Monsters Among Man||muke

cuatro.

—¿El mundo si que es pequeño, no? —fueron exactamente las palabras de Michael antes de salir del salón, posiblemente sabiendo de lo que pasaría a continuación.

A Luke le tomo un momento procesar todo lo que había pasado, dejándolo en cierta forma sin palabras.

Recapitulando, Michael Clifford iba a acostarse con primera recién que recién había llegado a la ciudad. Asqueroso.

Siendo sincero, le importaba realmente poco la vida sexual de la chica, con la cual ni siquiera era cercano. Solo habían intercambiado unas cuantas palabras en la última reunión familiar, a la que fue prácticamente fue obligado a ir y ya, no había mucha historia detrás. Pero, estaba claro que no dejaría que Michael ganara. Además, aquello parecía ser la perfecta excusa que había estado buscando para partirle el rostro al teñido que últimamente solo colmaba sus nervios.

Salió del salón de clases con calma acompañado de algunas personas mas que esperaban ansiosas ver el desenlace, hasta que su trayecto termino en la cafetería, donde se encontraba el chico de cabello rojo, apoyado en pared, esperando tranquilamente por su llegada. Casi pareciera que Michael había espero tanto por este momento como él.

—¿No planeas huir? —pregunto en tono de burla, acercándose peligrosamente hasta el teñido.

—Te lo dije antes y te lo repetiré, Hemmings —dijo Michael, mirando directamente a sus ojos con una mirada relajada —. No te tengo miedo.

Aquellas palabras bastaron para que soltara el primer golpe, cayendo directamente en la nariz de Michael, ocasionando que este tambaleara un poco y cayera al piso, era obvio que aquello no se lo veía venir.

Una vez que logro estabilizarse rió. Michael rió, confundiendo bastante a los presentes, para pasar a limpiar la sangre que brotaba por su nariz con la manga de su polera como si nada hubiera pasado, como si aquel golpe no le hubiera causado ni el más mínimo daño.

—Mierda —murmuro el rubio, sacudiendo su mano derecha la cual estaba adolorida por el impacto.

—Ambos sabíamos que este día llegaría. ¿Verdad, princesa? —comento Michael con una sonrisa en el rosto.

Luke solo podía sentir como la sangre se le subía a la cabeza gracias a la ira que comenzaba a sentir al escuchar a Michael pronunciar aquel apodo, que posiblemente escucho salir de su mejor amigo.

Luego, escucho los murmullos, haciéndolo darse cuenta de que la cafetería ya se encontraba casi llena. Había un grupo de personas alrededor suyo con teléfonos en las manos y apostando en quien ganaría la pelea.

—Maldito Ashton —logro decir el rubio, antes que un puño cayera sobre su mejilla.

Aquello lo tomo por sorpresa, teniendo que agacharse para despues recibir un rodillazo directamente al estómago, lo cual solo logro derribarlo, dándole la oportunidad a Michael de quedar arriba suyo.

Luke sabía que no podía quedarse atrás y junto todas sus fuerzas posibles para levantar sus brazos y poner sus grandes manos alrededor del cuello del teñido, dándole posiblemente una terrible sensación de asfixia al notar que este debilito la presión que ejercía a su pecho con su cuerpo. En ese momento aprovecho para recuperar sus fuerzas y rodar hacia un costado, saliendo de debajo de suyo.

Ahora, ambos se encontraban intentando ponerse de pie para poder dar el siguiente golpe.

El puño del rubio fue directo a la cara de Michael de nuevo, estrellándose en el ojo derecho de este, sabiendo que dejaría un perfecto moretón que casi todos notarían alrededor de aquellos amados ojos verdes.