conversación—

—Antes me dijiste que tu padre aún mantiene contacto con la familia de Javier, pero no dijiste nada de tu madre.

—Ya... —se queda en silencio unos segundos— mi madre ya no está.

—¿Se han divorciado...? —pregunto con inocencia.

—Murió hace aproximadamente un año.

Éste lo dijo con naturalidad, aunque en el fondo se le notaba profundamente dolido.

—Oh... lo siento mucho.

No supe qué más decir ni cómo reaccionar. El pobre ya de por sí había tenido una vida dura, y que después le tuviera que pasar esto... No es justo, nadie se merece una vida tan desdichada.
A pesar de ser casi verano ya, hace frío en estos momentos, a estas horas hay poca gente en la calle en la que nos encontramos, y parece que empieza a llover. Es el momento idóneo en todos los sentidos para atreverme a hacer algo que quería hacer desde que Javier me contó la dura vida de "su primo".

En ese momento sin pensarlo lo abracé con todas mis fuerzas. Éste al principio se quedó rígido, pero a los segundos me devolvió despacio el abrazo y note como lágrimas suyas caían sobre mi sudadera, mezclándose con las gotas de la lluvia, que aumentaba por segundos.