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—Te pones de muy mal humor cuando estás con tu noviecita —dice Amanda alzando una ceja.

—No la culpes de que no cumplas bien con las cosas que te pido y tengas que ponerme de malas —le respondo acomodando los archivos en el ordenador.

—Lo olvidé ¿si? No volverá a ocurrir.

—Eso espero, por algo te pago —la miro y ella rueda los ojos.

Leah.

Espero a Grayson acostada en el sillón de la sala, viendo una de esas películas románticas que suelen pasar por las tardes.
Hablo con Grace un rato después de que Trina se va.
Intenta contarme la poca experiencia que tiene sobre el embarazo y dice que empieza a gustarle. Me alegro, hubiera sido una pesadilla para ella de no ser así.

Grayson llega a casa justo cuando estoy por irme a la habitación. De hecho me ve apagar la televisión.
A pesar de buscar entretenerme con algo, no he dejado de pensar en el contacto que tiene Grayson registrado, es un poco extraño el asunto y decido no seguir callada.

—Hola —me dice cerrando la puerta.

—Hola —suelto seria, no puedo ocultarlo.

Se adentra dejando sus cosas sobre la mesa y camina hasta sentarse en el sillón a mi lado.

—¿Qué tal tu día? —pregunta tranquilo.

—Bien.

—¿Segura? Te noto un poco seria —se levanta del sillón y camina a la cocina para servirse un vaso de agua.

¿Debería preguntarle ahora?. Honestamente no me atrevo, tengo miedo a decepcionarme con todas las ideas que mi cabeza está creando, pero tampoco quiero seguir con la sensación de que algo está pasando.

—En realidad estoy confundida —me levanto segura y me siento en la barra para verlo mejor.

—¿Por qué? —frunce el ceño dejando su vaso.

—Hace unos días encontré el numero de mi ex-jefe en tu celular...

—¿Por qué tomaste mi celular? —pregunta de inmediato molesto.

Esto seguro tiene que ir por un muy mal camino.

—Me pediste que contestara la llamada de Ethan, ya que estabas en la ducha —me levanto de la barra y me paro delante. —vi el número en tus contactos.

—No es de tu incumbencia —pasa por un lado e intenta irse a la habitación, cosa que logra.

Lo sigo rápidamente, enfurecida. Entro y lo veo de espaldas a un lado de la cama, se desabrocha la camisa de una forma desesperada y evita mirarme cuando escucha que estoy ahí.

—No intentes librarte, insistiré hasta que tengas una respuesta, creo que la merezco —me cruzo de brazos firme y me quedo quieta observándolo.

—No la necesitas, sólo era para algo de la empresa —responde aún sin mirarme, lo conozco, eso lo hace cada que miente.

—¿Por qué la empresa contactaría al jefe de un restaurante? —frunzo el ceño desconcertada. —no estás siendo sincero conmigo y eso realmente me decepciona.

—Bien —suspira y me mira por fin, lo noto nervioso pero intenta disimularlo con una expresión dura. —le di dinero, ¿contenta?.

—¿A cambio de... qué? —trago saliva, si es lo que estoy pensando no me gustaría escucharlo.

—Eso no tiene importanc...

—Grayson, dime —interrumpo en un tono alto, sin quitarle la mirada de encima.

Me ve unos segundos, y finalmente se da por vencido. Baja la mirada avergonzado y niega.

—A cambio de que te despidiera.

—¿Qué? —lo miro sorprendida y siento un nudo en la garganta.

Tenía el presentimiento de que algo así iba a pasar, y la verdad me sorprende que haya tardado tanto. Reprimo el impulso de llamarle de todas las formas posibles que me vienen a la cabeza y me paso las manos desesperada por el pelo.

—Leah, lo hice porque era lo mejor para ti, ese trabajo no era bueno... —excusa, hablando rápido pero lo más relajado que puede.

—¿Cómo carajo puedes decir eso? —le pregunto furiosa. —sabes mejor que nadie que me quedé sin departamento, sin nada. Ese trabajo era lo único que tenía —me aparto de él.

—Pero estabas aquí, conmigo no te habría hecho falta nada —se acerca.

—Da igual, Grayson. No puedes tomar esas decisiones por mí, menos... —ni siquiera puedo mencionarlo. —menos con dinero.

—Todavía no estábamos juntos —dice.

—Y eso lo hace aún peor —niego dándome la vuelta, siento que mis ojos se humedecen pero no estoy muy segura de querer llorar.

—Leah —camina de inmediato hasta mí y me sujeta de la muñeca. —escucha.

—No —me suelto. —déjame sola.

—Lo siento, de verdad no sabes cuanto lo siento —suelta histérico. —tenía miedo de que te fueras, y pensé que estaba haciendo lo mejor.

—¿Lo mejor para quién? —trago saliva. —querías que me quedara aquí, por eso amenazaste a mi jefe para quedarme sin trabajo y no tener otro lugar a donde ir.

—Lo lamento, sé que no debí hacerlo, pero no podía dejarte ir de nuevo, tenía... miedo.

—Por favor, sólo déjame sola ahora —niego cerrando los ojos con fuerza y me doy la vuelta para entrar a la otra habitación.

Cierro la puerta y el seguro al entrar. No puedo resistir más y me echo a llorar, me pone mal pelear con él pero realmente me dolió lo que hizo. Arrastro mi cuerpo hasta la cama y me tiro cubriéndome la cara para no sollozar tan fuerte.

Actualizo lo antes que pueda, lo prometo.
Las amo a todas❤️

I still wait for you | 2 | Grayson Dolan (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora