I still wait for you | 2 | Grayson Dolan (terminada)

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Llego al departamento ligeramente decepcionada, pensé en llamar a Grayson pero ha rechazado todas mis llamadas y eso sólo me hace pensar que intenta evitarme.

Decido comer algo en compañía de Trina, y me despido de ella cuando anochece. Algo cansada y con la pijama puesta camino hasta el sillón de la sala y prendo el televisor. No me da seguridad irme a la cama sin ver que Grayson llegue a casa, quiero decir, me interesa que llegue bien.

Busco cualquier programa entretenido y me acomodo con las almohadas mientras mis ojos luchan por no cerrarse.
Y justo cuando logran salirse con la suya y cerrarse, la puerta principal se abre.

Me levanto asustada, viendo a Grayson llegar al departamento, con su saco colgando en uno de sus brazos e intentando quitarse la corbata con el otro.

—Hola —me dice cansado. —¿qué haces despierta? —frunce el ceño dejando sus cosas sobre la mesa.

—Me aseguraba de que llegaras a casa.

—Deberías irte a dormir, es tarde.

—Está bien —me encojo de hombros. —¿quieres que te prepare algo de cenar?.

—No, gracias, nena.

—Te ves cansado —me cruzo de brazos.

—Trabajé de mas —sonríe viéndome. —pero quería tener un poco más de tiempo mañana contigo.

—Eso me gustaría bastante, hoy casi no pude verte —hago una mueca y él se acerca para abrazarme.

—Te estuve esperando todo el día en la oficina —dice mientras me abraza y yo frunzo el ceño. —¿estuviste ocupada?.

—Fui a verte —me separo ocultando no tan bien mi molestia. —tus secretarías no me dejaron pasar, te llamé varias veces pero no contestaste ninguna vez.

Frunce el ceño desconcertado y saca el móvil del bolsillo de su pantalón.

—Está apagado —me dice. —no recuerdo haberlo apagado.

—Pues debiste haberlo hecho, no hay otra razón.

—No recuerdo, entré a una junta y lo dejé con Amanda en la oficina.

—Mierda —me paso las manos desesperada por el cabello. —llamé a tu teléfono de la oficina y por cierto, Amanda me dijo que prohibiste las visitas.

—Nunca prohibí ninguna visita.

—¡Exacto! —alzo la voz. —fue Amanda, ella... —hago una pausa para respirar. —ella intenta arruinar nuestra relación, ¿qué no lo ves? —le pregunto pero permanece callado. —¿no lo ves, Grayson?.

—Leah... ¿Por qué haría algo así? —ríe ingenuo.

—Por dios —echo un suspiro y me alejo de él. —porque te quiere.

—Creo que deberías ir a dormir.

—Bien, parece que no te importa —lo miro devastada y niego con la cabeza para irme de ahí.

—Leah —me toma del brazo desafiante. —¿Por qué te molestas?.

—Porque me haces sentir como si estuviera loca —me cruzo de brazos. —Amanda prohibió que fuera a verte sin tu consentimiento y a ti te parece algo normal.

—No me parece normal, mañana hablaré con ella —tensa la mandíbula.

—Sabes... está bien, como sea —hago un segundo intento por irme, pero vuelvo a fallar.

—¿Pero segura que estás bien? —me toma nuevamente del brazo y me mira penetrantemente.

—Sí, Grayson —asiento insegura. —voy a dormir —trago saliva antes de soltar lo siguiente.