Narra Ecko:
Estábamos todos los pibes en la parte vip del boliche, todos estábamos sentados en los sillones de cuero negro del lugar mientras disfrutábamos de nuestras bebidas.
Miré a Seven quien venia con un vaso en su mano y se sentó a mi lado.
— Ni saben lo que acaba de pasar —dijo riendo, creo que estaba algo pasado de alcohol.
— ¿Que hiciste? —pregunto Khea mirandolo atentamente.
— Me la comí a Lola —hablo rápido mientras se reía.
— ¿A que Lola? —Pregunto Duki, cagamos acá se arma bardo.
— A la que te garchas vos —habló Seven otra vez, provocando que Duki se levantara de su lugar, lo agarró a mi amigo de la remera mientras iba levantando su mano para pegarle rápidamente.
— Para boludo —grite metiéndome para separarlos, justo llega Cro y lo saca a Mauro para atrás.
— Veo que ahora esta de moda compartir putas, ¿no? —habló Tomas— Seven le va a Lola, Ángeles cogió conmigo, creo que es genial, ¿no? —me acerqué rápido a él, empece a pegarle piñas mientras el me las devolvía como podia.
Los pibes trataban de separarnos pero seguía haciendo fuerza para seguir pegándole al boludo de Tomas.
— ¡Basta! —alguien se metió en el medio, era la voz de ella. Rápido mire para que saliera porque le íbamos a pegar, pero ya era tarde, ella estaba tirada en el piso.
— ¿Que mierda hiciste pedazo de pelotudo? —empuje a Tomas y me acerque a Ángeles quien estaba tirada en el piso, no reaccionaba. La levante con ayuda de los chicos y busque rápido la salida para llevarla al hospital.
(...)
Hace dos horas que estaba esperando sentado frente a la puerta de Urgencias, a mi lado tenia a Khea, Cazzu, y Lola.
Ya eran las cinco de la madrugada y nadie sabia nada de Ángeles. Ni siquiera salían los doctores para preguntarles por ella, estaba nervioso, y un poco asustado.
Agarre mi móvil y me puse a ver un par de mensajes que tenia sin leer.
— Chicos, yo debo irme, es tarde y en casa me van a matar —murmuró Cazzu.
—Esta bien beba, cualquier cosa yo te aviso —habló Lola.
— Yo te acompaño —agrego Khea mirando a Julieta, ella asintió. Se despidieron de nosotros y se fueron del hospital.
— ¿Porque peleaban? —pregunto Lola.
— Comentarios boludos —susurre.
— ¿Sobre? —volvió a hablar.
— Nada, el otro pelotudo dijo que estuvo con Ángeles y no me contuve la bronca que le tengo, se hace el buenito y todos sabemos que sus intensiones con ella no son nada buenas —agregue.
— ¿Aun la queres? —pregunto y asentí rápidamente.
— La quiero una banda, yo no se porque fui tan boludo en cagarla. Nunca hubiera querido que eso pasara, la re extraño, necesito que este conmigo otra vez —murmure y Lola rápidamente se acerco a mi para abrazarme.
La puerta de la sala se abrió, de allí salió un doctor, se acerco a nosotros. Me levante rápidamente para poder saber algo de mi beba.
— La paciente Bennet sufrió un golpe muy fuerte en su pómulo izquierdo, lo mejor será que pase la noche en observación por el golpe en la cabeza, veremos que pasa en lo que resta del día —hablo el medico y asentí en forma de repuesta.
— ¿podemos pasar a verla? —pregunto Lola.
— Si, solo un rato y luego dejen que ella descanse —asentimos y el medico se despidió de nosotros para volver a su trabajo.
—Paso así después ya te quedas vos —mire a Lola y ella asintió.
Entre a la sala y Ángeles estaba dormida, tenia un poco hinchado el lado izquierdo de su cara, y seguramente pronto le va a quedar una marca.
Me acerque a ella y acaricie su mano, sonreí al sentir lo suave de su piel. Deje un beso en su frente, extrañaba tenerla conmigo. Pero aunque me costara, ella va a volver a ser mía.
