Una nueva oportunidad

Capitulo 5: Sentimientos de un shinobi

Título: Uchiha Obito no Monogatari

Género: Aventura/Romance/Amistad

Subgénero: What if.../ ¿Qué pasaría si...?

Advertencias: Muerte de personajes (no vayan a lloriquear, en la serie se murieron un chingo), uso de OC's

Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto, hago esta historia con el único fin de entretener.

Arco I

Capitulo 5: Sentimientos de un shinobi

Amegakure

La noticia sobre la masacre del clan Uchiha tomó por sorpresa no solo al líder de Akatsuki, también a Nagato y Konan así como a Rin. Obito relataba todo lo que Sarutobi le había explicado sobre el incidente, su voz se notaba un poco más seria de lo usual y no era para menos, él pudo ser uno de los tantos cadáveres de esa fría noche.

—Itachi Uchiha será parte del libro bingo de Akatsuki —decretó Yahiko cruzándose de brazos, aun le costaba creer que algo así hubiera sucedido en Konoha ¿Cómo una sola persona habría sido capaz de acabar con un clan tan poderoso? Incluso siendo un miembro del mismo no le parecía muy lógico, era una locura.

—El Hokage estará complacido de saber eso —respondió Obito con voz monótona.

—¿Cómo es posible que alguien hubiera sido capaz de algo tan monstruoso? Acabar con su propio clan... —Konan miró a sus dos amigos y luego al Uchiha con cierto pesar, aquello debía ser difícil de asimilar para él.

Mientras el líder y el Uchiha seguían platicando sobre el incidente y sobre Itachi, Rin no podía evitar mirar al azabache afligida, ¿Qué se suponía que sentía en esos momentos? ¿Miedo? ¿Angustia? Obito pudo haber muerto si no hubiera estado con ella en Amegakure...

—Así que el Uchiha estuvo muy cerca de la muerte de nuevo —aquella voz resonó en su interior haciéndole tensarse un poco.

—No digas eso por favor —pidió la kunoichi casi como suplica, aunque sin llegar a mirar a la imponente bestia que tenía frente a sí. Se fijó en el gran lago que representaba su mente, el lugar en el cual podía encontrarse con el biju que, aunque no la odiaba, aun ansiaba su libertad, pero de algún modo habían logrado desarrollar una mejor relación—, no soportaría que algo le sucediera de nuevo, no podría...

Ambos se fijaron como en el agua se reflejaba una de las memorias de Rin, esa en la cual Obito había sido aplastado por una roca y le había creído muerto por mucho tiempo. La idea de perder a su mejor amigo le aterraba. Con el tiempo, sus sentimientos por el Uchiha habían cambiado casi por completo, si antes ya era importante en su vida, no sabía cómo describir el ahora.

—Creo que lo subestimas demasiado —rompió el silencio que se había formado—. En todo el tiempo que llevo contigo, no he visto shinobis más fuertes que Obito y Kakashi, claro, eso sin contar al cuarto Hokage.

—No lo subestimo, sé que es muy fuerte —respondió. Ella admiraba el hombre en el cual se había convertido Obito, tan centrado, inteligente y valiente, pero aun quedaba algo de aquel niño sensible que se preocupaba por todos y ayudaba a los ancianos. Sonrió con cierta nostalgia al recordar tales momentos, cuando eran el equipo de Minato.

—¿Cuándo piensas decirle lo que sientes? —preguntó repentinamente la gran tortuga.

—No creo que pueda hacerlo —cerró los ojos un momento antes de suspirar—, Obito ya no debe sentir lo mismo, para él tal vez solo son cosas de niños.