Rosetta

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3 semanas después decidimos hablar el siguiente viaje, la tercera persona de nuestra lista era Rosetta, por lo que me había contado Mouque ella fue quién le compró cuando aun era un muchacho. Yo sabía quién era ella, en las subastas, se la quiere dar de exquisita, y es una pobre loca que cree que por tener una joyería y falsificar prendas auténticas tiene el mundo en sus manos, ah, se me olvida su bar de strippers, dónde también genera algo, pero no tanto como yo.

Lo peor del casó es que en realidad el dueño de lo poco que tiene ella, era de Gerardo Ruffolini, su antiguo y único esposo, ella misma lo asesinó para quedarse con todo, dicen que disecó su cuerpo y lo tiene en su despacho, no me crean, en las subastas se escuchan muchas cosas y a decir verdad no le ha ido mal, pero pobre tonta no surgió de ahí.

Mouque entra con una libreta en mano, Alcé una ceja viéndolo con misterio, era raro de él tomar una libreta.

—Anotaba unas cosas.

—¿Cómo qué cosas?

—De Rosetta, podría ayudar, ¿No crees?

—Sí Mouque, siempre ayudas tranquilo.

El pensar en esa tipa provocó que mi sangre hirviera.

—Bueno... Creo que pasé casi año y medio con ella, entre mafiosos se conocen ya sabes... Lo típico, ella me tenía como perrito faldero, al principio, pero sus maltratos aumentaron, incluyendo abusos—Mientras él hablaba sus puños los iba apretando de a poco.

—Es una perra.

—Donna...

—Lo es Mouque, sé exactamente quién es esa desgraciada, oye han habido cosas en las subasta que ella se a quedado, pero no porque no pueda pagar más que ella, si no porque tiene un maldito contacto que le deja ver todo antes que el resto por eso muchas veces ni está presente.

—Lo sé.

Él vio cabizbajo.

—Necesitamos aclarar las ventajas y las desventajas.

—¿Por qué ventajas?

—¡Fue una forma de decir!

—Oh.

—Dime, en que nos podemos aprovechar.

—Pues... Le encantan los pekinés.

—Un perro... ¿Un perro? ¿Es en serio?¡Es demasiado obvio, siempre va con esas bolas de pelos a todas partes!

—Solo estoy diciendo... No me grites.

—¡No! ¡Te grito las veces que me de la gana!

—Pues entonces callaré todos tus gritos a punta de besos, ¿¡Eh!?

Se levantó y me vio con sus ojos muy grandes, quería reír por eso, pero no era el momento así que decidí ignorar su acción.

—Ve... Sólo cuentame más.

—Anda siempre con su perro, tiene de a 4 guarda espaldas, todos como unos pilares, no se le ve en la calle, siempre está en su despacho, y es una enferma porque le gusta colocarse un armador de esos con...—Hacía movimientos raros con las manos —Ésto—Señalo su entrepierna, ésta vez no pude evitar reír—No te rías, es en serio, lo usó conmigo, y no fue ni agradable ni bonito.

Mi sonrisa desapareció con eso último, apretaba mi mandíbula como si fuera a romper mis dientes.

—Solo, ya dejemoslo así Donna, hay que buscar su ubicación y planear todo.

—Está bien...

*****

Han pasado 7 días desde que comenzamos la búsqueda del lugar exacto de Rosetta. No hemos podido dormir casi por eso. Las chicas nos han ayudado, junto con otros contactos inspeccionando todo acerca de ella y aún no damos con un lugar justo, lo que recuerda Mouque no fue de mucha ayuda, ha desaparecido y no dejo de pensar en que lugar pueda estar esa chiripa.

Mirame, voy tras de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora