The Teacher's Son [Gay + Adultos]

55. "Charlas"

55.

"Charlas"

Pasadas las 2 de la madrugada despierto debido al intenso calor que se siente en la cama, en un principio esto me desconcierta pues ni en verano que las temperaturas son más elevadas había sentido tal bochorno, el misterio se resuelve cuando el chico acostado a mi lado se acomoda. Literalmente está encima de mí con su pierna derecha sobre las mías, su brazo derecho rodeando mi pecho, su rostro tan cerca del mío que puedo escuchar su aliento en oreja izquierda. Por fortuna no está roncando así que mis tímpanos estaban a salvo, de momento.

Una vez despierto sintiéndome atrapado e incómodo decido levantarme para despejarme un poco, por lo regular cuando me abochorno en las noches es suficiente con enfriar mi cuerpo unos cuantos minutos antes de regresar a la cama. Enderezarme resulta ser todo un reto, ya que cada vez que intento liberarme de su "abrazo" él se aferra más a mí, poniendo un esfuerzo extra de mi parte logro zafarme sin despertarlo, ¡Vaya con su sueño pesado!

Lo malo, es que he terminado por despertarme del todo así que decido pasar el rato en la sala para enfriarme un poco y tal vez volver a conciliar el sueño, así que camino por el pasillo sin prender las luces, como era de esperarse tropiezo con una mesita golpeándome el dedo meñique del pie. Ahogando un grito con mi puño voy dando saltitos hasta dejarme caer sobre el sillón, mi mala destreza hace que en lugar de dicho mueble lo haga en otra mesita que estaba junto, provocando que esta se volteara al suelo junto con los objetos que había en ella, las buenas noticias es que al estar alfombrado el piso no hicieron un escándalo. Como puedo me siento en el sofá hasta que el dolor amilana. Ahora más despierto que antes me pongo a recoger el tiradero que he provocado.

Mientras lo hago no puedo evitar recordar otro desastre nocturno en el que he participado. Sonrío al pensar en cuanto han cambiado las cosas desde entonces y todos los errores, aciertos y aventuras que en solo unos meses han acontecido. Al levantar uno de los marcos me encuentro con tres rostros felices que me miran a través del cristal, reconozco la fotografía, fue tomada el día que me gradué de la primaria. Mis dos padres orgullosos parados detrás de un mini-mí vestido como siempre impecablemente con camisa blanca y corbata roja, solo que esta vez noto algo más, unos metros detrás de nosotros puedo distinguir el rostro travieso de un pequeño Omar muy atento a lo que hacíamos. No puedo evitar el pensar en, ¿qué hubiera pasado de haber sido amigos desde esa época? Quizá nunca hubiese sufrido tanto como lo hice y ahora seriamos solo amigos, o tal vez solo conocidos. Eso ahora ya no importa.

Un segundo marco es una historia completamente diferente, el lugar es indudablemente un parque, sobre un camino empedrado rodeado por árboles de hojas doradas una pareja camina dándole la espalda a la cámara. Él es un hombre alto con chaqueta de mezclilla azul claro, pantalones caqui y botas café oscuro, ella con unos jeans oscuros y un suéter café claro con el cabello semi recogido con una pinza. Si bien no iban abrazados o tomados de las manos era más que evidente la confianza entre ellos, un sentimiento extraño empieza a subir por mi garganta, no sé cómo explicarlo, no es molestia, ni alegría, es algo raro. Al estar de espaldas no pude identificar al sujeto, por otro lado, sería un verdadero tonto si no reconocería a mi propia madre.

Ahora que mis ojos se han acostumbrado un poco más a la oscuridad camino alrededor buscando alguna pista que me esclarezca lo he visto, doy un par de vueltas sin encontrar nada. Confuso, voy a la cocina en busca de una aspirina y un vaso con agua. "Genial, el blíster está vacío" me digo a mí mismo al no encontrar lo que busco, lo que sí hayo son unas pastillas para el insomnio, lo sé porque son las mismas que tomada de pequeño cuando mis padres se separaron y tenía pesadillas en las noches. Decido tomar una, no quiero pensar en nada de momento, con suerte para cuando despierte resulte que todo esto solo sea uno de mis sueños locos.